Diari de les idees 65
14 julio 2022

Ideas de actualidad

Los acontecimientos de la quincena que recoge esta nueva edición del Diari de les idees han sido marcados por la celebración de la cumbre de la OTAN en Madrid en la que la Alianza Atlántica ha definido su nuevo concepto estratégico, la dimisión del Primer Ministro británico y artífice del Brexit Boris Johnson después de meses de turbulencias políticas sociales y económicas en el Reino Unido, el asesinato del ex Primer Ministro japonés Shinzō Abe, y la primera revuelta del hambre ocasionada por las repercusiones de la guerra en Ucrania que ha provocado la dimisión del Presidente y del Primer Ministro de Sri Lanka. Mientras tanto, Europa se está preparando para una crisis del suministro de gas que podría congelar sectores enteros de la economía de la UE a medida que crecen los temores que el gran gasoducto que transporta gas ruso hacia Europa se cierre definitivamente. En efecto, el temido escenario en que los países europeos tendrían que racionar su uso energético y desconectar industrias empezó a coger forma hace pocos días tras el cierre provisional del gasoducto Nord Stream 1. El paro forma parte de una interrupción “técnica” prevista de 10 días, pero analistas y políticos temen que la compañía rusa Gazprom, que ya ha cerrado o limitado el suministro de gas a 12 países de la UE, pueda optar por no reactivar el gasoducto cuando acaben los trabajos de mantenimiento.

El alargamiento de la guerra en Ucrania con perspectivas de que los combates sigan con avances y retrocesos para ambos bandos al menos hasta el próximo invierno no impide que se estén apuntando posibles salidas al conflicto a pesar del punto muerto al que parece haber llegado la vía diplomática. Así, en el Washington Post Michael O’Hanlon subraya que es la propia Ucrania quien tendría que decidir su futuro, no los Estados Unidos ni sus aliados. En este contexto, considera que el primer escenario tendría que ser un armisticio, aunque Rusia seguiría controlando el territorio ocupado hasta el momento y siendo objeto de sanciones, en principio sin que se endurezca el embargo del gas natural ruso. Asimismo, las misiones de observación de paz internacional posteriores al armisticio serían clave. Una vez instaurado el armisticio, las negociaciones para llegar a una mejor solución podrían empezar, eso sí, provocando mucha controversia si se imponen las tesis apuntadas entre otros por Henry Kissinger, en el sentido de que seguramente Ucrania tendría que ceder territorio. Eso comportaría –una vez hayan pasado unos años– la celebración de referéndums para determinar la soberanía sobre los territorios en disputa, aunque seguramente el estatus de Crimea quedaría al margen.

Wolfgang Streeck rompe en el diario El Salto con el consenso habitual sobre el aumento de los gastos en materia de defensa y de ampliación de la OTAN cuando afirma que desde el primer día de la guerra Alemania y otros países occidentales se han visto sometidos a una insistente presión política por parte de los Estados Unidos para que aumenten su gasto militar para cumplir con el antiguo objetivo de la OTAN que sus estados miembros dediquen el 2% de su PIB en Defensa. Así, en la cumbre de la OTAN celebrada en Praga en 002, ya se debatió el objetivo del 2% de gasto en el contexto del 11-S, de la incipiente “Guerra contra el Terror”, de la inminente segunda invasión de Irak, de la ampliación del mandato de la Alianza para realizar operaciones fuera de su área de intervención tradicional y de la decisión de ampliarse a los países de Europa del Este, empezando por los países del Grupo de Visegrado. Finalmente, el objetivo se adoptó formalmente en la cumbre de la OTAN de 2006 celebrada en Riga. En 2008 la canciller Merkel y el presidente de Francia, Sarkozy, consiguieron, en el último minuto, bloquear la invitación formal a Ucrania y Georgia para que se unieran a la Alianza, lo que debía constituir el tercer y último paso de su expansión hacia Europa del Este. En 2014, después de la revolución de Maidan que derrocó al presidente ucraniano pro-ruso y la posterior anexión de Crimea por parte de Rusia, se renovó el compromiso con el objetivo del 2%. Todo indica que en los próximos años se producirá una lucha encarnizada entre las industrias armamentísticas de Europa y los Estados Unidos, que competirán para conseguir una parte del gasto que tendrá que hacer, sobre todo Alemania. Por su parte, Francia considerará el fondo especial como otra oportunidad para emprender una política industrial dirigida por ella misma, aplicable a la industria europea de defensa y dedicada a la fusión de los productores franceses y alemanes para que los nuevos conglomerados se conviertan en actores globales lo bastante fuertes como para competir con sus homólogos norteamericanos. En este contexto, Alemania también dedicará una parte del gasto a la nueva versión del ECR (Electronic Combat Role) del Eurofighter y probablemente más todavía al FCAS, el Sistema Aéreo de Combate Futuro, que combina satélites, aviones no tripulados y caza bombarderos. En último término, por muy terrible que sea para el pueblo ucraniano, la guerra se desarrolla en un contexto de dimensiones mucho mayores: la de la batalla que se libra entre una potencia hegemónica global en declive y otra en ascenso, ya que una función importante cumplida por la guerra actual es la consolidación del control de los Estados Unidos sobre sus aliados europeos, necesarios como apoyo para el “cambio hacia Asia” concebido por los EE.UU. desde la presidencia de Obama. Así, la misión de Europa es evitar que Rusia se aproveche de que los Estados Unidos dirigen su atención hacia otros lugares del planeta y, si es necesario, unirse a la potencia norteamericana en su expedición asiática (para lo que el Reino Unido ya se está preparando activamente).

Por su parte, Ali Ahmadi analiza en The Diplomat las consecuencias geoeconómicas de la guerra en Asia. Argumenta que se están dibujando tres tendencias interrelacionadas provocadas por la invasión rusa y la sucesión sin precedentes de sanciones occidentales impuestas a Moscú, que están redibujando los mapas comerciales en el continente. Las dos primeras tendencias están estrechamente relacionadas con el hecho de que la guerra en Ucrania y los embargos económicos asociados han creado importantes bloqueos con respecto al Nuevo Puente Terrestre Eurasiático (New Eurasian Land Bridge, NELB). Mientras Beijing basa su Iniciativa de la Ruta de la Seda (Belt and Road Initiative, BRI <A[BRIZNA|HEBRA]>) en la mística de la antigua Ruta de la Seda, su ruta terrestre principal hacia los mercados de Europa occidental pasa por la NELB, que transita por Asia Central y Rusia hasta llegar al continente europeo. Esta ruta es tan importante que los funcionarios chinos ya hace años que están preocupados por la dependencia excesiva de Rusia por motivos logísticos. La segunda tendencia, también relacionada con el bloqueo de la NELB, es el aumento de la actividad logística de otros países asiáticos, especialmente de Asia Central y Asia del Sur, para llegar a los mercados de Occidente a través de Irán. Durante las últimas semanas, se ha producido una ráfaga de actividades en torno a la expansión del acceso comercial que involucra Irán y los países de su entorno inmediato. La tercera tendencia, y quizás la menos reconocida, es la estrategia de apertura de Rusia hacia el Este con vistas a mitigar los efectos de las sanciones y diversificar su comercio lejos de las economías occidentales. Si la ruta de Rusia hacia China o el Asia central es sencilla, en cambio su ruta de acceso terrestre a la India, un socio comercial clave que se ha negado a unirse a la coalición de sanciones occidentales, es mucho más complicada. A la India, rodeada por sus adversarios Pakistán y China, se tiene que llegar por mar, viajando por el canal de Suez, y la ausencia de una ruta más directa puede convertirse en una vulnerabilidad, sobre todo en el actual contexto político. Eso aumenta la importancia del Corredor Internacional de Transporte Norte-Sur (International North-South Transport Corridor, INSTC), que atraviesa el Cáucaso para conectar Rusia con el puerto iraní de Bandar Abbas en el estrecho de Ormuz, desde donde se dispone de una ruta marítima más corta hacia la India. Eso no sólo reduce drásticamente el tiempo de tránsito de las mercancías entre la India y Rusia, sino que también evita rutas marítimas que puedan ser sometidas a bloqueos políticos.

The Economist destaca que la guerra en Ucrania también está afectando notablemente a las relaciones de Rusia con sus vecinos del Ártico, aunque ahora mismo la posibilidad de un enfrentamiento sobre terreno sea muy poco probable. Así, el 3 de marzo, tan sólo una semana después de que Vladímir Putin invadiera Ucrania, siete de los ocho miembros permanentes del Consejo del Ártico, la principal organización intergubernamental de la región, comunicaron que boicotearían las futuras reuniones. Los ocho estados que conforman el Consejo son los Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega, Suecia y Rusia, que asume actualmente la presidencia, hasta que el próximo año tome el relevo Noruega. Por otra parte, a finales de junio, el ministerio de Asuntos Exteriores ruso anunció que se tomarían represalias contra Noruega por haber impuesto sanciones que bloquean las mercancías de Rusia destinadas a Svalbard, un archipiélago del Ártico. Aunque este territorio pertenece en Noruega, un tratado de 1920 otorga a Rusia el derecho de explotar sus recursos naturales y muchos de los asentamientos están poblados por rusos. Eso en un contexto donde el aumento de temperaturas y el deshielo de los casquetes polares comportan que las rutas del mar ártico sean cada vez más navegables, los recursos naturales más accesibles y las fronteras más vulnerables. No hay que olvidar que Severomorsk, un puerto en el mar de Barents situado en el círculo polar ártico, es la principal base de la flota rusa en el territorio, incluyendo submarinos con capacidad nuclear. Rusia ha edificado al menos 475 construcciones militares a lo largo de su frontera norte en los últimos seis años. Como respuesta, la OTAN organizó en el mes de marzo en Noruega las maniobras militares más importantes de las últimas tres décadas y los Estados Unidos está considerando renovar y ampliar sus fuerzas armadas en Alaska. Asimismo, la cooperación científica occidental y rusa se ha roto debido a la guerra y las relaciones empresariales se han deteriorado. Rusia ha invertido 300.000 millones de dólares para obtener petróleo y gas en el Ártico, mientras que las empresas occidentales, como BP o Shell, se han retirado del territorio. Eso ha abierto la puerta a la China que, a pesar de no tener ningún territorio en el Ártico, ha firmado un contrato de treinta años con Rusia para importar gas de los yacimientos de Yamal, en el Ártico siberiano, a través de un gasoducto común.

En cuanto a los asuntos globales, el acontecimiento más relevante es que la OTAN ha aprobado en la cumbre de Madrid su nuevo Concepto Estratégico, el documento que plasma los grandes objetivos y prioridades de la Alianza y que señala las amenazas a las que podría tener que enfrentarse. El Concepto se ha actualizado nueve veces desde la fundación de la OTAN en 1949. El nuevo documento busca adaptar la organización atlántica a un cambio geopolítico profundo. La invasión rusa de Ucrania puso fin a 25 años de convivencia pacífica entre la OTAN y Rusia, una situación que ya había quedado muy dañada después de la anexión rusa de Crimea en 2014. Ahora la Alianza señala el régimen del presidente ruso, Vladímir Putin, como “la amenaza más significativa y directa”. Por otra parte, el nuevo Concepto recoge por primera la atención de la Alianza sobre China, la cual se define como un desafío sistémico.

Paralelamente, Paul McLeary destaca en Politico los cinco aspectos más relevantes de la cumbre. Primero, el foco principal puesto en Rusia ya que la OTAN no ignora la amenaza que supone una Rusia imprevisible. El nuevo documento de concepto estratégico de la Alianza advierte que no se puede descartar la posibilidad de un ataque contra la soberanía y la integridad territorial de los aliados por parte del Kremlin. Segundo, por primera vez China se ha incluido en la agenda, aunque de manera un tanto desdibujada, ya que se considera que hoy por hoy China es un problema, pero todavía no una amenaza. Aun así, la OTAN invitó por primera vez a la cumbre a los líderes de Japón, Corea del Sur, Nueva Zelanda y Australia para iniciar consultas, una clara señal que mira más allá de Rusia a la hora de catalogar las amenazas militares y económicas. Tercero, el papel de Turquía que primero se declaró absolutamente en contra de la adhesión de Finlandia y Suecia, hasta que cambió de opinión. Suecia y Finlandia han acordado evitar tener relaciones con el PKK, el grupo kurdo independentista que lucha contra las fuerzas turcas, y se han comprometido a abandonar las sanciones militares impuestas a Turquía por su invasión de Siria. La Casa Blanca también dio apoyo públicamente a la venta a Turquía de kits de modernización para los F-16, un acuerdo pendiente desde hacía meses. Cuarto, la famosa Fuerza de Reacción de la OTAN, una unidad de 40.000 soldados que se puede desplegar en 30 días, está destinada a acabar en la papelera de la historia, aunque todavía no se sabe cuándo. Será sustituida por un contingente estable de 300.000 soldados desplegados en todo el continente como parte de la mayor revisión de la defensa colectiva y de disuasión desde la Guerra Fría. Finalmente, los dirigentes de la Alianza están preocupados por los acuerdos de control de armas que los Estados Unidos abandonaron bajo la administración Trump. Rusia llevaba años incumpliendo el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Medio de la época de la Guerra Fría, probando en secreto misiles de crucero prohibidos. La administración Trump abandonó el pacto en 2019, lo cual generó críticas de Europa. En 2020, la administración norteamericana abandonó el Tratado de Cielos Abiertos, un acuerdo de 34 países que permitió a los Estados Unidos, Rusia y otros hacer volar sus aviones sobre el territorio de los demás firmantes para confirmar las actividades militares y mantener una cierta transparencia. Rusia había denegado durante mucho tiempo el espacio aéreo sobre su enclave de Kaliningrado y cerca de su frontera con Georgia, hecho que provocó la retirada de los Estados Unidos. Rusia abandonó formalmente el acuerdo en 2021.

Por su parte, Xulio Ríos analiza en la revista CTXT la reacción de China ante esta reorientación estratégica de la Alianza Atlántica y afirma que Beijing confirma su estatus irreversible como protagonista mundial ya no sólo en el ámbito de la economía o el comercio sino también en el de la seguridad, y apunta algunas observaciones relevantes. La primera es que China se define como rival, no como amenaza, calificativo reservado sólo a Rusia, aunque convendría trascender el valor de lo que es meramente semántico; de esta manera, en relación con China, imperaría la denominación establecida por la Comisión Europea en 2019. La segunda es que algunos países, como los Estados Unidos, sí que la consideran abiertamente una amenaza, la mayor de todas, aunque el nivel de cohesión estratégica entre todos los países miembros no ofrece una caracterización similar. En tercer lugar, se identifican los principales focos problemáticos (expansión y opacidad, conflictos marítimos y territoriales, 5G, etc.) que justificarían la alerta que la emergencia china supone para los intereses de seguridad de la OTAN. Naturalmente, en China este nuevo escenario preocupa, tanto por sus implicaciones políticas (cuyo alcance efectivo habrá que precisar) como por razones de seguridad mientras el previsible deterioro de las relaciones puede afectar a la estabilidad y la viabilidad de la hoja de ruta trazada para 2049, cuando está previsto que la República Popular haya completado su largo proceso de modernización. De entrada, China enmienda la lógica que ha inspirado esta cumbre, en virtud de la cual se considera que, como más incertidumbre, más se necesita la OTAN. Beijing no deja de recordar que, con las expansiones anteriores hacia el Este, la alianza no ha conseguido hacer de Europa un lugar más seguro. Al contrario. Eso vendría a demostrar que la seguridad tiene que ser integral e inclusiva, y no de unos a costa de los demás. Desde la perspectiva china, el cúmulo de contradicciones no puede ser más elocuente: la OTAN se rearma de manera alarmante pero es China a quien se acusa de elevar de manera preocupante el nivel de gasto militar; o se defiende en capa y espada la integridad territorial de los países miembros pero al mismo tiempo se anima abiertamente el secesionismo de Taiwán, una “línea roja” para Beijing que es consciente de que la presión militar y estratégica irá en aumento y que debe mejorar y afinar su capacidad de respuesta. Ante el ascenso de la seguridad en la priorización de valores e intereses de Occidente, también es previsible que lo mismo se produzca en China, aunque sin trastocar fundamentalmente el rumbo seguido hasta ahora. Eso significa que China evitará repetir el viejo error soviético y caer en la trampa de sumarse a una carrera de armamentos suicida,, que seguirá estableciendo y fortaleciendo relaciones pragmáticas de asociación pero no alianzas en sentido estricto, y que la lógica del desarrollo seguirá imperando sobre cualquier otra.

Siguiendo con China, Nosmot Gbadamosi subraya en Foreign Policy que mientras Europa y Estados Unidos focalizan su atención sobre Ucrania, China se posiciona como mediadora en los conflictos de África oriental. Beijing ha organizado en Adís Abeba una Conferencia de paz, buen gobierno y desarrollo para el Cuerno de África, abandonando así su tradicional política de no inmiscuirse en los asuntos internos de países terceros, para así poder ganar influencia allí donde Estados Unidos la pierde. La región tiene una gran trascendencia para su política exterior: en Etiopia China ha llevado a término grandes inversiones y mantiene cerca de 400 proyectos de construcción y manufacturas; en el Sudán y Sudán del Sur controla el monopolio del petróleo; y en Yibuti tiene su única base militar en el continente africano. Así pues, el enviado chino en el Cuerno de África insistió en que dedicarán todos los esfuerzos necesarios para alcanzar compromisos de paz para acabar con los conflictos vigentes en la región. Y es que el problema no tiene sólo que ver con la seguridad, sino que la región está viviendo una grave crisis alimentaria provocada por la sequía, por culpa de la cual un tercio de los sudaneses se enfrentan a la hambruna, y 4 millones de sudaneses del sur viven en condiciones de refugiados y desplazados internos dentro de su propio país. Mientras tanto, los EE.UU. ven cómo sus enviados en la región se suceden sin conseguir resultados y se desvanece la influencia americana como consecuencia de sanciones interpuestas sobre Etiopía por violaciones de derechos humanos en los últimos conflictos internos. Por su parte, China quiere mantener una postura de diálogo con todas las partes implicadas para conseguir que los conflictos se resuelvan sin la ayuda de Washington, aumentando así su influencia en la región.

También refiriéndose al África, Philippe Leymarie señala en Le Monde Diplomatique que Israel ha sido una de las estrellas de Eurosatory, un certamen dedicado al equipamiento de los soldados de las fuerzas terrestres (armas individuales, artillería, vehículos blindados, robots) hasta su dimensión aérea (helicópteros, misiles, drones), así como a la panoplia de las fuerzas policiales y de seguridad. Su industria armamentística cuenta con el apoyo decidido del Estado, que considera la vitalidad de este sector como una condición para su supervivencia. Así, la empresa Elbit registró el año pasado una cartera de pedidos de 13.700 millones de dólares, y consiguió más de 5.000 millones de facturación, de los cuales un tercio en los Estados Unidos. Las ventas de armas producidas en Israel alcanzaron un récord de 11.300 millones de dólares en el 2021 y las ventas han aumentado un 55% en dos años, impulsadas por el aumento de la tensión entre europeos y rusos; por las necesidades creadas en los conflictos en Oriente Medio y Asia; y más recientemente por las perspectivas abiertas por los Acuerdos de Abraham, y la guerra en Ucrania. Si tradicionalmente Europa ha sido el principal cliente de las empresas israelíes, en los últimos años la seguridad vuelve a ser un foco importante de las relaciones entre Israel y el continente africano. Con el apoyo de su agencia de cooperación, el Mashav, así como de empresas privadas, Tel-Aviv ofrece una amplia gama de servicios: venta e implementación de armas de todos los calibres, equipos de vigilancia, así como módulos de formación militar y policial, asesoramiento y asistencia en seguridad o gestión de crisis, etc. En los últimos años, es efectivamente a través de la lucha contra el terrorismo que las relaciones han tomado fuerza con una serie de países africanos: Guinea, Chad, República Democrática del Congo, Sudán y Marruecos se han añadido recientemente a socios históricos como Kenia o Uganda, hasta el punto que el año pasado Israel estuvo cerca de recuperar el estatus de observador en la Unión Africana, que la antigua OUA le había retirado, aunque finalmente Argelia y Sudáfrica se opusieron.

Para cerrar este apartado de política internacional, con motivo de su reciente asesinato, David Frum destaca en The Atlantic que el líder japonés Shinzō Abe fue el arquitecto de una alianza de seguridad vital en la región del Indo-Pacífico y que merece ser recordado como uno de los grandes políticos internacionalistas de su época, el principal arquitecto de la seguridad colectiva en la región del Indo-Pacífico mediante la creación de alianzas e instituciones, como por ejemplo la activación en 2007 del Quadrilateral Security Dialogue (QUAD).

En el ámbito europeo destaca la dimisión del Primer Ministro británico Boris Johnson tras muchos meses de tensión política en el Reino Unido. Desde las páginas de The Atlantic, Tom McTague destaca que las últimas horas de Johnson han sido un final sórdido y bastante extraordinario de una carrera sórdida y bastante extraordinaria, profundamente inútil la mayoría de aspectos e incontestablemente histórica en otros. El que quizás haya sido el peor primer ministro de la historia moderna británica, pero también el más consecuente, se ha ido dejando un legado personalísimo –el Brexit– que perdurará por encima del de sus recientes predecesores. En los pocos años transcurridos desde el referéndum del Brexit de 2016, Johnson llegó, vio, conquistó y después se hundió en medio de una constelación de escándalos como muchos ya habían sospechado que pasaría. La marcha de Johnson dejará poco rastro de su breve hegemonía sobre la política británica. Habrá muy pocos johnsonistas en el Partido Conservador para honrar su legado y pedir un retorno a los principios johnsonistas, como pasó con Margaret Thatcher. El johnsonismo, si alguna vez existió, desaparecerá casi tan rápidamente como el propio primer ministro. Una de las razones para ello es que, aparte en el tema del Brexit, Johnson no es ningún radical. A diferencia de Thatcher, no ha querido recortar el tamaño del estado ni tampoco ampliarlo. No quiso ninguna revolución ni en las actitudes sociales ni en la política exterior británica. Su principal agenda política ha sido “unir y nivelar” el país, pero eso no es controvertido. Lo mejor que se puede decir es que, muy a su pesar, su éxito ha sido llevar el tema de las diferencias regionales al centro de la política británica.

En la misma línea, Simon Jenkins aboga en The Guardian por la creación de una nueva federación británica. En 2007, los nacionalistas escoceses accedieron al poder en Edimburgo y nunca más lo han perdido. Aunque la popularidad de la independencia entre los escoceses ha ido fluctuando, los votantes menores de 50 años están abrumadoramente a favor. Mientras tanto, en Irlanda del Norte, el caos del Brexit ha alimentado la expectativa de un referéndum de unión con el sur a medio plazo. Incluso en Gales, el partido nacionalista Plaid Cymru ha adquirido un nuevo vigor, y un Gales independiente ya cuenta con el apoyo de entre una cuarta parte y un tercio de los votantes. La respuesta de Inglaterra a este estallido de disensión ha sido la inercia. En toda Europa, la construcción nacional ha sido durante mucho tiempo un arte complicado. Como ha demostrado la historiadora política Linda Colley, eso ha requerido respeto por la identidad e ingenio para encontrar fórmulas de autonomía. En el Reino Unido, en cambio, el ya ex primer ministro calificó de “desastre” la descentralización en Escocia. Tras el Brexit, Johnson insistió en que todos los poderes y subvenciones de la UE se devolvieran no a los gobiernos descentralizados sino a Londres. Mientras tanto, sólo uno de cada cinco votantes en Inglaterra afirma que le importa si Escocia se independiza. En este contexto. la formación de un Reino Unido federado de Inglaterra, Escocia y Gales se beneficiaría mucho de su diversidad.

Otro tema relevante es que el Grupo de Visegrado (V4), que en el pasado se había unido en torno a grandes objetivos políticos, se ha dividido debido a la invasión de Ucrania y ahora Eslovaquia quiere volver a destacar los objetivos compartidos del grupo durante su presidencia. Peter Dlhopolec apunta en Balkan Insight que los cuatro países del bloque –Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia– nunca desarrollaron una política exterior común en sus  31 años de existencia, que surgió en 1991 para facilitar su adhesión a la OTAN y a la UE. En cambio, sobre todo a nivel de la UE, ha intentado coordinar sus posiciones en diferentes asuntos relacionados con la Unión. No obstante, el ministro de Asuntos Exteriores eslovaco considera que Hungría, que ostentaba la presidencia del grupo hasta ahora, a menudo quiso dar la impresión que existía una política exterior común. Pero ahora Hungría se está aislando cada vez más en la UE debido a su gobierno autocrático y su política anti-UE impulsada por el partido Fidesz, así como por la estrecha relación de Orbán con el presidente Vladimir Putin. La guerra también ha convertido Hungría en un paría dentro del V4, cuando antes de la invasión podía contar con el apoyo de Polonia en sus diferentes disputas con Bruselas. De hecho, la Comisión Europea sigue preocupada por el estado de derecho y la democracia en ambos países. En 2020, Polonia y Hungría incluso intentaron bloquear el presupuesto de la UE porque vinculaba el desembolso de fondos con la adhesión al estado de derecho. Eslovaquia y su gobierno pro europeo liderado por Eduard Heger, se han comprometido a adoptar durante su presidencia un enfoque pragmático y a devolver el V4 a las raíces de su cooperación basada en el respeto a la democracia y el compromiso con la integración europea. Eso también incluye el apoyo a Ucrania y Moldavia, a las que ya se les ha concedido el estatus de candidato a la UE, Georgia y los Balcanes occidentales que están en camino, por ejemplo a través del único organismo institucionalizado del grupo, el Fondo Internacional de Visegrado.

Nicoletta Pirozzi argumenta en Social Europe que para mitigar el disfuncionamiento de su política exterior dentro del contexto de reordenamiento geopolítico global, la UE debe poner fin al principio de unanimidad. En efecto, la guerra de Ucrania vuelve a mostrar los límites del funcionamiento de la política exterior, de seguridad y de defensa de la Unión Europea. Asimismo, las dificultades para aprobar el sexto paquete de sanciones contra Rusia —y en particular las relacionadas con la importación de petróleo— demuestran las disfunciones de una UE que conserva una fuerte huella intergubernamental, dominada por la lógica del consenso y, por lo tanto, por los ejecutivos nacionales y sus prioridades. En el pasado, estas disfunciones ya paralizaron la UE en crisis y conflictos como los de Libia, Sahel y Oriente Medio. Hoy parece evidente que, si la Unión quiere sobrevivir en un entorno caracterizado por un mayor dinamismo geopolítico, tanto por parte de sus rivales estratégicos como de sus socios, debe poner en marcha las reformas que la puedan dotar de un sistema de gobierno eficaz para la política exterior y de seguridad. Un primer elemento se refiere a mecanismos de funcionamiento más flexibles. Un cierto grado de diferenciación siempre ha formado parte de la integración europea, desde la zona euro hasta el espacio Schengen pasando por la defensa. Los modelos basados en la integración y la cooperación flexible también se deben aplicar a las áreas de política exterior y de seguridad, como antídoto contra la amenaza de fragmentación e incluso de desintegración. En los tratados ya hay mecanismos, como la abstención constructiva y la cooperación reforzada, pero pocas veces se han utilizado, con la notable y reciente excepción de la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO) en defensa. Un segundo elemento se refiere a la reforma de las normas de decisión y, en particular, a la unanimidad, que demasiado a menudo ha comportado inacción. En el pasado, la superación de la unanimidad ha permitido desbloquear largos periodos de bloqueo institucional, como en el caso del mercado interior en los años ochenta. De la misma manera, la introducción del voto por mayoría cualificada podría ser muy beneficiosa para la política exterior. Aumentaría la capacidad de actuación de la UE, no sólo porque haría falta más de un estado miembro para bloquear una decisión, sino también porque los estados miembros que se hallasen en minoría se verían estimulados a intensificar los esfuerzos de negociación, construir alianzas y ayudar a llegar a un acuerdo. Finalmente, Pirozzi afirma que hay que introducir medidas específicas en el sector de la defensa. En los últimos años, la unión ha dado un impulso político muy necesario a la cooperación europea en este ámbito, pero ha llegado el momento de producir resultados tangibles, sobre todo para no perder impulso. Hace falta pues una visión sistémica que proporcione un marco global coherente entre todas las iniciativas, de manera que se refuercen, no se superpongan ni se dupliquen, y se respete un equilibrio adecuado entre la dimensión intergubernamental y la de la UE. Esta visión tiene que ser apoyada por una revisión de la arquitectura institucional global.

En el ámbito económico, Heather Grabbe  afirma en Euractiv que la reciente cumbre del G7 mostró los peligros de pensar a corto plazo. Mientras los líderes de los países más ricos del mundo pregonaban soluciones rápidas, compromisos inconexos y mensajes contradictorios, varias partes del mundo sufrieron temperaturas altísimas mientras otras padecían graves inundaciones. La emergencia climática se añade a un contexto de inflación y crisis alimentaria y las decisiones a corto plazo no solucionarán los problemas. Grabbe argumenta que un cambio de pensamiento holístico es necesario, tomando como ejemplo el Green Deal europeo. En lugar de crear nuevas dependencias hacia los combustibles fósiles e infraestructuras, Europa tiene que focalizarse en las renovables: circularidad es resiliencia. Un ejemplo de eso podría traducirse al generar incentivos para persuadir a los ciudadanos de renunciar a los coches y al transporte individualizado. Como respuesta, el sector de la automoción podría ofrecer a los ciudadanos la movilidad que necesitan mediante servicios compartidos. También considera que Europa debe abandonar un sistema que vincula el empleo y el crecimiento con la producción industrial y que sobrevalora el consumismo. En cambio, debería tender hacia un sistema económico que satisfaga las necesidades humanas mediante el acceso a bienes y servicios más duraderos, más saludables y más eficientes. Un enfoque que ponga en el centro las necesidades es esencial, vez de valorar el crecimiento del PIB. Una economía circular nutrida de energías renovables dependería mucho menos de las importaciones de energía, materias primas y bienes, lo cual reduciría su vulnerabilidad<A[ante|delante de]> ante autócratas como Putin cuando estos deciden desestabilizar las cadenas de suministro.

Por su parte, Renaud Lambert analiza en Le Monde Diplomatique las relaciones conflictivas del FMI con los países del mundo, ya que las reglas parecen fluctuar: austeridad draconiana para unos, generosidad ilimitada para otros. Las reformas que pide a cambio de su asistencia —privatización, desregulación, austeridad, etc. — determinan en buena medida las condiciones de vida de las poblaciones afectadas: ¿podrán recibir tratamiento médico, ir a la escuela, alimentarse? En este contexto, el primer tipo de asistencia que el FMI presta a sus miembros es de carácter técnico. A menudo ilustra los efectos retardados de la colonización: una vez obtenida la independencia, los países son soberanos, pero sin un estado digno de este nombre. Algunos funcionarios explican que en el transcurso de sus misiones de asistencia al África, han tenido que dar clases de inglés a altos funcionarios y que a veces se dan cuenta de que determinados países hacen sus cuentas nacionales con Excel. Otros ni siquiera tienen ordenador. Pero la principal ayuda que el FMI ofrece a sus miembros toma la forma dura y rápida de un préstamo. Cualquier miembro que se encuentre con un problema de balanza de pagos puede solicitar ayuda financiera. Este tipo de dificultad significa que el país ya no dispone de la moneda fuerte necesaria para pagar su deuda o importar los alimentos que necesita su población, como sucede actualmente en Sri Lanka. A continuación, se inicia un diálogo preliminar durante el cual el Fondo expone las condiciones en las que podría prever la intervención, ya que el FMI sólo otorga préstamos sobre la base de un programa de ajuste que permita resolver los problemas que han provocado la crisis. Y, para asegurarse que la voluntad de reforma del país en dificultades no disminuya con el tiempo, los desembolsos del FMI se hacen de manera fraccionada. En caso de incumplimiento de los compromisos, los pagos cesan. Como resumió Dominique Strauss-Kahn cuando era director del FMI, la institución no tienen por vocación hacer caridad…

En materia de sostenibilidad y cambio climático preocupa la decisión del Parlamento Europeo de avalar la propuesta de la Comisión Europea que el gas y la energía nuclear sean consideradas energías verdes, de manera que ambas fuentes de energía se equipararán a las energías renovables en los programas de finanzas sostenibles, aunque expertos y grupos ecologistas consideran que la medida retrasará la transición energética europea. Así, América Hernández apunta en la revista Politico que con esta votación, Europa modifica la norma y permite que el gas y las nucleares puedan competir con la energía solar o la eólica, entre otras renovables, para recibir ayudas propias de tecnologías no emisoras de gases de efecto invernadero. También se considerarán verdes todas las centrales nucleares que cuenten con un permiso de construcción anterior a 2045, siempre que presenten garantías de poder tratar los residuos radiactivos. Con respecto al gas, se ha aprobado que las centrales deben emitir menos de 270 kg de CO2 por KW/h y disponer de un permiso de construcción anterior a 2030. En la misma línea, Svitlana Krakovska advierte en The Guardian que este cambio en la taxonomía verde europea es un auténtico regalo para Vladímir Putin ya que la guerra de Rusia contra Ucrania es una guerra pagada por los combustibles fósiles que calientan el clima y ahora el Parlamento Europeo acaba de votar una normativa que permitirá aumentar en miles de millones de financiación para el gas fósil ruso. Por su parte, el ministro de la energía ruso Nikolai Shulginov, en declaraciones realizadas en la web de Energy Intelligence antes de la invasión de Ucrania, dijo que la inclusión del gas natural en la taxonomía verde era una prueba de que la UE se había dado cuenta de que había cometido un error en su concepto de transición energética.

Desde las páginas de Le Grand Continent, Fatih Birol, director de la Agencia Internacional de la Energía, afirma que se deben impulsar con urgencia varias palancas para asegurar que las personas estén en el centro de la transición verde en el continente africano, ya que es la región del mundo más expuesta a los efectos del cambio climático, mientras que sus habitantes son los que menos han contribuido a ello. A pesar de los retos que eso representa, el informe Africa Energy Outlook 2022 de la Agencia Internacional de la Energía considera que la transición energética es una gran promesa para el desarrollo económico y social del continente. La ambición global de conseguir cero emisiones de gases de efecto invernadero en 2050 establece una nueva orientación en el sector energético. Esta transición hacia emisiones globales limpias está reduciendo los costes de las tecnologías limpias y cambiando los modelos de inversión global. Los países africanos están en una posición única para beneficiarse de las mejoras tecnológicas que conllevan estos cambios y atraer flujos crecientes de financiación verde. En África, la transición abre muchas oportunidades. Las soluciones de acceso a la energía solar se encuentran entre las que crecen más rápidamente en las zonas rurales. Las bombas de riego con energía solar son más baratas que las bombas de motor diésel y pueden mejorar la productividad de los alimentos y la resistencia a las sequías. El montaje de estas soluciones de acceso a la energía y la fabricación de componentes clave representan oportunidades crecientes para la industria africana. No obstante, estos sectores se verán superados en gran medida por las oportunidades crecientes para África de convertirse en un actor importante en la extracción y procesamiento de minerales críticos, esenciales para construir baterías, tecnologías de hidrógeno y energías renovables. También se han identificado nuevos desarrollos prometedores en hidrógeno verde, otra área con un gran potencial en el continente. Sin embargo, la transformación energética de África sólo puede tener éxito si tiene apoyo de la población y si le aporta beneficios. Por eso sus ciudadanos deben estar en el centro de la transición energética. En último término, la COP27 que se celebrará en Egipto a finales de año será una plataforma importante para que los líderes africanos trabajen a nivel mundial para identificar maneras de impulsar estas transformaciones. La década actual es crucial, no sólo para la acción climática global, sino también para acelerar las inversiones que permitirán que África, el continente que acoge la población más joven del mundo, prospere en las próximas décadas.

El cambio climático también tiene su impacto en las relaciones geopolíticas tal como reseña a Cristina García Fernández en The Conversation. En efecto, el cambio climático está influyendo sobre las capacidades e infraestructuras militares críticas, las cadenas de suministros y el entorno de seguridad de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), sobre todo debido a la posibilidad de que se generen nuevos conflictos en muchos países. La Alianza es consciente de que el calentamiento global influirá cada vez más en sus actividades. Por eso, con motivo de la cumbre celebrada en Madrid, la organización ha presentado un informe en que identifica los principales retos ante el cambio climático. En el informe quedan claras las repercusiones que el fenómeno tendrá sobre la institución: daños estructurales sobre infraestructuras críticas en bases militares y zonas de entrenamiento; una mayor demanda de servicios públicos, particularmente energía y agua para hacer frente a condiciones de vida más duras; una mayor fragilidad de las cadenas de suministros; un incremento de los riesgos para la salud y la seguridad; un aumento del presupuesto destinado al mantenimiento y protección de bases, equipos, infraestructuras y otros activos. Asimismo, todo indica que habrá más conflictos, con lo cual hará falta una orientación más precisa hacia la asistencia humanitaria y la respuesta ante desastres, en posible detrimento de las que se dedican específicamente a la seguridad y la defensa. Además, se han anunciado los primeros objetivos climáticos de la OTAN. El más ambicioso es la consecución de cero emisiones para 2050. Eso coincide con los objetivos europeos propuestos en las últimas cumbres del clima (COP25 y COP26). La OTAN necesita que el calentamiento global no siga avanzando al ritmo actual porque está poniendo en riesgo la operatividad de la organización. Si alguna cosa preocupa especialmente la OTAN es que el cambio climático está abriendo nuevas áreas de competición estratégica. La mayor accesibilidad a los canales comerciales a través del Ártico debida al deshielo está abriendo nuevas rutas y con ello nuevas posibilidades de más beneficios para el comercio. La carrera para los recursos naturales (petróleo, gas y minerales) que los países ribereños están disputando desde hace tiempo afecta claramente al entorno estratégico general de la Alianza. Países como Dinamarca (Groenlandia), Estados Unidos (Alaska), Canadá, Rusia y Noruega se hallan inmersos en una auténtica disputa territorial. Los cinco países árticos ya han realizado acciones, incluso militares, para reclamar la soberanía territorial y, con ello, tener acceso a estos recursos. China también ha entrado en juego, no disputando territorios, sino haciendo negocios con Rusia y con Groenlandia, en este caso porque dispone de minerales muy utilizados en la industria tecnológica. Finalmente, está claro que la invasión rusa de Ucrania ha puesto de relieve la necesidad de buscar fuentes de energía alternativas y fiables y llevar a cabo una transición energética rápida que libere en los países aliados de la dependencia de Rusia y China.

Para acabar, en el ámbito de las nuevas tecnologías, Gustau Camps-Valls apunta en The Conversation que en la última década los métodos automáticos basados en Inteligencia Artificial (IA) han mejorado enormemente. El aumento de la capacidad computacional, junto con las mejoras algorítmicas, ha dado lugar a una revolución tecnológica. La IA está cada vez más integrada en nuestras vidas y lo estará cada vez más. Científicos como Geoffrey Hinton, galardonado con el Premio Turing, se han atrevido a vaticinar que el Deep Learning, una técnica matemática de IA, lo resolverá todo. ¿Pero es así? La IA está resolviendo muchos problemas de predicción, pero hay muy poca evidencia de su poder de comprensión y abstracción. ¿Es inteligente la inteligencia artificial? En los últimos años nos hemos dado cuenta de que la IA, en realidad, no es muy interpretable, ni explicable, ni respeta las leyes fundamentales de la física, ni sabe de causalidad, abstracción, justicia o ética. Los modelos basados en aprendizaje profundo han sido entrenados para predecir con gran precisión, y actualmente tienen tantos parámetros y son tan complejos que sus decisiones a menudo son imposibles de explicar a un humano. Poco a poco, eso está cambiando. Hay muchas iniciativas, tanto técnicas como normativas y legislativas, para asegurar una IA fiable que ofrezca predicciones que se puedan explicar al usuario. Este campo se denomina eXplainable IA (XAI). Se centra en analizar los modelos desarrollados para identificar las variables más relevantes de un problema, proporcionar intervalos de confianza sobre sus predicciones y ofrecer explicaciones sobre lo que se ha aprendido. En definitiva, rendir cuentas. La IA pues no solamente resuelve problemas, sino que está cambiando la manera cómo se hace ciencia y como se educan las futuras generaciones. La IA actual, si bien es muy útil en muchos campos, todavía halla dificultades a la hora de comprender escenarios, de comunicarse y explicar sus decisiones a humanos, de ser consistente y plausible, y de distinguir entre la correlación y la causalidad. Desarrollar métodos que incorporen conocimiento a priori, que estudien la plausibilidad de lo que han aprendido y que resuelvan preguntas causales serán clave para una verdadera revolución, que clama por una ciencia y una educación interdisciplinarias.

Han participado en la elaboración de esta edición del Diari de les idees Arnau Inés, Xavier Company y Pau Álvarez, estudiantes en prácticas en el CETC.

more/less text

Política internacional y globalización

Philip Zelikow The Hollow Order. Rebuilding an International System That Works

Xi Jinping i Vladimir Putin van publicar una declaració conjunta 6 mesos abans de la invasió d’Ucraïna sobre la forta aliança entre els seus respectius països, la qual “no tindria límits”. Quines problemàtiques emergeixen d’aquesta situació? Tal i com Zelikow exposa a l’article, un nou ordre amenaça l’status-quo actual. L’autor esgrimeix que un nou sistema internacional que fugi de la performativitat i passi a l’acció és necessari. Si volem un sistema que promogui la cooperació i no la competició, tal i com s’exemplifica a partir d’una cronologia, aquest seria relativament nou. No obstant això, tal i com Zelikow apunta, aquest nou lideratge no pot posar Washington al centre. L’èxit de les iniciatives posteriors a la creació del World Bank i l’IMF van estar interrompudes per una desconnexió transatlàntica important que es va agreujar amb la guerra d’Iraq. A més, l’autor situa la crisi de la Covid-19 com a exemple d’aquest sistema internacional dèbil, on tant la Xina com els Estats Units no van estar a l’alçada. Tal i com diuen Colin Kahl i Thomas Wright, la crisi de la COVID va acabar de carregar-se l’existència del G7 i, per tant, l’ordre internacional que coneixíem fins aquell aleshores. Davant un sistema internacional disfuncional que presenta tendències anti-globalitzadores, cal refrescar aquest sistema obrint la porta a nous socis com l’Índia. Tot i l’associació russo-xinesa, aquest nou sistema internacional, serà molt més eficaç si s’hi uneix la Xina, conclou l’autor, ja que dividir el món entre democràcies i autocràcies posa obstacles al nou ordre internacional.

Henry Foy & Sam Fleming Nato’s revival: will the resolve withstand an economic crisis?

La invasió russa d’Ucraïna ha demostrat el potencial que encara l’OTAN i el G7 per fer front a problemes d’abast internacional. En un principi, pocs eren els qui confiaven en una aliança ferma i un compromís unànime entre tots els membres per fer front a Vladímir Putin. Tanmateix, com assenyalen els experts i els mateixos caps d’Estat dels països membres, Occident va a una contra Rússia, tal com van actuar durant la Guerra Freda contra la Unió Soviètica. No obstant això, les tensions creixents dins de les mateixes fronteres dels estats membres posen en dubte una aliança a gran termini. Per una banda, els països orientals demanen una resposta contundent contra l’exèrcit rus, per temor que també siguin atacats. Per altra banda, els estats occidentals han de fer front a l’encariment del preu dels aliments i, sobretot, a l’augment de preu del petroli cru rus. En l’última cimera del G7, a Alemanya, Joe Biden, Boris Johnson i altres funcionaris de la Comissió Europea van idear un nou pla estratègic per limitar el preu del petroli rus. Els altres líders del G7, entre ells el canceller Olaf Scholz, no van aprovar la moció. Les tensions internes van creixent a mesura que s’apropa l’hivern i, per tant, una demanda molt elevada de combustible que no es sap si podrà suplir-se. Alguns països, Estats Units sobretot, tenen por d’una nova recessió econòmica. L’adhesió de Suècia i Finlàndia a l’OTAN també suposa un problema per l’aliança, ja que el president turc Recep Tayyip Erdogan s’hi nega encara en rotund. Finalment, en la cimera de l’OTAN de la setmana passada a Madrid, ha aparegut un nou actor: la Xina. Els líders europeus reconeixen que Xi Jinping suposarà un problema per a la geopolítica en un futur i que la seva aliança amb Vladímir Putin pot arribar a significar un desafiament contra l’OTAN i, particularment, els Estats Units. 

Paul McLeary 5 lessons from the NATO summit

Després de la cimera de l’OTAN on es va redefinir el concepte estratègic de l’organització, l’autor destaca els que al seu entendre són els cinc aspectes més rellevants de la cimera. Primer, el focus principal posat en Rússia ja que l’OTAN no ignora l’amenaça que representa una Rússia imprevisible. El nou document de concepte estratègic de l’aliança adverteix que no es pot descartar la possibilitat d’un atac contra la sobirania i la integritat territorial dels aliats per part del Kremlin. Segon, per primer cop la Xina s’ha inclòs a l’agenda però de manera bastant indefinida, ja que es considera que ara per ara la Xina és un problema, però encara no una amenaça. Tot i així, l’OTAN va convidar per primera vegada a la cimera els líders del Japó, Corea del Sud, Nova Zelanda i Austràlia per iniciar consultes, un clar senyal que mira més enllà que Rússia a l’hora de catalogar les amenaces militars i econòmiques. Tercer, el paper de Turquia que primer es va declarar absolutament en contra de l’adhesió de Finlàndia i Suècia, fins que va canviar de parer. Els costos de l’acord semblen ser mínims. Suècia i Finlàndia han acordat evitar tenir relacions amb el PKK, el grup kurd independentista que lluita contra les forces turques, i es van comprometre a abandonar les sancions militars imposades a Turquia per la seva invasió de Síria. La Casa Blanca també va donar suport públicament a la venda a Turquia de kits de modernització per als F-16, un acord que fa mesos que estava pendent. Quart, la famosa Força de Reacció de l’OTAN, una unitat de 40.000 soldats que es pot desplegar en 30 dies, està destinada a acabar la paperera de la història, tot i que encara no se sap quan. o estem segurs de quan. Serà substituïda per un contingent estable de 300.000 soldats desplegats a tot el continent com a part de la major revisió de la defensa col·lectiva i de dissuasió des de la Guerra Freda. Finalment, els dirigents de l’Aliança estan preocupats pels acords de control d’armes que els Estats Units van abandonar sota l’administració Trump. Rússia portava anys incomplint el Tractat de Forces Nuclears d’Abast Mitjà de l’època de la Guerra Freda, provant en secret míssils de creuer prohibits. L’administració Trump va abandonar el pacte el 2019, la qual cosa va generar crítiques d’Europa. El 2020, l’administració nord-americana va abandonar el Tractat de Cels Oberts, un acord de 34 països que va permetre als Estats Units, Rússia i altres fer volar els seus avions sobre el territori dels altres per confirmar les activitats militars i mantenir una certa transparència. Rússia havia denegat durant molt de temps l’espai aeri sobre el seu enclavament de Kaliningrad i prop de la seva frontera amb Geòrgia, fet que va provocar la retirada dels Estats Units. Rússia va abandonar formalment l’acord el 2021.

Charlie Campbell A More Powerful NATO Is Emerging. That Might Not Be a Good Thing

L’OTAN està travessant una reviscolada i reanimació aquest 2022. Tanmateix, si ens remuntem al 2019 era tot el contrari, arribant a extrems en que inclús el president francès Emmanuel Macron va expressar els seus dubtes sobre si l’article 5 – de defensa mútua en cas d’atac sobre un membreencara aplicava. Situant-nos en l’actualitat, Europa torna a confiar en l’Aliança Atlàntica com no ho feia des d’ençà la Guerra Freda i això queda demostrat per gestos com l’entrada de països històricament neutrals com són Suècia i Finlàndia. En la darrera Cimera celebrada a Madrid a finals de juny, s’ha acordat un Nou Concepte Estratègic, que consisteix en un augment de les Forces de Resposta Ràpida de les 40.000 actuals fins a 300.000 tropes, seleccionar Rússia com la principal amenaça per a la seguretat, esmentar a la Xina com un repte i el compromís dels EUA d’augmentar la presència americana en territori europeu. Aquest renaixement de l’OTAN és clarament una resposta a la invasió russa d’Ucraïna ja que centra els esforços en poder repel·lir un possible atac de Putin, per això, els nous batallons s’ubicaran en països propers a la regió del Mar Negre. Tanmateix, a Madrid també hi van anaren qualitat d’observadorsJapó, Corea del Sud, Austràlia i Nova Zelanda per tractar temes sobretot encarats cap a Xina. Tot plegat, sembla marcar unes passes cap a una nova política de blocs antagonistes. Queden enrere uns temps on l’OTAN i Rússia apropaven posicions i cooperaven com en la Guerra de Bòsnia de 1995. No obstant això, Rússia sempre ha recelat de les expansions de l’OTAN cap als països de l’antic Pacte de Varsòvia, i incús es va fer explícit que Ucraïna estava fora de límits. Rússia va fer esforços i propostes l’any 2008 amb un Tractat de Seguretat Europeu on s’incloïen els països de l’Aliança Atlàntica i Rússia, però l’administració Bush ho va refusar, seguint una lògica de que Rússia era la perdedora de la Guerra Freda, i contràriament, a la següent cimera de l’OTAN el president americà va insistir en incorporar a Ucraïna i Geòrgia a l’Aliança, fet que es va repetir a totes les cimeres següents. També cal sumar els gestos d’EUA amb l’oposició en les protestes contra el president pro-rus Yanukovych. Així doncs, aquesta fixació amb Ucraïna ha servit a Putin per a justificar els seus moviments següents, des de la invasió de Crimea al 2014 fins la guerra actual. Sigui com sigui, les incorporacions dels nous membres a l’OTAN, l’aprovació del nou Concepte Estratègic i la visita dels estats observadors, no fan més que tensar les relacions amb Rússia i Xina, que per la seva banda apropen posicions davant un enemic comú. Per tant, tot sembla guiar la geopolítica de seguretat mundial cap a una nova política de blocs. 

María G. Zornoza La OTAN incluye el Sahel como foco de inseguridad por primera vez

Un cop celebrada la cimera de l’Aliança Atlàntica a Madrid, l’autora destaca que l’OTAN ha ampliat la seva mirada, històricament posada a l’Est, davant del que considera un món cada cop més volàtil, perillós i competitiu. Per primera vegada a la seva història, l’Aliança Atlàntica reconeix el flanc sud com una de les regions que suscita més preocupació. Així, la zona del Sahel s’esmenta en dues ocasions al llarg de les 16 pàgines que conformen el Concepte Estratègic, el full de ruta rubricat a la cimera de Madrid que marca el rumb de la seguretat euroatlàntica per a  la propera dècada. La raó de ser de l’OTAN va ser Rússia. I aquesta continua sent la seva prioritat número u, especialment després de l’esclat de la guerra a Ucraïna. Però per primer cop els aliats amplien la mirada cap a la seva única altra frontera: el sud. Espanya feia mesos que negociava entre bastidors la seva inclusió a la brúixola estratègica. La regió del Sahel –conformat pel sud de Mauritània, Senegal, Mali, Burkina Faso, Níger, el nord de Nigèria i Camerun, Txad, Sudan i Eritrea– és coneguda com el ‘cinturó de la fam’ i és considerada pels experts com una olla a pressió on es produeix la competició pel lideratge del terror que lliuren Estat Islàmic i Al-Qaida, una situació agreujada per una crisi alimentària exacerbada per la guerra a Ucraïna,  la retirada de les tropes europees de països en caiguda lliure com Mali, amb societats cada cop més pobres i menys cohesionades i amb la inestabilitat d’uns règims cada cop més corruptes. Amb aquest escenari de fons, fixar el focus cap a la frontera sud era la gran prioritat del Govern de Pedro Sánchez per dues qüestions. En primer lloc, per enfortir la protecció de les ciutats autònomes de Ceuta i Melilla, que no es troben sota el paraigua de l’article 5, la clàusula de defensa col·lectiva. I en segon lloc, per fer front a la bomba de rellotgeria que és el Sahel, una regió que José Manuel Albares, ministre d’Afers Estrangers, ha definit com el centre del terrorisme mundial.

Xulio Ríos OTAN: ¿qué piensa China?

Xina ha entrat per la porta gran a la doctrina estratègica de l’OTAN i confirma el seu estatus irreversible com a protagonista mundial ja no només en l’àmbit de l’economia o el comerç sinó també en el de la seguretat. Pel que fa a aquesta consideració, l’autor considera que caldria fer algunes observacions rellevants. La primera és que Xina es defineix com a rival, no com a amenaça, qualificatiu reservat només a Rússia, encara que convindria transcendir el valor del que és merament semàntic; d’aquesta manera, en relació amb la Xina, imperaria la denominació establerta per la Comissió Europea el 2019. La segona és que alguns països, com els Estats Units, sí que la consideren obertament una amenaça, la més gran de totes, encara que el nivell de cohesió estratègica entre tots els països membres no ofereix una caracterització similar. En tercer lloc, s’identifiquen els focus problemàtics principals (expansió i opacitat, conflictes marítims i territorials, 5G, etc.) que justificarien l’alerta que l’emergència xinesa suposa per als interessos de seguretat de l’OTAN. Naturalment, a la Xina aquest nou escenari li preocupa, tant per les seves implicacions polítiques (l’abast efectiu de les quals caldrà precisar) com per raons de seguretat mentre el previsible deteriorament de les relacions pot afectar l’estabilitat i la viabilitat del full de ruta traçat per a 2049, quan està previst que la República Popular hagi completat el seu llarg procés de modernització. D’entrada, la Xina esmena la lògica que ha inspirat aquesta cimera, la que com més incertesa, es necessita més OTAN. Beijing no deixa de recordar que, amb les expansions anteriors cap a l’Est, l’aliança no ha aconseguit fer d’Europa un lloc més segur. Al contrari. Això vindria a demostrar que la seguretat ha de ser integral i inclusiva, i no dels uns a costa dels altres. Des de la perspectiva xinesa, el cúmul de contradiccions no pot ser més eloqüent: l’OTAN es rearma de manera alarmant però és la Xina a qui s’acusa d’elevar de manera preocupant el nivell de despesa militar; o es defensa a capa i espasa la integritat territorial dels països membres però alhora s’encoratja obertament el secessionisme de Taiwan, una “línia vermella” per a Beijing que és conscient que la pressió militar i estratègica anirà en augment i que ha de millorar i afinar la capacitat de resposta. Davant l’ascens de la seguretat en la priorització de valors i interessos d’Occident, també és previsible que el mateix ex produeixi a la Xina, encara que sense trastocar fonamentalment el rumb seguit fins ara. Això vol dir que la Xina evitarà repetir el vell error soviètic i caure en el parany de sumar-se a una suïcida carrera d’armaments, que continuarà establint i enfortint relacions pragmàtiques d’associació però no aliances en sentit estricte, i que la lògica del desenvolupament continuarà imperant sobre qualsevol altra.

Domènec Ruiz Devesa It’s time for a sweeping transformation of the alliance

Amb la darrera cimera de l’OTAN celebrada a Madrid i la materialització d’un nou i flamant acord en forma de Concepte Estratègic, l’Aliança Atlàntica s’enfronta a una transformació radical per a tornar-se a situar en la competició pel poder militar global. Un pla ambiciós que vol basar-se en un balanç i compromís de totes les parts per a contribuir a la tasca de mantenir la pau a Europa i aturar els deliris russos i els futurs reptes que plantegi la Xina. Per a fer-ho, s’ha hagut de reinterpretar el Concepte Estratègic de 2010 que es basava en administrar crisis i seguretat cooperativa, degut a que l’escenari internacional ha canviat dràsticament. Tanmateix, malgrat abordar una sèrie de temes i establir uns resultats com l’augment d’efectius de forces de resposta ràpida i la instal·lació de tropes en nous països, Ruiz aposta per adoptar un text polític que pugui infondre de sentit a l’organització amb nous consensos més enllà de la seguretat. Aquest acord ha d’anar lligat a una agenda comuna d’Estats Units i Europa que permeti avançar conjuntament amb el suport de les dues parts i que traspassi interessos partidistes. Ha d’anar unit amb els principis Occidentals de llibertat i democràcia i intentar actualitzar-se al segle XXI defensant conceptes com la llibertat a gaudir d’Internet. Per altra banda, la resiliència transatlàntica s’ha de basar en fer de l’OTAN una organització d’acord amb els pilars democràtics de rendició de comptes, responsabilitat i transparència, per així poder mantenir societats cohesionades i un govern funcional. Aquesta proposta de carta s’ha de constituir amb l’acord de les dues parts i els òrgans legislatius, com ara el Parlament Europeu han de tenir-hi un paper clau. Tot això, en vista de salvaguardar una institució com l’OTAN que a dia d’avui, és necessària per als interessos d’Occident. 

Angeli Datt Hong Kong Is Unrecognizable After 2 Years Under the National Security Law

La imposició de la Llei de Seguretat Nacional (NSL, per les seves sigles en anglès) per part de l’administració de Pequín el 30 de juny de 2020 ha deteriorat moltíssim els drets polítics i civils i la llibertat de premsa de Hong Kong en tan sols dos anys. L’informe anual de Freedom House sobre drets polítics i llibertats civils situa Hong Kong dotze punts menys en dos anys, essent el tercer pitjor descens seguit per Myanmar, que va patir un cop d’estat, i Afganistan, on els talibans van prendre el poder a la força. La NSL s’ha convertit en una eina fonamental perquè Xi Jinping apliqui el seu autoritarisme a la regió. En aquests dos anys, els mitjans de comunicació independents prodemocràtics han sigut obligats a tancar, com Apple Daily o Stand News. Set mitjans de comunicació en llengua xinesa han tancat i dos han sigut censurats. Aproximadament el 20% dels treballadors de mitjans de comunicació en llengua xinesa han perdut la seva feina per la NSL. Per altra banda, almenys dotze periodistes i professionals del món de la informació han estat acusats de delictes per anar en contra de la NSL o de sedició. Entre ells es troba el propietari d’Apple Daily i els caps de Stand News. Tot això ha portat al Comitè per a la Protecció dels Periodistes a incloure professionals de Hong Kong al seu cens mundial anual de periodistes empresonats. També han augmentat els presos polítics, que ja sumen més de mil condemnats per protesta o activisme. El govern s’ha esforçat per convertir l’emissora pública Radio Television Hong Kong (RTHK) en un altaveu de la propaganda de Xi Jinping. El mitjà de comunicació ofereix ara continguts patriòtics procontinentals a la Xina. El control i la censura a Internet també ha augmentat amb la NSL, per exemple, bloquejant a Hong Kong l’aplicació de missatgeria Telegram. L’1 de març va entrar en vigor una llei que obligava als habitants de Hong Kong a registrar les seves targetes SIM amb els seus noms reals, per facilitar la vigilància a Internet. En un mes, 1,4 milions de targetes van ser enllaçades amb noms reals. Finalment, el govern de Hong Kong, fent ús de la NSL, s’està esforçant a esborrar de la memòria col·lectiva xinesa la massacre de la plaça de Tiananmen el 4 de juny de 1989. La policia ha detingut a manifestants i activistes per protestar i ha retirat estàtues commemoratives a les universitats. Malauradament, amb el futur nomenament del nou director executiu de Hong Kong, John Lee, tot sembla que la censura i l’autoritarisme anirà en augment, amb la promulgació de noves lleis més dràstiques i contràries a la llibertat democràtica. 

Raymond Powell China’s Vast Maritime Claims Are Becoming Reality

En aquest article de Powell, s’hi examina la lògica del patró que la Xina ha estat seguint a l’hora de reivindicar la seva sobirania sobre les zones marítimes. Beijing intenta balancejar el sistema de dret internacional existent amb les seves narratives i aspiracions expansionistes que fugen d’aquest. L’autor comença l’article amb la següent afirmació: Beijing està decidit a dominar la seva regió en la seva totalitat. Tant en el cas canadenc com australià, la resposta dels portaveus xinesos acostuma a ser la mateixa: conservar la sobirania xinesa a tot preu, però sense elaborar-la en detall en què es basa aquesta. L’objectiu és clar: per tal de mantenir les ambicions geopolítiques de la Xina, Beijing manipula i desdibuixa conceptes jurídics per camuflar-los com a demandes legítimes. La conclusió de l’article és que la Xina està seguint una estratègia a llarg termini on la retòrica és central i els seus portaveus juguen un paper clau en construir una narrativa al respecte. No obstant això, tot i que en l’àmbit legal queda en evidència que Beijing té les de perdre, la lògica xinesa consisteix en reforçar la seva posició militar i deixar als rivals fora d’equilibri fins que la llei ja no tingui importància i la jurisdicció quedi en mans d’interpretació xinesa. Els seus portaveus seguiran enfangant les aigües retòriques, creient que, tot i que Pequín no pot guanyar el debat sobre els mèrits legals, pot mantenir els seus rivals fora de joc alhora que reforça la seva posició militar fins que ja no importi el que digui la llei.

Nosmot Gbadamosi What Does China Want in Ethiopia?

Mentre Europa i Estats Units centren els seus esforços cap a Ucraïna, la Xina es posiciona com a mediadora en els conflictes a l’Àfrica de l’Est. La Xina ha organitzat a Addis Abeba una Conferència de pau, bon govern i desenvolupament per a la Banya d’Àfrica, deixant enrere una fase de no immiscir-se en afers interns de països tercers, per així poder guanyar influència allà on Estats Units la perd. La regió té una gran transcendència en la política exterior xinesa: A Etiòpia la Xina hi ha dipositat grans inversions i té prop de 400 projectes de construcció i manufactures; al Sudan i Sudan del Sud controla el monopoli del petroli; i a Djibouti hi té l’única base militar en el continent africà. Així doncs, en la conferència l’enviat xinès a la Banya d’Àfrica va insistir en que dipositaran tots els esforços per assolir compromisos de pau per als conflictes vigents a la regió. I és que el problema no té només a veure amb la seguretat, sinó que hi ha una greu crisi alimentària provocada per la sequera i com a resultat: un terç dels sudanesos s’enfronten a la fam, 4 milions de sudanesos del sud viuen en condicions de refugiats i desplaçats interns dins del seu propi país. Davant d’aquesta qüestió humanitària el Programa Mundial d’Aliments de l’ONU ha de suspendre part de l’assistència a Sudan del Sud per manca de donants. Pel que fa a conflictes a la regió, les hostilitats entre Sudan i Etiòpia creixen per disputes al Triangle al-Fashqa i també per temes relacionats amb la Construcció de la presa del Renaixement al Nil. Mentrestant, els EUA veu com els seus enviats es succeeixen ràpidament sense aconseguir resultats i s’esvaeix la influència americana en la regió com a conseqüència de sancions interposades sobre Etiòpia per violacions de drets humans en els darrers conflictes interns. Per la seva banda, la Xina no imposa resultats en les seves resolucions i vol mantenir una postura de converses amb totes les parts, assolint que els conflictes es resolguin sense l’ajuda de Washington, tot augmentant la seva influència en la regió. No obstant això, aquesta certa ambició de voler-ho abastar tot i amb tothom pot ser també el que acabi condemnant a Pequín. 

Philippe Leymarie Israël à la reconquête de l’Afrique

Israel ha estat una de les estrelles d’Eurosatory, certamen dedicat a l’equipament dels soldats de les forces terrestres (armes individuals, artilleria, vehicles blindats, robots) fins a la seva dimensió aèria (helicòpters, míssils, drons), així com a la panòplia de les forces policials i de seguretat. La seva indústria armamentística compta amb el suport decidit de l’Estat, que considera la vitalitat d’aquest sector com una condició per a la seva supervivència. Així, l’empresa Elbit va registrar l’any passat una cartera de comandes de 13.700 milions de dòlars, i va aconseguir més de 5.000 milions de facturació, dels quals un terç als Estats Units. Les vendes d’armes produïdes a Israel van assolir un rècord d’11.300 milions de dòlars el 2021 i les vendes han augmentat un 55% en dos anys, impulsades per l’augment de la tensió entre europeus i russos; per les necessitats creades en els conflictes a l’Orient Mitjà i a l’Àsia; i més recentment per les perspectives obertes pels Acords d’Abraham, i la guerra oberta a Ucraïna. Si tradicionalment Europa ha estat el principal client de les empreses israelianes, en els darrers anys la seguretat torna a ser un focus important de les relacions entre Israel i el continent africà. Amb el suport de la seva agència de cooperació, el Mashav, així com d’empreses privades, Tel-Aviv ofereix una àmplia gamma de serveis: venda i implementació d’armes de tots els calibres, equips de vigilància, així com mòduls de formació militar i policial, assessorament i assistència en seguretat o gestió de crisi, etc. En els darrers anys, és efectivament a través de la lluita contra el terrorisme que les relacions amb pres força amb una sèrie de països africans: Guinea, el Txad, la República Democràtica del Congo, el Sudan i el Marroc s’han afegit recentment a socis de llarga data, com ara Kenya o Uganda, fins al punt que Israel va estar a prop l’any passat de recuperar l’estatus d’observador a la Unió Africana, que l’antiga OUA li havia retirat si bé finalment Algèria i Sud-àfrica s’hi van oposar.

Alain Rodier La Turquie, grande gagnante de l'intégration de la Suède et de la Finlande dans l'OTAN

La diplomàcia de Turquia va tornar a demostrar la seva eficàcia durant les converses que van tenir lloc abans de la cimera de l’OTAN a Madrid per acceptar l’adhesió de Suècia i Finlàndia a l’Aliança. L’autor afirma que Ankara n’hauria de treure molts beneficis que bé podrien decebre els defensors de la causa kurda i, en general, del respecte als principis democràtics. En efecte. Suècia i Finlàndia han confirmat que consideren -com la resta de la Unió Europea, els Estats Units, la Gran Bretanya, etc. – el PKK com a organització terrorista i es van comprometre a lluitar contra el terrorisme amb determinació i resolució, d’acord amb les disposicions dels documents i polítiques de l’OTAN adoptant totes les mesures necessàries per enfortir la legislació nacional en aquest sentit. D’altra banda, Ankara ha aconseguit que s’aixequi l’embargament sobre la venda d’armes decretat el 2019 després de l’inici d’una operació militar turca a Síria i el nord de l’Iraq, i que en el futur, les exportacions militars de Finlàndia i Suècia es realitzaran amb respecte a la solidaritat amb l’Aliança i d’acord amb la lletra i l’esperit de l’article 3 del Tractat de Washington. Això no obstant, és cert que fins ara Turquia disposa de poc equipament militar procedent d’aquests dos països, excepte els rifles de franctirador finlandesos TRG-42, els antiquats canons antiaeris L/70 de 40 mm i les armes antitanc suecs Carl Gustav. L’autor conclou que serà interessant veure què passarà en les properes setmanes si Turquia llança, tal com va declarar el president Erdogan el 27 de juny, una nova ofensiva contra els “terroristes” kurds a Síria i al nord de l’Iraq…

Simon Tisdall A mirage of peace? Joe Biden ventures back into Middle East’s shifting sands

El terreny d’aliances a l’Orient Mitjà no deixa de reajustar-se i la primera visita de Joe Biden com a president pot tenir cert efecte. La situació actual és una lluita de poder entre una nova Rússia més agressiva, una Xina expansionista i uns Estats Units que volen tornar a guanyar influència després d’una era Trump més marcada per l’absentisme. Sens dubte, el canvi més espectacular és l’alineament entre Israel i els països àrabs amb la creació d’una aliança militar regional per dissuadir els atacs iranians. Els EUA han promogut aquesta aliança que inclou a més països àrabs i inclús Aràbia Saudita amb qui Israel no té relacions diplomàtiques formals. Tot s’emmarca dins la creixent amenaça que suposa Iran dins la regió i les seves ambicions nuclears. Biden vol normalitzar les relacions entre Israel i Aràbia Saudita i es reunirà amb el príncep bin Salman, al qual va titllar de pària després de l’assassinat al 2018 de Khashoggi. Amb el rerefons de la guerra d’Ucraïna i la crisi energètica, l’objectiu d’aquesta reunió també passa per convèncer als saudites d’incrementar el petroli al mercat i així poder reduir la facturació a Rússia i Iran. Per altra banda, també vol induir al príncep a fer permanent l’alto al foc al Iemen per acabar amb la guerra. Pel que fa a Síria, Biden pensa a reduir les sancions econòmiques sobre el règim d’al-Assad per a que pugui importar petroli iranià i així, al mateix temps, tenir un gest cap a Iran i poder arribar a un pacte nuclear d’última hora, el que també podria implicar una reducció de sancions i sortida al mercat de més barrils de petroli iranians. Mentrestant, Putin porta a terme la seva gira paral·lela. Al Turkmenistan es va reunir amb el president iranià amb qui manté una bona relació i acords comercials; alhora, conjuntament amb la Xina, es neguen a condemnar el bloqueig iranià a les inspeccions nuclears de l’ONU. No obstant això, Iran manté una postura opaca i vacil·la amb aturar les hostilitats amb el seu gran enemic Aràbia Saudita. Si les tensions s’aturessin i s’arribés a un pacte nuclear, comportaria una creixent estabilitat a la regió que seria benvinguda per Washington i Brussel·les. Sigui com sigui, Israel segueix veient Iran com una amenaça pel finançament de grups com Hezbol·lah i Hamas i segueix atacant infraestructures i líders iranians. Tanmateix, acabi com acabi aquest reajustament d’aliances, hi haurà molts perdedors, sobretot aquells que parteixen d’una situació paupèrrima com són el Sàhara Occidental, el Kurdistan i Palestina. 

Aliya Askar The Complexity of Kazakhstan-Russia Relations on Display

Malgrat l’aïllament econòmic en què es troba actualment la Federació Russa, Moscou va decidir mantenir el 25è Fòrum Econòmic Internacional de Sant Petersburg (SPIEF) a principis de juny. El fòrum es va fundar inicialment per mostrar el potencial de l’economia russa per als inversors estrangers, així com perquè el president Vladimir Putin reunís els seus aliats per parlar sobre la cooperació econòmica i més. Enguany, l’únic convidat d’alt nivell ha estat el president de Kazakhstan, Kassym-Jomart Tokayev. Juntament amb les nombroses qüestions relacionades amb l’economia, Tokayev va comentar l’”operació militar especial” de Rússia a Ucraïna i va deixar clar que Kazakhstan no reconeix territoris quasi estatals, i que això inclou Luhansk i Donetsk. En alguns mitjans de comunicació occidentals s’ha volgut veure en les declaracions de Tokayev una pèrdua  de poder i d’influència per part de Putin. Però si es mira en conjunt com s’han desenvolupat les sessions del Fòrum, els presidents russos i kazakhs van coincidir en molts punts, fins i tot en aquells que van anar més enllà dels debats econòmics, i Tokayev va subratllar nombroses vegades l’important que és que Rússia i Kazakhstan treballin junts en el marc de la Unió Econòmica Eurasiàtica (UEEA) per superar els problemes econòmics de la regió. Paral·lelament, és coneguda la difícil posició de Kazakhstan després del 24 de febrer: fent frontera a la vegada amb Rússia i Xina, i intentant mantenir relacions amistoses amb Occident i la resta del món, Kazakhstan ha dut a terme amb cura una política exterior multi-vectorial des de la seva independència el 1991. Amb la intensificació del regionalisme i la divisió global, ha estat especialment difícil per al Kazakhstan protegir els seus interessos nacionals i al mateix temps preservar bones relacions amb tots els estats veïns. En definitiva, Rússia necessita Kazakhstan i Kazakhstan vol mantenir en bons termes les relacions amb Rússia.

The Economist Who controls the Arctic?

La guerra rus-ucraïnesa també està afectant notablement les relacions de la potència soviètica amb els seus veïns a l’Àrtic, malgrat que la possibilitat d’un enfrontament al terreny sigui molt poc probable. El 3 de març d’aquest any, tan sols una setmana més tard que Vladímir Putin declarés la guerra a Ucraïna, set dels vuit membres permanents del Consell de l’Àrtic, la principal organització intergovernamental de la regió, van dir que boicotarien les futures reunions a causa de la guerra. Els vuit estats que conformen el consell són els Estats Units, Canadà, Dinamarca, Finlàndia, Islàndia, Noruega, Suècia i Rússia. L’últim és actualment el president, fins que l’any vinent prengui el relleu Noruega. Per altra banda, el 29 de juny, el ministeri d’Afers Exteriors rus va dir que prendrien represàlies contra Noruega per haver imposat sancions que bloquegen les mercaderies de Rússia destinades a Svalbard, un arxipèlag de l’Àrtic. Aquest territori pertany a Noruega, però, un tractat de 1920 dóna a Rússia el dret d’explotar els seus recursos naturals i molts dels assentaments d’allà estan poblats per russos. El principal problema a l’Àrtic és l’augment dràstic del canvi climàtic, que està enfonsant inexorablement el territori. Això fa que les rutes del mar polar siguin cada cop més senzilles de navegar, els recursos naturals siguin més accessibles i que les fronteres al nord siguin més vulnerables. Severomorsk, un port al mar de Barents dins del cercle polar àrtic és la base principal de la flota russa al territori, incloent-hi submarins d’abast nuclear. Putin ha construït almenys 475 llocs militars al llarg de la seva frontera nord en els últims sis anys. Com a resposta, l’OTAN ha dirigit la seva atenció cap al nord. Al març, Noruega va acollir l’exèrcit militar de l’aliança més gran en més de tres dècades i els Estats Units està considerant renovar les seves forces armades a Alaska. La cooperació científica occidental i russa s’ha trencat a causa de la guerra i les relacions empresarials s’han deteriorat. Rússia ha invertit 300.000 milions de dòlars per a obtenir petroli i gas a l’Àrtic, mentre que les empreses occidentals, com BP o Shell, s’han retirat del territori. Això ha obert la porta a la Xina que, malgrat no tenir cap territori a l’Àrtic, té un contracte de trenta anys amb Rússia per importar gas dels jaciments de Yamal, a l’Àrtic siberià, a través d’un gasoducte en comú. 

Jack Detsch West Worries About Fraying Consensus Over Ukraine

En aquest article, Detsch comença situant la posició americana davant la guerra d’Ucraïna en el context de la NATO Summit a Madrid: l’ajuda americana i dels seus aliats continuarà present whatever it takes. No obstant això, la preocupació sobre fins a quin punt arribarà aquesta ajuda i de quina manera està desgastant el consens a nivell intern de l’aliança. Les tendències inflacionàries de l’economia a Europa estan impactant l’opinió pública pel suport a la guerra: val la pena arruïnar-se per una guerra? Comença a pensar certa gent. La decisió d’anul·lar el dret a l’avortament i la investigació del Congrés sobre el motí pro-Trump al Capitoli no només fa trontollar als Estats Units, sinó a tota l’aliança transatlàntica. Totes aquestes qüestions orbiten al voltant de la guerra, però també la condicionen. L’aspecte més fonamental és l’armament que Ucraïna rep: tot i que Zelensky insisteix que la guerra “podria acabar avui mateix” si el país rebés l’armament militar necessari, els Estats Units i Europa divergeixen en aquesta afirmació. De fet, Ucraïna demana més armament militar i més complexitat d’aquest, però el departament de defensa dels Estats Units no veu clar que l’exèrcit ucraïnès tingui la capacitat de fer-ne un ús correcte i adequat. Tot i totes les discordances existents que posen en perill el consens, Biden ha deixat clar que el seu suport cap a Ucraïna no canviarà.

Thomas Gibbons-Neff Russia Advances Behind Brutal Barrage, but Will Its Strategy Keep Working?

La recent captura russa de les ciutats de Sievirodonetsk i Lissitxansk és un pas important en la campanya de Putin per fer-se amb l’est d’Ucraïna i significa una victòria de l’estratègia basada en la superioritat militar. Tanmateix, aquest fet aixeca interrogants sobre quan de temps pot mantenir cada bàndol el conflicte i pagar els peatges en forma de costos materials, humans i sofriment, sense una aturada – permanent o no – que permeti recobrar forces. De moment, sembla que la tàctica escollida per Moscou passa per apostar per grans bombardejos d’artilleria, el que beneficia en les grans zones planes de l’est. Mentre que per la banda ucraïnesa, es vol posar l’objectiu en encastar als russos a una lluita urbana, tot i que les pròpies tropes ho veuen massa costós. Tot aquest debat s’emmarca en una queixa ucraïnesa de manca de suport d’armament i recursos, mentre que pressionen a Occident per a que s’impliqui més en la seva causa. Per la seva banda, després de la derrota de l’atac ràpid a Kíiv, l’objectiu rus es centra en la zona del Donbàs i es basa en fer els avanços amb grans línies de suport i bombardejos d’artilleria per assegurar posicions. Com la major part de conflictes bèl·lics, les dues parts estan acusant grans baixes, es calcula que més d’un centenar al dia, el que porta als ucraïnesos a comptar amb tropes menys entrenades i per la banda dels russos, a tirar de reforços de grups paramilitars privats, forces txetxenes i lluitadors del Donbàs. Malgrat els esforços d’arengar les tropes per part de Zelensky, l’estratègia de bombardejos constants està provocant seqüeles en la moral dels soldats i civils ucraïnesos, que es veuen sotmesos a un estrès i situació d’alerta constants. Aquesta por és real ja que en les poblacions recentment atacades hi ha hagut baixes civils i els russos estan alertant i donant senyals de que aquests atacs es repetiran. Així doncs, Ucraïna espera entrenament i més suport d’Occident, mentre que Rússia seguirà pressionant per assolir els seus objectius, tot això en un context de patiment i sofriment constant de la població. 

Svetlana Alexievitch À propos d’une bataille perdue

La revista Le Grand Continent publica el discurs de l’escriptora bielorussa Svetlana Alexievitch amb motiu de la concessió del Premi Nobel de Literatura 2015, on l‘autora destaca que tres llars: la seva terra bielorussa, la terra del seu pare on ha viscut tota la vida; Ucraïna, la terra de la seva mare on va néixer i la gran cultura russa, sense la qual afirma que no pot viure. Alexievitch reflexiona sobre què va passar quan l’imperi es va enfonsar. Abans, el món estava dividit en dos: hi havia els botxins i les víctimes (el Gulag), els germans i les germanes (la guerra). L’electorat és la tecnologia, el món modern. Abans, el seu univers encara estava dividit entre els qui havien estat condemnats als camps i els qui els hi havien enviat. Avui, es divideix en eslavòfils i occidentals, traïdors a la nació i patriotes. I també en els que poden comprar i els que no. Alexievitch afirma que s’ha perdut l’oportunitat que se’ls va donar als anys noranta. En resposta a la pregunta: “Què hem de ser, un país fort o un país digne on la vida és bona?” van triar la primera opció: un país fort. Han tornat al temps de la força. Els russos estan en guerra amb els ucraïnesos. Els seus germans. El seu pare és bielorús i la seva mare ucraïnesa. Aquest és el cas de moltes persones. El temps de l’esperança ha estat substituït pel temps de la por. El temps ha anat enrere. Vivim en una era de segona mà…

Vitaliy Dudin Ukraine’s recovery must benefit the people. The West has other ideas

La Conferència de Recuperació d’Ucraïna, que reunirà a alts càrrecs ucraïnesos i occidentals a Suïssa, com a objectiu reunir al govern i les empreses per discutir la inversió i les reformes necessàries per reconstruir el país després de la guerra amb Rússia. Tanmateix, no són els empresaris qui pitjor ho estan passant, sinó els obrers. Més del 80% de les morts en el lloc de treball han estat causades per l’exèrcit rus des del 24 de febrer i, segons dades oficials, cada dia mor una persona a la feina a Ucraïna. Els experts apunten que Ucraïna perdrà el 50% del seu PIB aquest any, el 30% dels llocs de treball s’han perdut i la taxa d’atur serà del 25%, rècord a Europa. Fins ara, els empresaris han tingut màniga ampla per fer front als reptes que ha suposat la invasió russa. Les agències estatals han afluixat la supervisió del mercat laboral i el parlament i el govern ucraïnès han intentat impulsar reformes laborals radicals que desproveeixin de drets als treballadors. En primer lloc, la guerra ha reduït els sous a una mitjana del 10%. Hi ha una percepció creixent que els efectes negatius de la crisi del mercat de treball estan sent molt més dura per a treballadors que per a empresaris. No tothom creu que això sigui just, més encara després de la resposta del parlament ucraïnès de revocar parts considerables de la legislació laboral per als empresaris. Aquests ara poden suspendre contractes de treball, en els quals els empleats no reben salari, però es consideren ocupats. Milers d’empleats d’empreses privades s’han mantingut a l’atur durant mesos sense una raó oficial. Aquesta situació ha donat peu a un paradís per als empresaris, que no donen feina de manera oficial. Des de la invasió, l’estat ha cancel·lat totes les inspeccions laborals i ja no controla els deutes salarials, un problema constant per a milers d’empleats d’empreses privades. A més, Ucraïna també s’enfronta a un repte demogràfic evident: és poc probable que els sis milions de persones, la majoria mares joves, tornin al seu país d’origen després de la guerra. A l’estranger, moltes s’han trobat amb salaris més alts on les lleis s’obeeixen i les llars d’infants són més assequibles. A més, quan es derogui la llei marcial, que impedeix que els homes menors de seixanta anys abandonin el país, Ucraïna podria enfrontarse a nova ona d’emigració. El govern hauria d’animar als seus ciutadans a tornar-hi o no marxar a l’estranger a través de la reconstrucció d’infraestructures, el llançament de la producció industrial i la satisfacció de les necessitats humanes. No obstant això, és poc probable que la reconstrucció del país tingui en compte les opinions de la població i els seus interessos a llarg termini. L’estat vol centrar-se en el desenvolupament de microempreses com a forma de rellançar l’economia o formar a persones en habilitats informàtiques. Tanmateix, sembla poc probable que les petites empreses estableixin cadenes de subministrament i trobin els seus consumidors. L’objectiu no hauria de ser el de reconstruir el capitalisme perifèric a través de reformes liberals, sinó introduir elements de l’economia social i solidària al país, com crear una base econòmica sostenible, un augment de la confiança del públic i assegurar l’ocupació. 

Serhii Plokhy Putin’s imperialist narrative ‘is being crushed

A Ucraïna no només estan lluitant dos exèrcits, sinó dues narratives històriques. En la narrativa a la qual l’historiador ucraïnès Serhii Plokhy ha dedicat la seva carrera, Ucraïna té una història llarga i significativa com a nació i estat independent. L’altra, la versió manipulada proposada pel president Putin, nega a Ucraïna la seva identitat nacional. Ucraïna, segons aquest relat, sempre ha format part d’una Rússia més gran, des de l’antiga Rus de Kíev. Per citar Putin, ni tan sols és un estat i no té dret a existir. Hi ha una llarga tradició de Moscou que pretén sufocar el desenvolupament de la cultura ucraïnesa i de la seva identitat nacional, i és aquesta tradició del segle XIX a la qual es refereix Putin quan afirma que els russos i els ucraïnesos són un sol poble. Plokhy afirma que avui tenim una narrativa imperialista, escrita per Putin i el seu cercle íntim, però a Ucraïna, aquesta visió del món, i la interpretació històrica distorsionada que la sustenta, està sent derrotada. Per tant, considera que és Rússia la que més podria canviar com a resultat d’aquesta guerra. Quan els imperis s’esfondren, les velles potències imperials es reinventen, trobant una nova identitat com a estats-nació. I això encara no ha passat amb Rússia. L’any 1991 molts van creure que amb el final de la Unió Soviètica començaria una nova era. Per a molta gent, inclosos molts ucraïnesos, va ser així però no per al grup central al poder, per a Rússia, o almenys per a la seva elit. Plokhy conclou que potser el naixement d’una nova identitat per a Rússia, lliure de la ressaca de l’imperi, serà el resultat durador d’aquesta guerra.

Michael O'Hanlon Everyone’s talking about the endgame in Ukraine. Here’s how it might look

L’autor comença contextualitzant les terribles conseqüències de la guerra d’Ucraïna amb una intenció clara: veure com pot acabar i trobar-ne una sortida. No obstant això, esgrimeix que és la pròpia Ucraïna qui hauria de decidir el seu futur, no els Estats Units i els seus aliats. El primer escenari necessari per progressar hauria de ser un armistici, tot i que Rússia seguiria en control del territori conquerit. No obstant això, Rússia continuaria sota sancions, en principi sense espai d’enduriment cap a exportacions de gas natural rus. Així mateix, les observacions de pau internacional posteriors a l’armistici serien clau i necessàries. Evidentment, tot i que Ucraïna no estaria preparada per una cessió d’aquest tipus, l’autor creu que en qüestió de mesos canviaria de parer. Un cop instaurat l’armistici, els diàlegs i les negociacions per arribar a una millor solució tindrien lloc. Henry A. Kissinger, per exemple, tot i la controvèrsia generada, considerà que segurament Ucraïna hauria de cedir territori. L’autor de l’article recupera amb pinces la perspectiva de Kissinger per tal d’explorar algunes concessions que podrien portar a terme els bel·ligerants i com això ajudaria a trobar una possible solució. Per començar, la primera seria portar a terme un referèndum per determinar la sobirania sobre els territoris en disputa, després d’un període de refredament de diversos anys: Ucraïna o Rússia com a respostes. Aquest referèndum fugiria de la situació de Crimea. La segona proposta seria crear zones autònomes on tant Ucraïna com Rússia tinguessin sobirania, tal i com ha succeït als Balcans. Un tercer enfocament ajornaria certes situacions difícils i aspectes més sensibles, però fonamentals a tractar. Sota aquest acord, les dues parts acceptarien estar en desacord amb la sobirania, de moment. L’autor conclou amb l’afirmació que la situació actual requereix un inici de la negociació per part del president Volodymyr Zelensky d’Ucraïna, amb la fi de plantejar totes aquestes direccions.

Ali Ahmadi Russia-Ukraine War: Implications for Asian Geoeconomics

La invasió russa d’Ucraïna ha provocat una sèrie de sancions per part dels països occidentals i que tindran importants repercussions, fins i tot en l’escenari improbable d’un final relativament ràpid dels combats. L’impacte sobre l’economia global i les cadenes de subministrament tant de la guerra com de l’escalada del règim de sancions ja ha estat important, però també tindrà conseqüències a llarg termini sobre la geoeconomia d’Àsia i el comerç Est-Oest. L’autor argumenta que hi ha tres tendències interrelacionades i provocades per la invasió russa d’Ucraïna i la successió sense precedents de les sancions occidentals imposades a Moscou, que estan redibuixant els mapes comercials a Àsia. Les dues primeres tendències estan estretament relacionades amb el fet que la guerra a Ucraïna i els embargaments econòmics associats han creat importants bloquejos pel que fa al Nou Pont Terrestre Eurasiàtic (New Eurasian Land Bridge, NELB). Mentre Beijing basa la seva Iniciativa de la Ruta (Belt and Road Initiative, BRI) en la mística de l’antiga Ruta de la Seda, la seva ruta terrestre principal als seus mercats objectiu a Europa occidental passa per la NELB, que transita per Àsia Central i Rússia fins arribar al continent europeu. Aquesta ruta és tan important que els funcionaris xinesos s’han preocupat en el passat per la dependència excessiva de Rússia per a les seves necessitats logístiques. La segona tendència, que també està estretament relacionada amb el bloqueig  de la NELB, és l’augment de l’activitat logística d’altres països asiàtics, especialment d’Àsia Central i Àsia del Sud, per arribar als seus mercats a Occident a través de l’Iran. Durant les últimes setmanes, s’ha produït una ràfega d’activitats al voltant de l’expansió de l’accés comercial que involucra l’Iran i els països del seu entorn immediat. La tercera tendència, i potser la menys reconeguda, és l’estratègia d’obertura cap a l’Est de Rússia per mitigar els efectes de les sancions diversificant el seu comerç lluny de les economies occidentals que semblen cada cop més interessades a armar la interdependència. Tot i que la ruta de Rússia cap a la Xina o l’Àsia central és senzilla, la seva ruta terrestre cap a l’Índia, un soci comercial clau que s’ha negat a unir-se a la coalició de sancions occidentals, és molt més complicada. A l’Índia, envoltada per terra pels seus adversaris Pakistan i Xina, s’ha d’arribar per mar. Si bé el comerç entre l’Índia i Rússia es realitza majoritàriament per mar, viatjant pel canal de Suez, l’absència d’una ruta més directa pot convertir-se en una vulnerabilitat, sobretot en l’actual entorn polític. Això augmenta la importància del Corredor Internacional de Transport Nord-Sud (International North-South Transport Corridor, INSTC), que travessa el Caucas per connectar Rússia amb el port iranià de Bandar Abbas a l’estret d’Ormuz, des d’on es disposa d’una ruta marítima més curta cap a l’Índia. Això no només redueix dràsticament el temps de trànsit de les mercaderies que transiten entre l’Índia i Rússia, sinó que també evita rutes marítimes que poden ser sotmeses a bloquejos polítics.

Joe Webster Beijing is trying to weaken sanctions on Russia

L’opinió pública a la Xina està duent a terme una campanya per part dels mitjans estatals per emfatitzar les dificultats econòmiques a Occident (afirmen que els Estats Units ja es troba en una recessió econòmica), pressionar als líders occidentals perquè alleugin les sancions a Rússia i resoldre indirectament el conflicte favorablement per a Vladímir Putin. El suport de Xi Jinping a Rússia no és cap novetat: Pequín va acusar Washington i Brussel·les de mentir sobre els perills d’una invasió, va amplificar la desinformació per part del Kremlin i va donar suport a Putin en diferents votacions a l’ONU. Xina es esperançadora amb l’estabilització de l’exèrcit rus durant aquest mes i mig i confien en una victòria de Putin. A més a més, amb els casos de la variant de la Covid-19 d’Omicron estables i l’arribada de la nova vacuna nacional ARNm, Pequin pot treure’s de sobre un dels seus bloquejos més importants econòmicament i donar suport a Rússia.  L’OTAN va declarar que “les polítiques coercitives de la República Popular Xinesa desafien els seus interessos, seguretat i valors” i que l’aliança xinesa-russa intenta soscavar l’ordre internacional basat en regles. Tanmateix, el conseller de Seguretat Nacionals dels Estats Units, Jake Sullivan, va apuntar que la màxima prioritat amb la Xina és que “no doni suport militar a Rússia mitjançant el subministrament d’equips”, mentre que la segona prioritat és que “no es dediqui a soscavar o evadir sistemàticament les sancions dels Estats Units”. Sullivan afirma que, fins ara, la Xina no ha actuat en contra d’aquests dos principis bàsics. Per altra banda, Pequín es prepara per oferir subvencions a les refineries en cas que els seus preus de referència del cru puguin per sobre dels 130 dòlars el barril. Com a conclusió, la Xina sembla estar preparant-se per a més turbulències del mercat del petroli a conseqüència de la invasió a Ucraïna. 

Bárbara Reis Para complicar: sanções contra a Rússia beneficiam a Rússia

Fa poques setmanes es van donar a conèixer les dades referents als ingressos mundials derivats del petroli: Rússia exporta menys a causa de les sancions, però els seus ingressos augmenten perquè el preu del petroli continua pujant. Les dades són de l’Agència Internacional de l’Energia. Així doncs, amb els preus del cru més alts, s’estima que els ingressos d’exportació de petroli rus van augmentar en 1.700 milions de dòlars al maig i ara se situen en els 20 mil milions. L’agència afegeix que, malgrat les sancions, la Unió Europea segueix sent la principal destinació de les exportacions russes: el 43% dels “fluxos russos” van cap a la UE. L’autora afirma que això no és cap sorpresa i que ja se sabia que seria impossible tallar la dependència del petroli rus d’un dia per l’altre i que els mateixos països que han imposat sancions a Rússia seguirien comprant petroli a Rússia. Només a la UE, hi ha quatre països que depenen en més del 60% del petroli rus: Eslovàquia, Lituània, Polònia i Finlàndia. Just per sota, en el vuitè lloc del rànquing dels més dependents, hi ha Alemanya, que compra a Rússia el 30% del petroli i derivats que necessita. Pel que fa al gas, la dependència és encara més gran: tres membres de la UE depenen al 100% del gas rus i tres entre el 95% i el 99%. Alemanya depèn el 49%, Itàlia el 47%, els Països Baixos el 27% i França el 20%. S’entén ara per què no hi ha hagut sancions sobre el gas: Europa s’hauria aturat. Un altre dels motius que expliquen la ineficàcia de les sancions és el fet que els països castigats sempre acaben trobant nous consumidors. Ara el patró es repeteix: al maig, les importacions xineses de petroli i combustible russos van augmentar gairebé un quart de milió de barrils al dia i, per primera vegada, van arribar als dos milions al dia. En darrer terme, els criteris palpables dificulten la lectura d’aquesta guerra. Exposen els límits i les debilitats d’Occident i també evidència: no hi ha cap líder al món que cregui que el règim rus i els seus oligarques canviaran per culpa de les sancions.

Phillips Payson O’Brien Russia's Invasion of Ukraine Changes What We Know About State Power

En aquest article, O’Brien explora i reexamina les teories tradicionals de relacions internacionals que situen a Rússia com un Great Power. L’article esgrimeix que el cas específic de la guerra Rússia-Ucraïna està qüestionant i situant en un altre pla molts dels embolics retòrics que dominaven el debat acadèmic sobre què significa ser un Great Power i què construeix un bon lideratge polític. Aquesta dicotomia de Great Power-Small Power va ser acceptada de manera consensuada pràcticament en tot el debat, concretament entre un grup d’acadèmics de l’escola realista. Un exemple clar del realisme a les relacions internacionals és Henry A. Kissinger. Kissinger va fer estimacions controversials sobre tenir en compte a Rússia com un Great Power i, per tant, comprendre el seu interès per Ucraïna. Subscrit per Mearsheimer i Walt, la idea realista es va basar en entendre la figura de Putin com un gran estratega d’idees clares, mentre que Ucraïna era la potència dèbil. La idea subjacent, dominada per un determinisme clar, era que els Great Powers sempre acaben guanyant. No obstant això, l’autor esgrimeix que, contràriament a aquesta doctrina, en cap moment Rússia ha sigut un Great Power en la guerra. Després de tots els mesos, amb només el 20% del territori ucraïnès conquerit, amb un alt número de baixes militars i amb tota una estratègia que s’ha esfumat, l’autor considera fonamental reconsiderar què és un Great Power. Concretament, l’armament militar –el qual ha estat sempre la primera categoria per classificar el poder d’un Estat- podria tenir igual d’importància que el poder econòmic, polític o social. En aquest cas, sent la 10ena economia del món i compartint posició amb Brasil, Rússia no seria un Great Power; de fet, l’economia russa és altament improductiva. Si a més a més hi tenim en compte la tecnologia i la innovació, Rússia no arribaria ni al top 50. Finalment, amb un lideratge dictatorial i en decadència, Rússia tampoc podria ser considerada un Great Power. Per aquestes raons, O’Brien obre la porta a reconsiderar els criteris per determinar el poder d’un Estat en la seva conclusió.

Catalunya, España, Europa

Nicoletta Pirozzi EU foreign and security policy: flexibility and leadership

En aquest article l’autora argumenta que per mitigar el disfuncionament de la seva política exterior, la UE ha de posar fi al requisit d’unanimitat. En efecte, la guerra d’Ucraïna torna a mostrar els límits del funcionament de la política exterior, de seguretat i de defensa de la Unió Europea. A la vegada, les dificultats per aprovar el sisè paquet de sancions contra Rússia —i en particular les relacionades amb la importació del seu petroli— demostren les disfuncions d’una UE que conserva una forta empremta intergovernamental, dominada per la lògica del consens i, per tant, pels executius nacionals i les seves prioritats. En el passat, aquestes disfuncions ja van paralitzar la UE en crisis i conflictes com els de Líbia, el Sahel i l’Orient Mitjà. Avui sembla evident que si la Unió vol sobreviure en un entorn caracteritzat per un major dinamisme geopolític, tant per part dels seus rivals estratègics com dels seus socis, ha de posar en marxa les reformes que el puguin dotar d’un sistema de govern eficaç. per a la política exterior i de seguretat. Un primer element es refereix a mecanismes de funcionament més flexibles. Un cert grau de diferenciació sempre ha format part de la integració europea, des de la zona euro fins a l’espai Schengen passant per la defensa. Els models basats en la integració i la cooperació flexible també s’han d’aplicar a les àrees de política exterior i de seguretat, com a antídot contra l’amenaça de fragmentació i fins i tot de desintegració. En els tractats ja hi ha mecanismes, com l’abstenció constructiva i la cooperació reforçada, però amb prou feines s’han utilitzat, amb la notable i recent excepció de la Cooperació Estructurada Permanent (PESCO) en defensa. Un segon element es refereix a la reforma de les normes de decisió i, en particular, a la unanimitat, que massa sovint ha comportat inacció. En el passat, la superació de la unanimitat ha permès desbloquejar llargs períodes de bloqueig institucional, com en el cas del mercat interior dels anys vuitanta. De la mateixa manera, la introducció del vot per majoria qualificada podria ser molt beneficiosa per a la política exterior. Augmentaria la capacitat d’actuació de la UE, no només perquè caldria més d’un estat membre per bloquejar una decisió, sinó també perquè els estats membres que es troben en minoria es veurien estimulats a intensificar els esforços de negociació, construir aliances i ajudar a arribar a un acord. Finalment, l’autora afirma que cal introduir mesures específiques en el sector de la defensa. En els darrers anys, la unió ha donat un impuls polític molt necessari a la cooperació europea en aquest àmbit, però ha arribat el moment de produir resultats tangibles, sobretot per no perdre impuls. Cal doncs una visió sistèmica que proporcioni un marc global coherent entre totes les iniciatives, de manera que es reforcin, no es superposin ni es dupliquin, i que respecti un equilibri adequat entre la dimensió intergovernamental i la de la UE. Aquesta visió ha de ser recolzada per una revisió de l’arquitectura institucional global.

Carolyne de Gruyter L’Europe que les Habsbourg et l’Union ont en partage

En el seu darrer llibre, Beter wordt het niet ; een reis door de Europese Unie en het Habsburgse Rijk (De Geus, 2021), la periodista Caroline de Gruyter intenta pensar l’Europa actual a través d’un paral·lelisme sorprenent: i si la Unió Europea tingués coses a aprendre de l’Imperi dels Habsburg? En tots dos casos, la maledicció d’Europa és també la seva benedicció: un semi-acabament perpetu. Aquesta debilitat existencial, compartida avui per la Unió Europea, va obligar els governants dels Habsburg a un nombre increïble d’equilibris en l’exercici del poder. Des de la seva fundació als anys 50, la Unió Europea s’ha transformat, després d’una llarga sèrie de canvis, piruetes polítiques, crisis i cops de sort, en una potència relativament significativa. Com l’Imperi dels Habsburg, és militarment dèbil, evita les guerres i deriva el seu dret a existir del valor afegit que aporta als estats membres, la qual cosa l’obliga a redefinir-se constantment. També com els Habsburg, Europa no es pot permetre el luxe de discutir amb tothom. Necessita aliances per no ser atacada alhora des de totes bandes. Cal seguir parlant amb uns quants dictadors i autòcrates, gradi o no. En resum: embrutar-se les mans fins a cert punt, com quan es va signar un acord sobre els refugiats amb Turquia. La Unió Europea és la campiona del món en disputes. No obstant això, ha sobreviscut a totes les crisis dels darrers anys: la crisi financera, la crisi de l’euro, el Brexit, la crisi dels refugiats. Per què ? La resposta és senzilla: els caps de govern que prenen totes les decisions a Brussel·les, volien que sobrevisqués. Van fer aquesta elecció. Va despertar molt descontentament, però això també va ser apreciat per molts ciutadans de la Unió. La UE està guanyant popularitat a molts països, la qual cosa no vol dir que la gent estigui satisfeta amb ella, on tantes coses estan malament, sinó que cada cop està més satisfeta d’estar-hi. En un entorn tranquil, envoltat només de veïns amics, Europa podria haver-se ensorrat fàcilment. Però, com l’imperi dels Habsburg d’antic, està envoltada de països que l’amenacen. Aquests poderosos rivals utilitzen els aranzels duaners, les dades informàtiques, la perforació de gas o els refugiats com a tantes armes. És aquesta pressió externa que obliga Europa a reinventar-se per quarta vegada. Ara, com a poder geopolític.

Adam Ramsay Denying Scotland a referendum would prove that Britain really is broken

Fa dues setmanes, Nicola Sturgeon, primera ministra d’Escòcia, va anunciar que el seu govern celebrarà un referèndum independentista l’any vinent, amb el permís o sense del Regne Unit. Molts creuen que és impossible, ja que Westminster és l’únic que pot concedir aquest dret i que Boris Johnson clar que no votarà a favor. Aquesta disputa haurà de resoldre’s als tribunals. A Gran Bretanya, la sobirania recau en la monarquia des de fa segles, per un ordre diví. Tanmateix, a Escòcia, aquesta sobirania recau en el poble. Al Claim of Right Act de 1689, Escòcia limitava el poder de la corona escocesa sobre el seu parlament i es feia ressò d’una tradició celta mil·lenària per la qual els reis i els caps no eren nomenats per Déu, sinó per i entre un consell d’homes poderosos. Malgrat que aquestes tradicions històriques no equivalen a la democràcia, si és cert que deixen una empremta cultural important. Quan els membres del parlament escocès juren després de cada elecció, estan obligats a jurar també lleialtat a la reina. No obstant això, des de la creació del parlament escocès, ha sorgit una tradició per la qual molts també declaren que la sobirania recau en el poble. La mateixa Nicola Sturgeon va fer-ho així a les eleccions del 2021. A Edimburg, l’any 1989, 58 dels llavors 72 diputats d’Escòciaincloent Gordon Brown, Alistair Darling i Menzies Campbell, van reunir-se amb els sindicats, l’església i altres líders de la societat civil per signar la reivindicació del dret, declarant que reconeixien el dret sobirà del poble escocès a determinar la forma de govern més adequada a les seves necessitats. És per això que, negant un segon referèndum a Escòcia, Westminster demostra que encara està arrelat en tradicions històriques de fanatismes religiosos i de drets monàrquics divins. 

Simon Jenkins The United Kingdom is broken. It’s time for a new British federation

El 2007, els nacionalistes escocesos van prendre el poder a Edimburg i mai més no l’han perdut. Tot i que la popularitat de la independència entre els escocesos ha anat fluctuant, els votants menors de 50 anys estan aclaparadorament a favor. Mentrestant, a Irlanda del Nord, el caos del Brexit ha alimentat l’expectativa d’un referèndum d’unió amb el sud a mitjà termini. Fins i tot a Gal·les, el partit nacionalista Plaid Cymru ha adquirit un nou vigor, i el suport a un País de Gal·les independent ja compta entre una quarta part i un terç dels votants. La resposta d’Anglaterra a aquest esclat de dissensió ha estat la inèrcia. A tota Europa, la construcció nacional ha estat durant molt de temps un art complicat. De manera violenta a Iugoslàvia i Ucraïna, i de manera relativament pacífica a Espanya i Itàlia, els governs centrals han lluitat sense parar per mantenir la lleialtat dels pobles que els componen. Com ha demostrat la historiadora política Linda Colley, això ha requerit respecte per la identitat i l’enginy en trobar fórmules d’autonomia. Els Länder alemanys gaudeixen d’una autonomia considerable i els bascos i catalans d’Espanya gaudeixen de graus de sobirania econòmica, fiscal i judicial importants. Al Regne Unit, en canvi, el primer ministre ha qualificat de “desastre” la descentralització a Escòcia. Després del Brexit, Johnson va insistir que tots els poders i subvencions de la UE fossin retornats no als governs descentralitzats sinó a Londres. Mentrestant, només un de cada cinc votants a Anglaterra afirma que li importa si Escòcia s’independitza. En aquest context Jenkins argumenta que un Regne Unit federat d’Anglaterra, Escòcia i Gal·les es beneficiaria molt de la seva diversitat.

Amanda Coakley EU Enlargement Is Broken in the Balkans

Hores després que la Unió Europea prengués la decisió històrica d’atorgar l’estatus de candidat a Ucraïna i Moldàvia, els legisladors búlgars van enviar un missatge que indica que el camí serà probablement llarg i sinuós. A finals de juny, el parlament de Bulgària va votar a favor d’aixecar el seu veto de dos anys a les negociacions d’adhesió de la veïna Macedònia del Nord després d’arribar a un acord sobre els termes per a l’adhesió del país. Macedònia del Nord és candidata a ser membre de la UE des del 2005, però el seu procés d’adhesió s’ha vist obstaculitzat contínuament. Entre les objeccions més virulentes hi ha el veto de Grècia sobre el nom del país, que es va canviar de Macedònia a la República de Macedònia del Nord el 2019. Poc després, Bulgària va introduir un veto el 2020 a causa d’una altra disputa de llarga durada sobre la història i la llengua. La votació al parlament búlgar és una llum verda condicionada. Entre la llista de demandes hi ha una crida a Macedònia del Nord perquè reconegui la minoria búlgara del país en el preàmbul de la seva constitució. També hi ha un requisit que res del procés d’adhesió de Macedònia del Nord a la UE no es pugui interpretar com un reconeixement per part de Bulgària de l’existència d’una llengua macedònia, que molts búlgars rebutgen com a llengua separada. Les relacions entre els líders dels Balcans Occidentals i la UE també s’han vist sacsejades pel primer ministre albanès, Edi Rama, que va acusar la UE de defensar un esperit distorsionat de l’ampliació, afirmant que ha passat d’una visió compartida de tota una comunitat al segrest d’estats membres individuals. Rama va advertir Ucraïna i Moldàvia sobre les seves expectatives de pertinença a la UE. En efecte, Macedònia del Nord és candidata des de fa 17 anys i Albània des de fa vuit.

The Economist The war is forcing Russia’s Balkan friends to recalibrate

La guerra a Ucraïna està tenint repercussions importants als Balcans, on per exemple els líders serbis generalment prorussos, han hagut d’ajustar el seu discurs i fer equilibris entre les diferents part implicades. Les tropes sèrbies són entrenades pels Estats Units i fan exercicis tant amb l’OTAN com amb Rússia. Sèrbia depèn totalment del gas rus, però té moltes més relacions comercials amb Alemanya i la Xina. Resistint a la pressió occidental, Sèrbia s’ha negat a imposar cap sanció a Rússia; però a l’abril es va saber que l’equipament militar occidental destinat a Ucraïna transitava pel seu territori. A les Nacions Unides Sèrbia s’alinea amb els països occidentals en els vots de condemna a Rússia, però al mes de maig Sèrbia va signar un acord de tres anys amb Moscou per aconseguir gas més barat. A la vegada, durant anys, els mitjans de comunicació serbis, que majoritàriament donen suport al govern, han difós propaganda russa sense filtres i això no ha canviat des de l’inici de la guerra.  Paral·lelament, Rússia ha treballat durant anys per aprofundir els vincles amb els serbis ortodoxos de la regió, molts dels quals se senten propers a Rússia per raons històriques. L’amargor pel bombardeig de l’OTAN el 1999 també té un paper important. No hi ha proves que les polítiques russes als Balcans hagin canviat, però els polítics de la regió estan adaptant les seves polítiques per ajustar-se a les realitats canviants. L’any passat, Milorad Dodik, el líder dels serbis a Bòsnia, va iniciar procediments per recuperar els poders que la seva entitat havia cedit a l’estat bosnià. Això va provocar la pitjor crisi al país des del final de la guerra l’any 1995. El 6 de juny aquests plans van quedar suspesos durant sis mesos. A Montenegro també el paisatge ha canviat. A l’abril es va formar un nou govern, sense suport dels partits considerats com a prorussos.

Peter Dlhopolec Slovakia Takes Over a Divided V4 after Hungary’s Troubled Presidency

El Grup de Visegrad (V4), que en el passat s’havia unit al voltant de grans objectius polítics, ha quedat dividit per la invasió d’Ucraïna i Eslovàquia vol tornar a destacar els objectius compartits del grup durant la seva presidència. Els quatre països del bloc –Polònia, Hongria, República Txeca i Eslovàquia– mai no van desenvolupar una política exterior comuna en els 31 anys d’existència del bloc, que va sorgir el 1991 per ajudar a facilitar l’adhesió de la regió a l’OTAN i a la UE. En canvi, sobretot a nivell de la UE, ha intentat coordinar les seves posicions en diferents assumptes relacionats amb la UE. No obstant això, el ministre d’Afers Exteriors eslovac considera que Hongria, que ostentava la presidència del grup fins ara, sovint va donar la impressió que existia una política exterior comuna. Però ara Hongria s’està aïllant cada cop més a la UE pel seu govern autocràtic i la seva política anti-UE impulsada pel partit Fidesz, així com per l’estreta relació d’Orbán amb el president Vladimir Putin. La guerra també ha convertit Hongria en un paria dins del V4. Abans de la invasió, podia comptar amb el suport de Polònia en les seves diferents batalles amb Brussel·les. De fet, la Comissió Europea continua preocupada per l’estat de l’estat de dret i la democràcia en ambdós països. El 2020, Polònia i Hongria fins i tot van intentar bloquejar el pressupost de la UE perquè vinculava el desemborsament de fons amb l’adhesió a l’estat de dret. Eslovàquia i el seu govern proeuropeu, liderat per Eduard Heger, s’han compromès a adoptar durant la seva presidència un enfocament pragmàtic i a retornar el V4 a les arrels de la seva cooperació basada en el respecte a la democràcia i el compromís amb la integració europea. Això també inclourà el suport a Ucraïna i Moldàvia, als quals se’ls ha concedit l’estatus de candidat a la UE, Geòrgia i els Balcans occidentals que estan en camí cap a la UE, per exemple a través de l’únic organisme institucionalitzat del grup, el Fons Internacional de Visegrad.

Democracia, diversidad y cultura

Editorial CTXT Melilla: una matanza “bien resuelta”

Tal i com explica l’article, la trentena de morts i multitud de ferits a la tanca que separa Nador i Melilla han horroritzat a l’opinió pública. ONG i activistes estan fent ressò de la tremendament injusta situació per tal d’exigir responsabilitats al respecte. No obstant això, segons les últimes declaracions del president Sánchez, això no està sobre la taula; de fet, en cap moment es fa referència a les víctimes. Durant la intervenció, el president espanyol elogia l’actuació de la policia marroquí en una “operació ben resolta”. La deshumanització, repressió i mort de tantes persones que busquen una vida millor a Europa fa que aquestes declaracions indignin. Tal i com apunta l’autor, la cruesa de les imatges recorden a l’autor a un lager nazi. No obstant això, per entendre aquestes declaracions, cal recordar l’erosió de les relacions amb Algèria i traïció al poble sahrauí per tal d’acontentar al Marroc per part d’Espanya. Tal i com diu l’article en la seva opinió frontal, el Govern més progressista de la Història ha abandonat al poble sahrauí a canvi de que el Marroc acabi amb la vida de migrants. L’autor esgrimeix que vides i principis han estat sacrificats amb una sola decisió, i només a través d’enderrocar la tanca es podrà avançar. Aquesta va crear amb el govern d’Aznar i ha tingut el beneplàcit de cada Govern. Si no acceptem que els subsaharians també són ucraïnesos, si no normalitzem la gestió de fronteres tal i com diu l’article, mai matarem prou per impedir que persones humanes creuin les fronteres. Les polítiques migratòries espanyoles, pactades amb Europa, formen part del que l’autor conclou com “un genocidi estructural”.

Amitav Acharya Hierarchies of Weakness. The Social Divisions That Hold Countries Back

Des que Joe Biden va convertir-se en presidents dels Estats Units, l’ordre internacional ha semblat definit per un ressorgiment del conflicte entre grans potències: La Xina i els Estats Units i Washington i l’OTAN contra Rússia. Els analistes suggereixen que, davant d’aquestes circumstàncies, els tipus de poder més importants són el militar i l’econòmic. Tanmateix, s’obliden en com aquests dos poders depenen de l’estabilitat social dins de les mateixes fronteres. Donald Trump va aprofitar les tensions creixents als Estats Units per augmentar les divisions de classe, raça, gènere i religió amb finalitats polítiques. A més a més, va evitar aliances multilaterals, va retirar-se d’acords internacionals i va establir relacions amb autòcrates com el príncep hereu saudita i Vladímir Putin. El resultat d’aquestes accions és que molts aliats nord-americans tenen molta menys confiança en el país perquè mantingui l’ordre internacional liberal. Però no és l’únic país que s’enfronta a una profunda polarització social. L’augment de la desigualtat d’ingressos ha frenat el creixement econòmic i la mobilitat social des de la Gran Recessió del 2008 no tan sols a Itàlia, Regne Unit o els Estats Units, sinó també a Finlàndia, Noruega o Suècia, països coneguts per la seva distribució més equitativa de la riquesa. Els delictes d’odi antiasiàtics han augmentat dràsticament a escala mundial arrel de la pandèmia de la Covid-19 i la Xina i l’Índia també han experimentat una creixent desigualtat d’ingressos. A mesura que els governs occidentals se centren en conflictes internacionals, la competència estratègica i les interrupcions de l’economia global, les divisions socials que minven la unitat i la força dels països suposen una amenaça encara més gran per a l’estabilitat mundial. L’accés desigual a les noves tecnologies i a l’educació, juntament amb la desregulació econòmica i les retallades a les prestacions socials, ha provocat una creixent divisió entre classes entre els que estan al capdamunt i els que estan més avall. El moviment racial del Black Lives Matter o la discriminació de persones per la seva casta a l’Índia o al Nepal en són alguns exemples d’aquestes divisions racials. Les disparitats de gènere i les persecucions religioses també són àmpliament freqüents. El Banc Mundial estima que uns 2.400 milions de dones en edat de treballar a tot el món encara no tenen plens drets econòmics, a 95 països les dones no tenen garantia d’igualtat salarial i a 76 països es restringeixen els drets de propietat de les dones. Pel que fa als atacs discriminatoris per religió, han augmentat respecte a altres anys. Alguns exemples són els atacs contra cristians i musulmans a l’Índia o la persecució de minories musulmanes a la Xina. És important que els països aprenguin que crear unes condicions de joc més equitatives entre els grups socials pot mobilitzar millor el seu poder interior i promoure la seva capacitat col·lectiva per millorar l’estabilitat i la pau en el món en conjunt. 

Shannon K. O’Neil The Myth of the Global. Why Regional Ties Win the Day

O’Neil comença l’article qüestionant un consens sovint inalterable en el debat acadèmic actual: el món cada cop està més globalitzat. Els números fan ressò d’aquesta realitat: primerament, el comerç internacional representa avui un dia un total 20 bilions de dòlars, res a veure amb les xifres de 1980, per exemple. En segon lloc, els moviments de capital, xifren 4 mil millons l’any, també. I les persones viatgem i creuem fronteres més que mai. Per tant, d’entrada, l’afirmació inicial no sembla desencaminada. No obstant això, és potser enganyós afirmar que aquest flux de béns i serveis i persones es produeix sempre a escala global i no regional, que és el que realment passa. Quan les empreses, per exemple, van a l’estranger, no van a qualsevol lloc. La majoria de les vegades, les distàncies són més properes al país d’origen. La globalització, tal i com esgrimeix O’Neil, és un “mite”. Un estudi de la companyia logística DHL i la NYU Stern School of Business ho sustenta. Si comparem un parell de països similars en proximitat respecte un altre parell que no presenta proximitat, els primers països tendiran a augmentar el comerç entre ells. Fins i tot, a triplicar-lo. És per això que les cadenes de subministrament generalment no són globals, sinó regionals. Els fluxos internacionals de capital també presenten aquesta tendència: de mitjana no superen la distància entre Tòquio i Singapur. Més de la meitat dels fluxos internacionals es produeixen dins de tres centres regionals principals: Àsia, Europa i Amèrica del Nord. La principal raó per la qual la lògica regional superposa la global és senzilla: la geografia importa, ja que determina de forma fonamental els costos econòmics, que encara són substancials, a més dels costos addicionals de connectar dos espais i horaris diferents. Tant les normes jurídiques, els contextos culturals, com els acords de lliure comerç també segueixen una lògica regional. Tot i que el Brexit i el creixent euroescepticisme populista poden fer que la UE sembli fràgil, el continent europeu és, de fet, la regió més integrada del món. Àsia tampoc es queda enrere. A més, durant la pandèmia de la COVID-19, els tancaments de fronteres i l’augment dels costos de transport han fet que les empreses considerin apropar la producció a casa. Tot i que Amèrica és l’últim hub en integració, una economia nord-americana més competitiva és possible si aquesta aposta per la regionalització. Es podrien ampliar tres dècades de lliure comerç, així com solidificar cadenes de subministrament en sectors estratègics. No obstant això, un canvi de regionalització també requerirà un canvi de mentalitat. Caldrà reconèixer que el mercat intern americà necessita l’economia global, sobretot per potenciar la classe mitjana i treballadora dels Estats Units.

Nandini Archer & Darcey Edkins After Roe v Wade, is Northern Ireland the next anti-abortion frontier?

La revocació del dret constitucional a avortar als EUA pot tenir conseqüències nefastes per als drets reproductius de les dones arreu del món. Així ho fan notar els grups en defensa de l’avortament a Irlanda del Nord, que veuen pocs avenços en el desplegament de polítiques públiques que garanteixin el dret des d’ençà a l’octubre de 2019 quan es va despenalitzar l’avortament. A més, cal destacar que els col·lectius anti-avortament estan augmentant les seves activitats i veuen la derogació de Roe v Wade com un al·licient per a reivindicar les seves consignes també a Irlanda del Nord i poder revertir la despenalització. La situació per a aconseguir un avortament a Irlanda del Nord és complicada ja que l’atenció és limitada, el marc legal força incert i les clíniques que proveeixen el servei es veuen col·lapsades. Malgrat que el nombre d’avortaments hagi augmentat i les xifres volten les 3.000 pràctiques entre març del 2020 i gener del 2022, moltes dones han hagut de recórrer a centres d’altres parts de Gran Bretanya per a sotmetre’s a una interrupció de l’embaràs. Nogensmenys, la posició política en termes de l’avortament està molt polaritzada. Els partits unionistes són anti-avortistes mentre que els nacionalistes defensen el dret. Cal matisar que el ministre de sanitat (UUP) manté postures anti-avortistes i així ho ha manifestat en nombroses votacions i mostrant-se contrari a desplegar serveis que executin interrupcions de l’embaràs. A banda de la política oficial, és necessari destacar el paper que hi juguen certes fundacions cristianes de dretes. Aquestes organitzacions estan desplegant clíniques anomenades “centres d’embaràs en crisi” on atenen a dones per a convèncer-les de que segueixin amb el seu embaràs i les persuadeixen per a no aturar-lo. El problema és que moltes dones que hi acudeixen ho fan pensant que les assessoraran amb un avortament, però s’han detectat inclús casos d’amenaces en cas que ho facin. Moltes d’aquestes organitzacions ja estan desplegades a Estats Units i ara estan desembarcant a l’illa. Malgrat l’àrdua situació que travessa el moviment avortista, les últimes enquestes d’opinió semblen indicar un gir de la societat nordirlandesa cap a l’acceptació de l’avortament, assenyalant d’adequada la decisió de despenalitzar-lo. A més, les futures generacions també miren cap aquesta postura, el que fa pensar que el dret a l’avortament podrà mantenir-se. 

Economía, bienestar e igualdad

Torsten Müller & Thorsten Schulten Minimum-wages directive—history in the making

El passat 16 de juny, els ministres d’Ocupació i Afers Socials de la Unió Europea (coneguts per les sigles EPSCO) van ratificar la legislació de la Comissió Europea, el Parlament Europeu i el Consell de la Unió Europea de garantir uns salaris mínims adequats i reforçar la negociació col·lectiva. Només Dinamarca i Suècia van votar en contra, mentre que Hongria va abstenir-se. Els objectius d’aquesta legislació són els de garantir uns salaris mínims adequats que permetin un nivell de vida digne, lluitar contra la pobresa laboral i reduir la desigualtat salarial. Segons la directiva, els estats són responsables de decidir sobre el pes que atorguen a aquest salari mínim segons els criteris del poder adquisitiu, el cost de la vida, el nivell general de salaris i la seva distribució i la taxa de creixement dels salaris i els nivells i tendències de productivitat nacional a llarg termini. Alemanya va anticipar-se a aquesta proposta quan van prendre la decisió d’augmentar el salari mínim legal a 12 euros l’octubre d’aquest any. Irlanda va anunciar recentment que el salari mínim legal vigent s’eliminaria gradualment el 2026 i se substituiria per un nou més digne, que s’establiria en el 60% de la mitjana. A Bèlgica, el ministre d’Economia i Treball ha reconegut que el salari mínim no compleix la normativa europea i als Països Baixos la federació sindical FNV ha demanat un augment del salari mínim a 14 euros. Segons la comissió, aquest augment de salari seria beneficiós per a uns 25 milions de treballadors i seria especialment important en temps d’alta inflació. A més a més, com que les dones tradicionalment reben els salaris mínims, es reduiria la bretxa salarial de gènere. Actualment, només sis països compleixen amb el llindar del 80% de cobertura de negociació col·lectiva (Itàlia, França, Àustria, Bèlgica, Finlàndia, Suècia, Dinamarca i Espanya). Aquesta nova legislació suposa un canvi de paradigma en la visió de les institucions europees sobre els salaris i la negociació col·lectiva en comparació amb les polítiques seguides durant la recessió del 2008. Tot just fa deu anys, la Direcció General d’Afers Econòmics i Financers va recomanar una disminució dels salaris mínims legals i de la cobertura de la negociació col·lectiva i una reducció global del poder de fixació salarial dels sindicats com a reformes favorables per a l’ocupació. Ara ja no es veuen com una part del problema, sinó com una part de la solució. 

Johanna Treeck The ECB is now a prisoner of war

Els riscos d’una nova euro crisi estan creixent i és l’últim problema al que es vol afrontar Europa després de l’agressió russa. El BCE ja ha pres certes mesures per a mitigar els riscos, però ja hi ha veus que creuen que algunes economies de l’eurozona no podran solucionar els problemes sense transferències de membres més potents. Així doncs, ha anunciat que comprarà bons als països amb més necessitat i pujarà els tipus d’interès, per assegurar que els deutes dels estats s’estabilitzin. A més, s’ha fet una crida als països membres a mantenir una política fiscal coordinada i moderada, per intentar frenar la inflació a la que es veu sotmesa el continent. Una presa de decisió que s’ha fet és la de reinvertir els beneficis dels bons comprats durant la pandèmia als estats amb més dificultats. De la nova política que s’aplicarà encara se’n sap poc, però sembla que anirà en línia amb la que es va desenvolupar durant el període de la darrera gran crisi financera. Un pla d’Operacions Monetàries sense Restriccions sembla que serà el mètode escollit, però per aplicar-lo és necessari un Mecanisme d’Estabilitat Europeu, malgrat els estigmes que acompanya. És per això que el BCE està sent conservador a l’hora de dictar el que s’aplicarà per a no alarmar a certs estats membres i poder tenir el màxim de consens. Tanmateix, es vol fer constància de que els plans de solidaritat fins ara engegats han donat bons resultats per aturar els xocs exteriors i es posa com exemple els fons Next Generation, una iniciativa de la UE; s’apunta que el pla que s’apliqui hauria d’anar amb consonància. No obstant això, també hi ha crítics que indiquen que una nova intervenció podria donar bons resultats a curt termini, però no solucionar els problemes estructurals, i que es pot crear una dependència total dels països davant del BCE, el que no seria bo per a l’economia de la UE. Així doncs, Treeck matisa que el fons de la qüestió està en que els països han de solucionar els seus problemes de solvència, però que molts no ho podran fer sense l’ajuda del BCE que ara més que mai ha de treballar amb sintonia de les institucions i plans de la UE. 

Heather Grabbe A circular economy to break the cycle of crisis

Grabbe comença l’article afirmant que la passada cimera del G7 va mostrar els perills de pensar a curt termini. Mentre els líders dels països més rics del món van produir solucions ràpides, compromisos inconnexes i missatges contradictoris, diverses parts del món van assolir les seves temperatures més altes, així com severes inundacions. L’emergència climàtica es barreja amb un context d’inflació i crisis alimentària i les decisions a curt termini no solucionaran els problemes. L’autora esgrimeix que un canvi de pensament holístic és necessari, agafant l’exemple del Green Deal europeu. En lloc de crear noves dependències dels combustibles fòssils i infraestructures Europa ha de focalitzar-se en les renovables: circularitat és resiliència. Un exemple d’això podria traduir-se en generar incentius per persuadir als individus per tal de renunciar als cotxes i al transport individualitzat. Com a resposta, el sector de l’automoció podria oferir als ciutadans la mobilitat que necessiten mitjançant serveis compartits. L’autora considera que Europa ha d’abandonar un sistema que vinculi l’ocupació i el creixement amb la producció industrial i que sobrevalori el consumisme. En canvi, hauria de treballar cap a un sistema econòmic que satisfaci les necessitats humanes mitjançant l’accés a béns i serveis més duradors, més saludables i més eficients. Un enfocament que posi al centre les necessitats és essencial, en lloc d’un que valori el creixement del PIB. Una economia circular nodrida d’energies renovables depèn molt menys de les importacions d’energia, matèries primeres i béns, la qual cosa redueix la seva vulnerabilitat davant autòcrates com Putin que de sobte decideixen armar les cadenes de subministrament.

Renaud Lambert FMI, les trois lettres les plus détestées du monde

L’autor analitza el vel de misteri que envolta el Fons Monetari Internacional (FMI), les regles del qual semblen fluctuar segons motivacions polítiques: austeritat draconiana per a uns, generositat il·limitada per a altres. Lambert afirma que amb els anys la institució ha evolucionat i s’ha convertit en un baluard de l’ortodòxia neoliberal. Les reformes que demana a canvi de la seva assistència —privatització, desregulació, austeritat, etc.— determinen en bona mesura les condicions de vida de les poblacions afectades: podran rebre tractament mèdic, anar a l’escola, alimentar-se? En aquest context, el primer tipus d’assistència que l’FMI presta als seus membres és de caràcter tècnic. Sovint il·lustra els efectes retardats de la colonització: un cop obtinguda la independència, els països són sobirans, però sense un estat digne d’aquest nom. Alguns funcionaris expliquen que com a part de les seves missions d’assistència a l’Àfrica, han hagut de donar classes d’anglès a alts funcionaris i que de vegades s’adonen que determinats països fan els seus comptes nacionals amb Excel. Altres ni tan sols tenen ordinador. Però la principal ajuda que l’FMI ofereix als seus membres pren la forma dura i ràpida d’un préstec. Qualsevol membre que es trobi amb un problema de balança de pagaments pot sol·licitar ajuda financera. Aquest tipus de dificultat significa que el país ja no disposa de la moneda forta necessària per pagar el seu deute o importar els aliments que necessita la seva població, com ho fa avui Sri Lanka. A continuació, s’inicia un diàleg preliminar durant el qual el Fons exposa les condicions en les quals podria preveure la intervenció, ja que l’FMI només fa préstecs sobre la base d’un programa d’ajust que permeti resoldre els problemes que han provocat la crisi. I, per assegurar-se que la decisió de reforma del país en dificultats no disminueixi amb el temps, els desemborsaments de l’FMI es fan de manera fraccionada. En cas d’incompliment dels compromisos, els pagaments cessen. Com va resumir Dominique Strauss-Kahn quan va ser-ne director, la institució no està prevista per fer caritat…

Karen Hulebak The EU is jeopardizing the food supply in developing nations

El Codex Alimentarius és un conjunt de normes, directrius i pràctiques referents a establir uns estàndards de seguretat alimentària. Aquest és aprovat per una Comissió que depèn de les agències d’Agricultura i Alimentació i de l’Organització Mundial de la Salut, totes dues parts de les Nacions Unides. L’organització del Codex és formada per la UE i 188 països més i tots tenen veu i vot. Recentment, la UE ha entrat en una lluita burocràtica que pot enterbolir-ne el funcionament i conseqüentment entorpir les economies i subministrament de menjar dels països pobres. El Codex tracta els temes de seguretat alimentària, el que implica quins additius poden emprar-se, quins fertilitzants, la quantitat de residu que pot quedar en els aliments i quins suplements poden donar-se al bestiar. Els països en desenvolupament adopten tots aquests estàndards per a crear el seu marc legal i així poder importar i exportar els seus productes. Arribar als consensos és complicat degut a que és una feina en constant desenvolupament per les innovacions en el sector i les diferents postures dels països. Tanmateix, s’ha establert al llarg del temps un tipus de funcionament que es basa en que si algú té alguna objecció, en permet l’aprovació però no ho aplica en el seu territori, aquest mecanisme s’anomena “Declaració de Principis”. No obstant això, la UE, Rússia i Xina s’estan negant a acceptar l’aplicació d’un medicament veterinari anomenat zilpaterol i no ho estan fent ni per raons sanitàries ni de seguretat, sinó per altres motius que no tenen a veure amb qüestions científiques. La UE clama que és per una raó de benestar animal, malgrat que tampoc s’han trobat proves que comprometi la salut del bestiar. Així doncs, la UE es nega a que entri en funcionament dins del seu territori i que tampoc s’importi – que això seria lliure de fer-ho – però també està bloquejant l’aprovació dins el Codex. El fet de que no sigui una decisió científica, marca un precedent de desconfiança i no imparcialitat que pot tenir conseqüències nefastes per l’organització, com per exemple, que cada país faci la seva i els estàndards sanitaris vagin desfent-se poc a poc i les empreses no es molestin en complir-ne. Així doncs, la UE ha de replantejar la seva postura, ja que està posant traves burocràtiques, pot pujar els preus de les cadenes alimentàries, minar estàndards i posar en risc la vida de persones. 

Sostenibilidad y cambio climático

Christina Lu Race to the Bottom: Deep Sea Mining Is the Next Frontier

Molts països s’han començat a fixar en un nou mercat: la mineria de fons marí, la qual pot ser tant la propera clau per un futur més verd com una catàstrofe ambiental, tal i com explica Lu. Aquestes profunditats contenen potencialment metalls sense explotar, com el níquel, el cobalt, el coure i el manganès. La mineria d’aquestes riqueses s’està convertint en un actiu molt apreciat. Al juny es va descobrir a Nauru, una petita nació del Pacífic, possibles mines al fons del mar. L’Autoritat Internacional dels Fons Marins (ISA), té poc més d’un any per finalitzar les directrius per a la que podria ser la major oportunitat minera del món. El problema que sorgeix aquí és la incertesa tant econòmica a nivell de costos com ambiental a nivell de conseqüències que podrien destrossar els nostres oceans. “Sabem més sobre Mart i la lluna que no pas del fons del mar”, afirma Arlo Hemphill de Greenpeace. S’estima que els oceans contenen milers de milions de tones de cobalt, manganès, coure i níquel, crucials per a les bateries de ions de liti. Això també permet més recursos cap a sistemes d’energia renovables que permeten, per exemple, vehicles elèctrics. No obstant això, enmig de les interpretacions que permetrien explotar les mines submarines per part de la UNCLOS, algunes veus crítiques diuen que pot haver-hi poca alternativa més que generar nous estralls ambientals. Les perspectives científiques estimen que la mineria podria tenir un impacte ampli i fins i tot catastròfic, obrint la porta a noves fonts de contaminació oceànica. Tenint en compte la gran part del mar profund encara no s’ha explorat, adverteixen, el món podria perdre tot un ecosistema encara desconegut. No obstant això, els països i grups empresarials que, segons ells, ja han realitzat inversions i avaluacions d’impacte ambiental, argumenten que l’extracció d’aquests metalls és clau per la  transició energètica.

Philippa Nuttall Why an end to economic growth is inevitable

Fa 50 anys d’ençà la publicació de l’informe Límits del Creixement, redactat per un grup de joves investigadors. Els científics alarmaven de que els recursos de la Terra eren finits i que confiar en una economia basada en el creixement constant tindria conseqüències nefastes per a tothom. Després de no haver fet cas a aquestes recomanacions ens trobem actualment en una situació d’escassetat, crisis econòmiques i una desigualtat creixent. Mentrestant, els governs segueixen abraçant el creixement econòmic com la panacea a tots els problemes. Meadows, de 80 anys, fou un dels contribuïdors de l’informe i la seva visió és pessimista. Segons ell, la política actual, condicionada pels períodes de comicis constants és incompatible amb els plantejaments d’un decreixement econòmic, ja que exigeix resultats a curt termini, mentre que l’opció que ells proposaven requereix de sacrificis i una mirada a anys vista que cap grup polític està disposat a pagar. Així doncs, Meadows pronostica que la situació del creixement només canviarà en el moment que ja no sigui possible créixer i serà una canvi reactiu. A més, contràriament a la visió de molts de que les crisis actuals faran repensar a la gent i dirigents, ell pensa que les situacions límit i d’estrès – com l’actual – fan prendre decisions poc meditades i contraproduents. Altres pensadors hereus de les teories del creixement limitat es mostren més optimistes. És el cas de Raworth, autora de Doughnut Economics (Random House Business, 2017). Raworth veu com una oportunitat encetar una etapa post-creixement en que serà cabdal mantenir uns estàndards de benestar per una banda, mentre que per l’altra, serà condició necessària cuidar el medi ambient. Així doncs, cada vegada sembla més evident que el creixement sí que és limitat i tal i com indiquen els experts, com més aviat es busqui una alternativa, millors seran els resultats. 

Fatih Birol L’Afrique a le plus à gagner de la transition vers des énergies propres

Àfrica és la regió del món més exposada als efectes del canvi climàtic, mentre que els seus habitants són els que menys hi han contribuït. Segons Fatih Birol, director de l’Agència Internacional de l’Energia, s’han d’impulsar amb urgència diverses palanques per corregir aquesta injustícia, assegurant que les persones estiguin al centre de la transició verda al continent. Malgrat els reptes que això representa, l’informe Africa Energy Outlook 2022 de l’Agència Internacional de l’Energia considera que la transició energètica és una gran promesa per al desenvolupament econòmic i social del continent. L’ambició global d’aconseguir zero emissions netes de gasos d’efecte hivernacle l’any 2050 estableix una nova orientació al sector energètic. Aquesta transició cap a emissions globals netes zero està reduint els costos de les tecnologies netes i canviant els models d’inversió global. Els països africans estan en una posició única per beneficiar-se de les millores tecnològics d’aquests canvis i atraure fluxos creixents de finançament verd. A l’Àfrica, la transició obre moltes oportunitats. Les solucions d’accés a l’energia solar es troben entre les que creixen més ràpidament a les zones rurals. Les bombes de reg amb energia solar són menys cares que les bombes amb motor dièsel i poden millorar la productivitat dels aliments i la resistència a les sequeres. El muntatge d’aquestes solucions d’accés a l’energia i la fabricació de components clau són oportunitats creixents per a la indústria africana. No obstant això, aquests sectors es veuran superats en gran mesura per les oportunitats creixents per a Àfrica de convertir-se en un actor important en l’extracció i processament de minerals crítics, essencials per construir bateries, tecnologies d’hidrogen i energies renovables a partir del futur. També s’han identificat nous desenvolupaments prometedors en hidrogen verd, una altra àrea amb un gran potencial al continent. Tanmateix, la transformació energètica d’Àfrica només pot tenir èxit si gaudeix del suport de tota la població i si els aporta beneficis. Per això la població ha de ser el centre de la transició energètica. En darrer terme, la COP27 que se celebrarà a Egipte a finals d’any serà una plataforma important perquè els líders africans treballin a nivell mundial per identificar maneres d’impulsar aquestes transformacions. La dècada actual és crucial, no només per a l’acció climàtica global, sinó també per accelerar les inversions que permetran que Àfrica, el continent que acull la població més jove del món, prosperi en les properes dècades.

Cristina García Fernández El cambio climático y la seguridad en la cumbre de la OTAN

El canvi climàtic està influint sobre les capacitats i infraestructures militars crítiques, les cadenes de subministraments i l’entorn de seguretat de l’Organització del Tractat de l’Atlàntic Nord (OTAN), sobretot degut a la possibilitat que això generi nous conflictes a molts països. L’Aliança és conscient que l’escalfament global influirà cada cop més en les seves activitats. Per això, amb motiu de la cimera celebrada a Madrid, l’organització ha presentat un informe en què identifica els principals reptes davant el canvi climàtic. A l’informe queden clares les repercussions que el fenomen tindrà sobre la institució: danys estructurals sobre infraestructures crítiques a bases militars i zones d’entrenament; una demanda més gran de serveis públics, particularment energia i aigua per fer front a condicions més dures; més fragilitats en la cadena de subministraments; increment dels riscos per a la salut i la seguretat; augment del pressupost destinat al manteniment i protecció de bases, equips, infraestructures i altres actius. A la vegada, tot indica que hi haurà més conflictes, per la qual cosa caldrà una orientació més precisa cap a l’assistència humanitària i la resposta a desastres, en possible detriment de les dedicades específicament a la seguretat i la defensa. A més, s’han anunciat els primers objectius climàtics de l’OTAN. El més ambiciós és la consecució de zero emissions netes per al 2050. Això coincideix amb els objectius europeus proposats en les darreres cimeres del clima (COP25 i COP26). L’OTAN necessita que l’escalfament global no continuï avançant al ritme actual perquè està posant en risc l’operativitat de l’organització. Si alguna cosa preocupa especialment l’OTAN és que el canvi climàtic està obrint noves àrees de competició estratègica. La major accessibilitat als canals comercials a través de l’Àrtic a causa del desglaç està obrint noves rutes i amb elles noves possibilitats de més beneficis per al comerç. La competició per als recursos naturals (petroli, gas i minerals) que els països riberencs estan disputant des de fa temps afecta clarament l’entorn estratègic general de l’Aliança. Països com Dinamarca (Groenlàndia), Estats Units (Alaska), Canadà, Rússia i Noruega es troben en una autèntica disputa territorial. Els cinc països àrtics ja han realitzat accions, fins i tot militars, per reclamar-ne la sobirania territorial i, amb això, tenir accés a aquests recursos. La Xina també ha entrat en el joc, no disputant territoris, sinó fent negocis amb Rússia i amb Groenlàndia, en aquest cas perquè disposa de minerals molt utilitzats a la indústria tecnològica. Finalment, està clar que la invasió russa d’Ucraïna ha posat en relleu la necessitat de buscar fonts d’energia alternatives i fiables i de fer una transició energètica ràpida que deslliuri als països aliats de la dependència de Rússia i la Xina.

Paul Krugman Another Step Toward Climate Apocalypse

Mentre tot el món està patint una onada de calor sense precedents en la història, el Tribunal Suprem dels Estats Units, amb una majoria de senadors republicans, han votat una limitació d’actuació de l’Agència de Protecció del Medi Ambient i de l’agenda mediambiental de Joe Biden. En una primera observació, es podria pensar que el canvi climàtic no juga un paper important en aquesta decisió, sinó que els senadors republicans actuen per partidisme amb l’objectiu de bloquejar les accions de govern dels demòcrates. No obstant això, fou Richard Nixon, expresident republicà, qui creà l’Agència de Protecció del Medi Ambient i fou John McCain, candidat republicà a la presidència, qui l’any 2008 va comprometre’s a imposar un sistema límit per a les emissions d’efecte hivernacle. El posicionament republicà nord-americà xoca amb les polítiques de dretes arreu del món en aquest àmbit. Segons un estudi de fa uns anys, la majoria de partits conservadors donen suport a l’acció climàtica excepte el Partit Republicà dels Estats Units, que el consideren “una anomalia a l’hora de negar el canvi climàtic antropogènic”. Cal esmentar que una possible resposta a aquesta anomalia passa pels diners. En el cicle electoral del 2020, la indústria del petroli i del gas van donar el 84% de les seves contribucions als republicans i la indústria de la mineria del carbó, el 96%. Però, fins a quin punt aquestes indústries donen suport a al Partit Republicà perquè neguen el canvi climàtic i no a l’inrevés? Els republicans també van manifestar posicions anticientífiques davant de la pandèmia de la Covid-19, i això que no obtenien diners a canvi. Sigui com sigui, el Partit Republicà està seguint una política mediambiental similar a la dels governs autoritaris, amb la diferència que els Estats Units és l’únic país amb capacitat de bloquejar accions que podrien prevenir la catàstrofe climàtica. 

Innovación, ciencia y tecnología

David E. Adler Who Managed COVID-19 Best, and Why?

La pandèmia ha estat una crisi sense precedents que ha sacsejat el món. Actualment, depenent al país en que s’estigui pot semblar que s’ha passat pàgina, mentre que altres segueixen aplicant mesures. Així doncs, és interessant analitzar com ha afrontat cada estat la pandèmia i qui ha tingut més bons resultats. Sridhar analitza diferents casos amb retrospectiva i comenta quines mesures han sigut més òptimes en cada moment i com diferents països han actuat. El llibre apunta cap a una direcció on es defensa una implicació dels governs en l’actuació per contrarestar els efectes de les pandèmies. Alhora es comenten certs errors, com la poca preparació i subministrament d’equipament en els hospitals del Regne Unit al principi, el mal timing del sistema de rastreig i testatge o el poc resultat de certes polítiques de confinament total, amb molt males implicacions en el cas del tancament d’escoles. Sridhar també apunta el pes que hi té la ideologia a l’hora d’escollir decisions i com han virat les postures sobre els confinaments i estratègies de COVID zero o per contra, apostar per la immunitat de grup. No obstant això, ella planteja termes mitjans i insisteix en escollir cada decisió analitzant el marc de la situació del virus, que serà el que contribuirà a tenir menys morts i patiment. Sridhar separa entre aquells països que van decidir actuar amb contundència al principi i aquells que van reaccionar després de que se’ls descontrolés i analitza un millor resultat dels primers tant en termes de vides com també d’economia. També apunta que sostenir les decisions adequades a mesura que avançava el temps va suposar un repte, però va ajudar a comprar temps per quan les vacunes estiguessin disponibles. Tanmateix, s’obre una paradoxa en aquest anàlisi, i és que els països que van actuar de manera més planificada, no són els que van desenvolupar la vacuna, sinó que aquests van ser EUA i el Regne Unit, els quals van patir gran quantitat de baixes durant la pandèmia. Adler comenta que una possible resposta a aquest dilema és que van actuar perseguint un resultat en concret i induït per un sistema més enfocat al mercat i no tant en l’estat. Així doncs, sembla que el COVID-19 pot suposar un precedent per a actuar millor en el futur i on sembla que combinar eficiència de mercat i planificació estatal serà vital per aconseguir uns resultats més òptims. 

Tim Harfor How to save more lives and avoid a privacy apocalypse

Actualment, el món de les dades ha de lidiar amb un problema evident: com més detallades siguin les dades anònimes de qualsevol persona, més eficients són per als investigadors. Tanmateix, també són molt més senzilles de desencriptar i de posar-li nom i cognoms. La lluita de la investigació més eficient contra la manca de privadesa. Les dades completes poden emprar-se per a avaluar nous tractaments mèdics, millorar la qualitat de vida o avaluar qui es troba en risc d’efectes secundaris. No obstant això, els responsables de les dades sanitàries es mostren reticents a entregar-les a científics de dades en detriment de la privadesa dels seus pacients. Ben Goldacre, director del Bennett Institute for Applied Data Science de la Universitat d’Oxford, proposa una solució: en lloc d’enviar per correu electrònic milions de registres de pacients a qualsevol persona, els registres haurien d’emmagatzemar-se en un lloc segur. Un equip d’investigació que volgués utilitzar aquestes dades, per exemple, per estudiar la gravetat d’una nova variant de la Covid-19, escriuria el codi analític i el provaria amb dades simulades fins que es demostrés que funciona amb èxit. Quan estigués llest, el codi s’enviaria al magatzem de dades i es retornarien els resultats. Els investigadors mai veurien les dades subjacents. Aquest concepte s’anomena “entorn de recerca de confiança” o TRE (per les seves sigles en anglès), i no és nou. L’Oficina d’Estadística Nacional de Regne Unit té un TRE anomenat Servei d’Investigació Segura. Goldacre i els seus companys han desenvolupat un altre, anomenat OpenSAFELY. Aquest és el moment indicat per utilitzar els TRE, ja que es guanyen la confiança dels pacients, permeten als investigadors analitzar dades sense esperar anys per obtenir permís i fomenten una comunitat de científics de dades. El Servei Nacional de Salut de Regne Unit (NHS) té una col·lecció enorme de registres de pacients. No obstant això, seria capaç de construir plataformes TRE o optaria per lliurar-les a un gegant tecnològic? El que està clar és que aquest nou tipus d’infraestructura de dades pot convertir-se en el futur. 

The Economist Linda Thomas-Greenfield believes the UN Security Council should make better use of Technology

L’ambaixadora dels EUA les Nacions Unides Linda Thomas-Greenfield comença l’article exposant una situació molt crua que va viure a Uganda: una petita nena de 2 anys va morir de malnutrició. Aquest trauma va impactar de manera important la seva carrera on es va dedicar a lluitar contra les causes de la malnutrició; després de tots aquests anys, l’autora assegura que l’ús de noves tecnologies és una solució essencial. Concretament, la nova crisi de fam a l’Àfrica i l’Orient Mitjà per la guerra d’Ucraïna està agreujant la situació. Durant la presidència nord-americana del Consell de Seguretat de l’ONU el mes passat, la tecnologia va agafar un rol central en reduir la fam i el conflicte. El món té noves eines per ajudar les persones amb desnutrició severa a accedir a aliments nutritius. El desenvolupament de noves plataformes digitals poden connectar als agricultors amb les cadenes de subministrant. A més, les imatges per satèl·lit poden millorar les previsions meteorològiques per activitats agrícoles. No obstant això, els obstacles no són pocs: baixa o nul·la connectivitat a les zones rurals, dèficits d’infraestructures, alfabetització, biaixos de gènere estructurals, entre d’altres. Millorar la digitalització implica reduir la fam i el conflicte, les dues principals causes de la misèria humana. El Consell de Seguretat de l’ONU és responsable de mantenir la pau i la seguretat, però també té el deure de lluitar contra la fam que es genera a partir d’un conflicte. No obstant això, anem tard: al segle XXI calen eines del segle XXI. Per això, l’autora presenta tres propostes per incloure les eines digitals al desenvolupament humà. El primer pas és utilitzar tecnologies per detectar i adaptar-se als canvis ambientals creixents que amenacen les activitats agrícoles així com la seguretat dels habitats; a través de facilitar satèl·lits i sistemes de GPS per adaptar-se i anticipar-se als canvis climàtics es pot portar a terme aquesta primera proposta. El segon pas té molt a veure amb la connectivitat i consisteix en emprar la tecnologia per ajudar a les persones afectades per les crisis en curs. Així doncs, és important utilitzar les xarxes socials i les aplicacions de missatgeria per difondre informació però també per monitoritzar i detectar la desnutrició, tal i com aplicacions de companyies tecnològiques estan desenvolupant per a telèfons intel·ligents. El tercer pas i últim consisteix en utilitzar la tecnologia per millorar la seguretat i l’èxit de les missions de manteniment de la pau de l’ONU. Digitalitzar-les evita que els països recaiguin en conflictes i són fonamentals per prevenir la fam relacionada amb la guerra. L’autora esgrimeix que estem en un moment crucial on les tecnologies digitals són cada cop més presents a les nostres vides i on decisions d’avui estan construint els valors que conformaran la realitat del demà. Thomas-Greenfield conclou que mai hem tingut més eines tecnològiques a la nostra disposició per ajudar amb les crisis arreu del món, i toca utilitzar-les.

Gustau Camps-Valls La inteligencia artificial es solo artificial

En la darrera dècada els mètodes automàtics basats en Intel·ligència Artificial (IA) han millorat enormement. L’augment de la capacitat computacional, juntament amb les millores algorísmiques, han donat lloc a una revolució tecnològica. La IA està cada vegada més integrada a les nostres vides i ho estarà cada vegada més. Científics com Geoffrey Hinton, guardonat amb el Premi Turing, s’han atrevit a vaticinar que el Deep Learning, una tècnica matemàtica d’IA, ho resoldrà tot. Però això és així? La IA està resolent molts problemes de predicció, però hi ha molt poca evidència del poder de comprensió i abstracció. És intel·ligent la intel·ligència artificial? En els darrers anys ens hem adonat que la IA, en realitat, no és gaire interpretable, ni explicable, ni respecta les lleis fonamentals de la física, ni sap de causalitat, abstracció, justícia o ètica. Els models basats en aprenentatge profund han estat entrenats per predir amb gran precisió, i actualment tenen tants paràmetres i són tan complexos que les seves decisions sovint són impossibles d’explicar a un humà. A poc a poc, això està canviant. Hi ha moltes iniciatives, tant tècniques com normatives i legislatives, per assegurar una IA fiable que ofereixi prediccions explicables a l’usuari. Aquest camp s’anomena eXplainable AI (XAI). Se centra a analitzar els models desenvolupats per identificar les variables més rellevants en un problema, proporcionar intervals de confiança sobre les seves prediccions i oferir explicacions del que s’ha après. En definitiva, retre comptes. La IA doncs no sols resol problemes, sinó que està canviant la manera com fem ciència i eduquem les futures generacions. La IA actual, si bé és molt útil en molts camps, encara troba dificultats a l’hora de comprendre escenaris, de comunicar-se i explicar les seves decisions a humans, de ser consistents i plausibles, i de distingir entre la correlació i la causalitat. Desenvolupar mètodes que incorporin coneixement a priori, que estudiïn la plausibilitat del que han après i que resolguin preguntes causals seran clau per a una veritable revolució, que clama per una ciència i educació interdisciplinàries.

... Y también recomendamos

Guillaume Lagan Ce sommet de l’OTAN qui aura signé le discret renoncement de l’Europe a son autonomie stratégique

Sumit Ganguly & Nicolas Blarel Modi’s Burning Bridge to the Middle East

Bassem Snaije Lebanon: Financial crisis or national collapse?

Andreas B. Forsby Falling out of Favor: How China Lost the Nordic Countries

Seán Golden Brexit thwarts democracy in Northern Ireland

Gordana Djurovic Montenegro has Wasted a Decade Delaying EU Reforms

Philippa Sigl-Glöckner & Enzo Webber Growing out of inflation: a new supply-side policy

Cobus van Staden Green Energy’s Dirty Secret: Its Hunger for African Resources

Audra J. Wolfe Is Nuclear Power Just Too Dangerous?

Fabrice Epelboin Et si l’intelligence artificielle était totalement surestimée…?

back to top