Diari de les idees 55
24 febrero 2022

Ideas de actualidad

*Actualización de 24/02 – 13.00h*

Al momento de poner en línea esta nueva edición del Diari de les idees, el presidente ruso Vladímir Putin ha decidido iniciar lo que llama una “operación militar especial” y ha dado la orden de atacar Ucrania. A primeras horas de este jueves 24 de febrero de 2022 se han detectado bombardeos y movimientos de tropas rusas en territorio ucraniano.

Una vez iniciado el ataque contra Ucrania, nos encontramos ante tres posibles escenarios de acuerdo con el análisis de Cyrille Bret en Slate: un escenario de tipo “georgiano”, que consistiría en consolidar las posiciones militares rusas en toda el área del Donbass (más allá de las fronteras actuales de las dos repúblicas secesionistas);  uno de máximos con una invasión desde el norte, el este y el sur que volvería a situar Rusia en una posición de fuerza en Eurasia, tanto en su cara a cara con la Unión Europea como en su asociación con China; y finalmente un escenario “azoviano”, en el que Rusia sólo invadiría el territorio que limita con el mar de Azov para establecer una continuidad territorial con la Crimea anexionada en el 2014, cerrar el acceso de Ucrania al Mar Negro y conseguir una partición de facto del país, con la excusa de proteger la población rusófona de la región.

En definitiva, la decisión de Putin se inscribe dentro de la lógica imperial de una Rusia que se siente insegura en sus fronteras y se ha sentido menospreciada desde la desaparición de la Unión Soviética. El presidente ruso, pues, pretende reunificar unos territorios que siempre ha considerado como parte de Rusia o de su esfera de influencia (hay que recordar que la desmembración de la URSS dejó a unos 25 millones de rusos fuera de sus fronteras). Así pues, aparte de Abjasia y Osetia del Sur en Georgia (2008) y Crimea y el Donbass en 2014, en el punto de mira hay Moldavia, donde la región separatista de Transnistria pidió en 2014 su integración en Rusia. Una integración que ya se está dando en Bielorrusia con la fusión del ejército, la política y las finanzas. El presidente Lukashenko resistió la revuelta democrática del 2020 gracias al apoyo de Putin y desde entonces le debe su supervivencia política. La misma dependencia tiene el líder kazako Tokayev, que en enero pasado necesitó de las fuerzas de seguridad rusas para reprimir otro movimiento prodemocrático. Como argumenta Xavier Mas de Xaxàs en La Vanguardia, Putin sabe que no necesita un triunfo claro y definitivo en estos territorios para alcanzar sus objetivos. Georgia y Ucrania, por ejemplo, no entrarán en la OTAN porque la Alianza no les puede garantizar que les devolverá los territorios que Rusia ha segregado. A riesgo de perderlos definitivamente, se mantendrán fuera de la Alianza, y el Kremlin conservará así una ventaja estratégica sobre la OTAN.

Ilustramos este número del Diari de les idees con la obra del escultor ucraniano Vasya Dmytryk intitulada “Land”.



Editorial anterior al ataque contra Ucrania

Coincidiendo con la publicación de este número del Diari de les idees el presidente ruso Vladimir Putin ha puesto fin a la incertidumbre de las últimas semanas y ha firmado un decreto reconociendo la independencia de las repúblicas secesionistas de Donetsk y Luhansk. Paralelamente, el Senado ruso le ha dado la autorización para desplegar fuerzas militares fuera de las fronteras reconocidas internacionalmente. De esta manera quedan obsoletos y sin recorrido los acuerdos de Minsk que pretendían poner fin a una guerra que ha causado más de 13.000 muertos en el Donbass desde 2014 y resolver el conflicto entre los separatistas y el gobierno de Ucrania, aunque estos acuerdos permitían en Rusia ejercer una fuera de influencia Ucrania al otorgar autonomía a las fuerzas separatistas apoyadas por Rusia.

Steve Gutterman apunta en Radio Free Europe algunos de los factores que pueden explicar porque Putin ha decidido tensar todavía más la cuerda. En primer lugar, los acuerdos de Minsk llevaban años atascados ya que Rusia y Ucrania tenían desacuerdos fundamentales sobre aspectos clave del pacto, incluida la secuenciación de los pasos para crear un estado de confianza mutuo, el alcance de la autonomía de las regiones pro-rusas, y de su influencia sobre la política nacional. Y todo indica que Putin ha perdido la esperanza de que el acuerdo llegue a aplicarse en los términos deseados por Moscú. En este sentido, el discurso muy agresivo del 21 de febrero, lleno de referencias históricas sesgadas, de amenazas apenas veladas a Ucrania y de reproches a los Estados Unidos y a la OTAN ya parecía prefigurar la puesta en marcha de una gran campaña militar destinada a derrocar el gobierno en Kiev, en cuyo marco el reconocimiento de las regiones secesionistas sólo sería un primer paso.

Sea como sea, Rusia dispone de una caja de herramientas que va mucho más allá de los tanques, de los aviones de combate, de los misiles y los cuerpos de las fuerzas especiales, e incluye todos los recursos típicos de la llamada “guerra híbrida” para tratar de desestabilizar Ucrania. Así, un informe reciente del Royal United Services Institute, un think tank británico especializado en temas de defensa y seguridad, destaca el incremento de los recursos del FSB que desde julio de 2021 cuenta con 200 miembros en su unidad para Ucrania. Estos agentes rusos se dedican a medir los sentimientos políticos de los ucranianos con el fin de elaborar una especie de mapa psíquico del país que después podrían explotar con campañas propagandísticas ajustadas a cada región o cada bloque electoral. Parte de su trabajo consistiría también en identificar los puntos débiles de las administraciones municipales y los líderes más sospechosos de organizar una hipotética resistencia contra Rusia con el objetivo de eliminarlos. Hay que añadir la intensa propaganda televisiva rusa que a pesar de su prohibición del gobierno ucraniano desde 2014, sigue fácilmente accesible por medio de Internet. O la infiltración de elementos encargados de organizar, a cambio de dinero, protestas violentas y enfrentamientos con la policía, tal como ya había sucedido en las ciudades del Donbass en el 2014. Eso por no hablar de las sospechosas falsas alarmas de bomba que sacudieron Ucrania en enero y que se han reproducido con más énfasis estos últimos días. Además, el teatro prebélico de las últimas semanas, con la movilización de tropas rusas, por un lado, y las sucesivas alarmas de invasión que llegan desde el otro lado ya ha dejado su huella a la economía ucraniana. En enero, la divisa nacional, la grivna, perdió más en un 10%, los bonos nacionales se encarecieron y las inversiones se redujeron en numerosos sectores.

En medio de estas tensiones destaca la declaración conjunta de los gobiernos de Rusia y China hecha pública a principios de febrero, en la que manifiestan que los socios de la OTAN tratan de obtener ventajas militares unilaterales, y se oponen a una ampliación de la Alianza. También piden a la OTAN que abandone sus enfoques de la Guerra Fría y que respete la soberanía, la seguridad y los intereses de otros países. A la vez, Rusia y China reafirman su apoyo mutuo y se oponen a los intentos de fuerzas externas de socavar la seguridad y la estabilidad en su vecindad. Ambos países también manifiestan la intención de oponerse a la injerencia de terceros en los asuntos internos de países soberanos. Aunque la declaración no menciona directamente Ucrania, China da apoyo a las propuestas presentadas por Rusia para garantizar la seguridad en Europa a largo plazo. Las partes piden a los Estados Unidos que abandonen sus planes de desplegar misiles terrestres de alcance medio y corto en la región Asia-Pacífico y en Europa. Por su parte, Rusia reafirma su apoyo al principio de una sola China y se opone a cualquier forma de independencia de Taiwán. También expresa su preocupación por la política de los EE.UU. en la región del Indo-Pacífico. La declaración denuncia la formación de bloques de seguridad en la región y critica el pacto de seguridad AUKUS entre los EE.UU., el Reino Unido y Australia. Asimismo, esta crisis también plantea un dilema diplomático para China y supone al mismo tiempo una oportunidad para Pekín, ya que probablemente la administración de Joe Biden continuará distraída por Rusia antes de las elecciones norteamericanas de medio mandato que se celebrarán a finales de este año. Desde las páginas de The GuardianVincent Ni apunta que, durante estas últimas semanas, los analistas chinos han debatido cuál tenía que ser la opción política del país. Si bien los partidarios de la línea dura defienden una política exterior pro-rusa, otros piensan que Pekín tendría que aprovechar esta crisis para mejorar sus relaciones con Washington desde una posición de fuerza en tanto que principal aliado de Moscú. Así, China ve algunos paralelismos entre la expansión de la OTAN hacia el este y la presencia norteamericana en el mar de China Meridional.

En este contexto, La Vanguardia dedica un extenso dosier a las repercusiones de la crisis actual sobre el futuro de la Alianza Atlántica, donde Olivier Kempf, general de brigada en la reserva que sirvió a la OTAN, reflexiona sobre el futuro de una Alianza que reunió las dos orillas del Atlántico en un contexto bipolar con características estratégicas determinadas. Afirma que actualmente se ha olvidado hasta qué punto la Alianza experimentó crisis, a veces muy agudas, y al final las superó. Si, por una parte, este ejercicio de memoria puede llevar a relativizar la crisis actual de la Alianza, por otra, también puede ser fuente de inquietud, porque la crisis actual es más soterrada. En efecto, en crisis anteriores, los problemas dieron lugar a numerosos debates públicos mientras que hoy día, estos debates se realizan en sordina y sólo interesan a los especialistas. En muchas capitales, los dirigentes políticos y militares asisten a las reuniones por rutina, pero sin interés real, y muchos tienen la atención puesta en otras regiones: Washington mira al Pacífico, París al Mediterráneo y África, Ankara al Cáucaso o Siria, mientras que Londres sigue debatiéndose con las consecuencias del Brexit. Mientras tanto, algunos de los nuevos miembros persisten en considerar Rusia como una amenaza existencial, lo que no molesta a Moscú, sino que le halaga ser temida como en los viejos tiempos de la Guerra Fría. 

Otro aspecto destacado en el ámbito internacional son las relaciones entre la Unión Europea y el continente africano. Con motivo de la cumbre entre la Unión Africana y la Unión Europea de los días 17 y 18 de febrero, Achille Mbembe propone en un artículo publicado en Le Grand Continent alejarse de una visión apolítica del desarrollo en un momento en que la mayoría de las potencias están construyendo nuevos estrategias globales con África y afirma que la democracia se formula cada vez más en términos de una redistribución más justa posible de los medios de existencia, en la perspectiva de la sostenibilidad ecológica y social del continente. Con respecto a las relaciones con Europa, denuncia que ya sea en relaciones bilaterales o con la Unión Europea, no existe una cooperación sistémica con los gobiernos africanos en materia de reformas políticas destinadas a garantizar una gobernanza inclusiva y democrática. También considera que además de ser una cuestión de valores, el apoyo a la democracia responde a los intereses políticos y de seguridad de Europa a largo plazo. Concluye que al proceder como si los problemas del desarrollo socioeconómico se debieran en última instancia a una falta de capacidades financieras, técnicas y administrativas y no fueran causados por estructuras de poder y vulnerabilidad, se ha privado África de tener una mirada propiamente geopolítica. 

Con el fin de ampliar la información sobre los retos de futuro del continente africano y también respecto de sus relaciones con la Unión Europea, os remitimos al número monográfico de la revista IDEES África, epicentro de una realidad cambiante, así como a la jornada Towards Shared Prosperity: the Future of Europe-Africa Relations, coorganizada por el Departamento de Acción Exterior y Gobierno Abierto, la Delegación del Gobierno de la Generalitat ante la Unión Europea, el Centro de Estudios de Temas Contemporáneos y ACCIÓN, y que tuvo lugar en la sede de la Delegación del Gobierno ante la Unión Europea el pasado 16 de febrero. 

Continuando con Europa, otro de los escenarios que en los próximos meses supondrá un peligro de inestabilidad son los Balcanes que, como ha hemos mencionado en el número anterior del Diari de les idees, forman parte del conjunto de amenazas que pesan sobre la frontera oriental de la UE. Así pues, La Vanguardia presta atención al avance del plan secesionista del nacionalismo serbobosnio, que pretende separar la República Srpska del resto de Bosnia-Herzegovina. El Parlamento de esta entidad autónoma de mayoría serbia ha aprobado una ley anticonstitucional para crear un sistema de justicia propio, con un órgano de gobierno para nombrar jueces y fiscales. La oposición parlamentaria serbobosnia acusa Milorad Dodik, líder ultranacionalista serbobosnio y al mismo tiempo uno de los tres presidentes de Bosnia-Herzegovina de poner en peligro la paz y de impulsar su proyecto separatista simplemente para atraerse votos de cara a las elecciones generales del mes de octubre. Sin embargo, la celebración de estos comicios depende de una reforma electoral que todavía no ha obtenido el acuerdo de los diferentes líderes políticos bosnios. Asimismo, The Economist afirma que el país se enfrenta a su peor crisis desde que los Acuerdos de Dayton de 1995 pusieron fin a la guerra, con la creación de dos entidades autónomas y un gobierno nacional reducido. El plan secesionista empezó el pasado julio, después de que el Alto Representante que supervisa los acuerdos de paz decretara una ley que ilegalizaba negar el genocidio de Srebrenica. La atención también se centra en lo que está pasando en Ucrania, ya que, si finalmente estalla la guerra, Dodik podría aprovechar la ocasión para ntensificar su agenda separatista con la complicidad de Moscú. 

En el ámbito político español destaca el grave cisma interno al que se enfrenta el Partido Popular como consecuencia del fuego cruzado de acusaciones entre la dirección del partido y la presidenta de la Comunidad de Madrid, tensiones que han empeorado tras las elecciones en Castilla y León, poco satisfactorias para Pablo Casado. Un cisma que ya ha provocado la dimisión del presidente del Partido Popular y la convocatoria de un congreso extraordinario para el mes de marzo. La crisis del PP está directamente conectada con el error de diagnóstico sobre Castilla y León que ha comportado una pírrica victoria de los populares y un incremento espectacular de votos para los ultraderechistas de Vox.  La inestabilidad sin precedentes en el principal partido de la oposición coincide con un momento de profunda fatiga en el que los precios suben, la inflación se puede volver estructural y crece la percepción de un mundo más hostil e impredecible, reflejado en la crisis de Ucrania. 

Todo eso en un contexto donde la democracia ha continuado a debilitarse durante 2021 según los datos publicados por el Democracy Index, una encuesta anual que valora al estado de la democracia en 167 países sobre la base de cinco variables: procesos electorales y pluralismo político, funcionamiento del gobierno, participación política, cultura política democrática y libertades civiles. Según el estudio correspondiente al año pasado, España retrocedió al nivel de democracia defectuosa, retrocediendo en todas las variables contempladas. El estudio también advierte que más de un tercio de la población mundial vive bajo un gobierno autoritario mientras que sólo el 6,4% disfruta de una democracia llena. La puntuación global ha bajado de 5,37 para el año 2020 a un nuevo mínimo de 5,28. La única caída equivalente desde el 2006 fue en 2010 después de la crisis financiera mundial. Por segundo año consecutivo, la pandemia ha sido la principal fuente de tensión para la democracia en todo el mundo: confinamientos y restricciones a la movilidad, suspensión de algunas libertades civiles tanto en las democracias desarrolladas como en los regímenes autoritarios, etc. Por otra parte, las divisiones se están consolidando entre los que favorecen las políticas de precaución como los confinamientos y las vacunas y los que son hostiles a la interferencia del Estado y cualquier reducción de las libertades personales. Los países nórdicos siguen dominando la parte superior del ranking y tres países asiáticos quedan en las últimas posiciones: por primera vez Corea del Norte ha sido desalojada del último lugar por el golpe de estado en Myanmar y el retorno de los talibanes en Afganistán. Pero es en América Latina donde se registra el descenso más pronunciado. La debilidad de la democracia en la región ha permitido que los populistas iliberales prosperaran y por otra parte, un calendario electoral apretado no siempre ha hecho avanzar la causa de la democracia. Norteamérica no está mucho mejor, aunque a pesar de los disturbios en el Capitolio y los intentos del presidente saliente Donald Trump de revocar los resultados de las elecciones, la toma de posesión de Joe Biden transcurrió sin problemas. Finalmente, el informe identifica una serie de amenazas para la democracia en 2022 y más allá, y advierte que el principal reto para el modelo occidental de democracia durante los próximos años vendrá de China. 

En la misma línea, la editorial del diario Le Monde remacha el clavo y alerta de que la democracia representativa interesa cada vez menos a los jóvenes, que incluso parece que le van dando la espalda. Esta decepción no es nueva. Se tiene que vincular a la crisis de las organizaciones políticas, a la decadencia de las ideologías, a la dificultad de los gobernantes para cumplir sus promesas. Esta crisis de confianza alimenta la abstención en una categoría que ya vota poco. Peor todavía, lleva a la desafección respecto de la democracia. A se añade una especie de legitimación de la violencia política: según una encuesta publicada a principios de febrero por el Institut Montaigne, casi uno de cada dos jóvenes considera comprensibles las agresiones a cargos electos y uno de cada cinco considera aceptable degradar un espacio o un edificio público. Esta crisis de la democracia representativa es grave. 

En el ámbito de la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático, George Monbiot denuncia desde The Guardian cómo las grandes empresas están llevando a cabo una clara estrategia de greenwashing apropiándose de los bosques del planeta. Para evitar que el calentamiento global supere los 1,5 °C, no sólo hay que descarbonizar nuestras economías, también es necesario impulsar soluciones basadas en la naturaleza que, mediante la restauración de los ecosistemas, posibiliten extraer parte del dióxido de carbono presente en la atmósfera. Sin embargo, con eso no es suficiente para que las empresas más contaminantes compensen sus emisiones de gases de efecto invernadero. Las empresas petroleras siguen extrayendo recursos fósiles mientras afirman haber alcanzado la neutralidad climática aportando dinero para proteger bosques o plantar nuevos. En este sentido, Monbiot señala que este uso de las soluciones basadas en la naturaleza está ayudando a acelerar el colapso ambiental, en vez de evitarlo. Hay que tener en cuenta que no hay bastante superficie a la Tierra para absorber las emisiones generadas por las empresas. Por eso, la presión de compra de espacios verdes por parte de las grandes empresas está provocando que los precios del suelo aumenten y que la población local no pueda llevar a cabo sus propios proyectos de reforestación.

En Foreign AffairsJason Bordoff & Meghan L. O’Sullivan analizan la cuestión climática desde el punto de vista de la geopolítica y apuntan que los defensores de la energía limpia esperan que, además de mitigar el cambio climático, la transición energética ayude a hacer que las tensiones sobre los recursos energéticos sean cosa del pasado. No obstante, si bien es cierto que la energía limpia transformará la geopolítica, consideran que el proceso será desordenado en el mejor de los casos. Y lejos de fomentar la ayuda mutua y la cooperación, probablemente producirá nuevas formas de competencia y confrontación. La energía limpia representará una nueva fuente de poder que conllevará nuevos riesgos e incertidumbres. Es necesario por lo tanto animar a los responsables políticos a mirar más allá de los retos del cambio climático en sí mismo y a evaluar los riesgos y peligros derivados de la transición energética. El abandono del petróleo y del gas reconfigurará el mundo de manera espectacular pero los debates sobre el futuro de la energía limpia a menudo obvian aspectos importantes como por ejemplo el tiempo que puede requerir esta transición. Además, para entender la geopolítica de un mundo que se va alejando progresivamente de los combustibles fósiles, es fundamental entender como la aparición de superpotencias de energía limpia producirá cambios en las influencias geopolíticas. A largo plazo, la innovación determinará quién ganará la revolución de la energía limpia. Los países con estos atributos asentarán su hegemonía sobre cuatro pilares. En primer lugar, tendrán el poder para establecer estándares para la energía limpia que será más sutil que el poder geopolítico derivado de los recursos petroleros. Segundo, el control sobre la cadena de suministro de minerales como el cobalto, el cobre, el litio, el níquel y las tierras raras, que son fundamentales para varias tecnologías de energía neta, incluidas las eólicas y los vehículos eléctricos. Tercero, la capacidad de fabricar componentes baratos para nuevas tecnologías. Y finalmente, un país podrá convertirse en una superpotencia de energía limpia mediante la producción y la exportación de combustibles bajos en carbono.

Finalmente, en materia de innovación tecnológica, después del éxito de la utilización del ARN mensajero en las vacunas contra el coronavirus, Ashleigh Furlong reseña en Politico que Moderna y BioNTech vuelven al terreno del cáncer con el objetivo de desarrollar una vacuna que prevenga la recaída de los pacientes. En efecto, el éxito de las vacunas contra la COVID ha comportado que gobiernos y reguladores se sientan cómodos con la tecnología y que los inversores se apresuren para dar apoyo al potencial del ARNm. La investigación actual, sin embargo, se centra más en el tratamiento del cáncer que en su prevención, ya que no se puede predecir la mutación que desencadenará una división celular incontrolable. Los expertos también advierten de un exceso de optimismo ante la aplicación del ARNm al cáncer, ya que estas vacunas tendrán que hacer frente a la complejidad de las inmunoterapias. En cualquier caso, si los investigadores pueden superar las dificultades y crear vacunas viables y efectivas, habrá que garantizar un acceso equitativo. Las vacunas serán caras y se tendrá que demostrar que los sistemas de salud se encuentran mejor equipados con esta herramienta que con alternativas más baratas.

No obstante, Bruno Canard alerta desde las páginas de Le Monde Diplomatique de los peligros que representaría una experimentación genómica desregularizada. En efecto, la edición del genoma y las nuevas técnicas genéticas plantean cuestiones éticas y de bioseguridad que requieren más que nunca un debate ciudadano y una regulación internacional. Por consiguiente, tanto la comunidad científica como la sociedad civil tienen que valorar todos los aspectos con el fin de definir con más rigor qué debe hacer y qué no debe hacer la ciencia. La historia reciente nos muestra que la autorregulación de la disciplina sigue siendo muy insuficiente. Varios sectores de investigación han eludido e incluso violado las moratorias anteriores. Las motivaciones alegadas son conocer mejor los virus con el fin de anticipar o prevenir la aparición de patógenos humanos. Pero estas experiencias forman parte de un contexto en que hay que publicar mucho para cumplir con los criterios de un sistema extremadamente competitivo y para obtener financiación. Pueden surgir, por consiguiente, conflictos de intereses importantes que requieran un arbitraje imparcial. El autor propone la creación de una conferencia internacional inspirada en las recientes conferencias climáticas, que incluyen científicos, líderes políticos y representantes de la sociedad civil, lo cual podría permitir negociar el establecimiento de una normativa internacional adecuada. El desarrollo de las opciones científicas requiere un marco democrático y el acceso de los ciudadanos a la cultura científica. Sólo una ampliación de la participación en las deliberaciones sobre cuestiones de ética en ciencia y tecnología puede garantizar que este tipo de conferencia conduzca a una regulación duradera y eficaz. 

Han colaborado en este número 55 del Diari de les idees Enric Brugués, Eva Lam, Raül Gil y Marian Moyà, estudiantes en prácticas en el CETC.

more/less text

Política internacional y globalización

Joint Statement of the Russian Federation and the People’s Republic of China

En aquesta declaració dels governs de Rússia i Xina, Joint Statement of the Russian Federation and the People’s Republic of China on the International Relations Entering a New Era and the Global Sustainable Development, les parts consideren que els socis de l’OTAN tracten d’obtenir avantatges militars unilaterals i s’oposen a una ampliació de l’Aliança. També demanen a l’OTAN que abandoni els seus enfocaments de la Guerra Freda i que respecti la sobirania, la seguretat i els interessos d’altres països. Rússia i la Xina reafirmen el seu suport mutu i s’oposen als intents de forces externes de soscavar la seguretat i l’estabilitat al seu veïnatge. Ambdós països també manifesten la intenció d’oposar-se a la ingerència de tercers en els afers interns de països sobirans i a les revolucions de colors. La declaració no esmenta directament Ucraïna, però la Xina dóna suport a les propostes presentades per Rússia per garantir la seguretat a Europa en el llarg termini. Les parts demanen als Estats Units que abandonin els seus plans de desplegar míssils terrestres d’abast mitjà i curt a la regió Àsia-Pacífic i a Europa. Per la seva banda, Rússia reafirma el seu suport al principi d’una sola Xina i s’oposa a qualsevol forma d’independència de Taiwan. També expressa la seva preocupació per la política dels EUA a la regió de l’Indo-Pacífic. La declaració denuncia la formació de blocs de seguretat a la regió i critica el pacte de seguretat AUKUS entre els EUA, el Regne Unit i Austràlia. La declaració també dedica una secció sencera a la comprensió compartida de la “democràcia” on s’afirma que la defensa de la democràcia i els drets humans no s’ha de fer servir per pressionar altres països.

Fred Kaplan La crise ukrainienne ne se passe pas comme Poutine l'avait prévu

El president rus volia dividir els estats membres de l’OTAN però ha acabat passant tot el contrari. En efecte, al parer de Kaplan l’amenaça que pesa sobre Ucraïna ha unit els països europeus al voltant d’una causa comuna, ha revifat la missió original de l’OTAN per dissuadir i limitar l’expansionisme rus i, per tant, ha reforçat els llaços entre els aliats europeus i els Estats Units (principal garant de la seva seguretat) com mai des del final de la guerra freda. Putin tenia motius per creure que les coses anirien d’una altra manera. Veient com Joe Biden elogiava el Quad -la nova aliança dels Estats Units, Japó, Índia i Austràlia, destinada a unir aliats a Àsia i al Pacífic contra l’ascens de la Xina- va considerar que l’OTAN havia perdut la seva importància. També havia vist com els Estats Units es retiraven de l’Afganistan enmig de la més completa incompetència. Al mateix temps, el Regne Unit es trobava aïllat arran del Brexit, Angela Merkel es retirava com a cancellera, deixant el país més gran i ric de l’OTAN en un moment de vacil·lació, mentre que, per la seva banda, Emmanuel Macron buscava aprofitar la seva vacant com a líder de l’Europa continental amb voluntat d’autonomia estratègica en relació amb Washington. Però les coses no han sortit com esperava. Les maniobres de Putin han estat massa matusseres i Biden i els seus diplomàtics, que fins llavors s’havien mostrat maldestres en altres àmbits, de sobte es van tornar supercompetents. Biden se sent molt còmode amb els afers transatlàntic ja que l’OTAN va ser la peça central de la política exterior dels EUA durant les dècades en les que va formar part del Comitè d’Afers Exteriors del Senat dels EUA, així com quan va ser vicepresident. Kaplan conclou que Biden i l’OTAN haurien d’aprofitar l’oportunitat per continuar mostrant la seva unió i alleujar la pressió, i incitar Putin perquè rebaixi les seves intencions permetent-li trobar una solució diplomàtica.

Rafael Poch Las realidades debajo del griterío

Els països occidentals han protagonitzat nombroses reunions a Moscou i a Washington per tal d’establir la seva estratègia pel que fa a la situació amb Rússia i Ucraïna i la resposta dels EUA es resumeix en la negativa a deixar Ucraïna i Geòrgia fora de la OTAN i a aturar la seva ampliació cap a l’Est. Tot i que Rússia repeteix que no envairà Ucraïna i el Consell de Seguretat d’Ucraïna confirma que no hi ha motius ni condicions per una guerra, aquest ambient de por ja ha afectat negativament l’economia d’Ucraïna. Si d’una banda els Estats Units i Polònia, entre d’altres, continuen posant llenya al foc, França i Alemanya, de l’altra, intenten calmar la situació mentre que altres països segueixen les directrius de la OTAN. L’opció que sembla que triarà Washington és simple: contenir Rússia, sempre que això no provoqui un desviament en la seva estratègia principal que és el seu enfrontament amb la Xina. En tant que l’aliança Rússia-Xina és una de les majors preocupacions dels EUA, reduir les tensions amb Rússia per separar-la de Xina és primordial. Això no obstant, l’escenari no és el més favorable per als nord-americans, ja que Xina dóna suport a “les garanties de seguretat vinculants a Europa” i també ha mostrat el seu desacord amb qualsevol ampliació de l’OTAN. Tot això explica la pressió que està exercint Europa sobre el president d’Ucraïna per acceptar els acords de Minsk que contemplen l’alto el foc i la retirada d’armes a les regions separatistes, estatut d’autonomia i eleccions, i amnistia general, entre d’altres.

Helen Thompson Ukraine’s imagined European identity is irreconcilable with the political reality

Encara que de moment no s’hagi produït cap invasió, Ucraïna es troba en un estat de por existencial permanent, atrapada entre la voluntat de pertànyer a Europa i la realitat amenaçant del poder rus. Si per a molts ucraïnesos el seu país pertany a l’esfera política europea, Putin en canvi reivindica una unitat que s’origina a la Rus de Kíev, un estat confederal dels segles IX i XIII que cobreix parts de l’actual Ucraïna, Bielorússia i l’oest de Rússia. D’altra banda, la majoria dels ucraïnesos conceben la seva identitat com una barreja d’influències culturals, religioses i lingüístiques tant de l’est com del sud d’Europa. A més, ha estat en nom del dret d’Ucraïna a formar part d’Europa que s’han produït les dues revolucions ucraïneses contra la influència russa. No obstant això, aquesta retòrica de la unitat paneuropea de la postguerra freda sempre ha disfressat realitats incòmodes. La UE no pot proporcionar seguretat als membres de l’est que limiten amb Rússia, per la qual cosa ha de confiar en l’OTAN, que és dominada per una potència no europea.

Yuval Noah Harari What’s at stake in Ukraine is the direction of human history

Yuvah Noah Harari ho té molt clar: el que passi a Ucraïna marcarà la historia de la humanitat en tant que considera que al cor de la crisi d’Ucraïna hi ha una pregunta molt important: és possible el canvi? En aquest debat dues escoles de pensament oposades opinen de manera diferent. Per una banda, la primera escola opina que no, que el canvi no és possible. Defensen que la naturalesa de la humanitat és molt bàsica: els forts s’aprofiten dels dèbils i l’única cosa que pot evitar una guerra és el poder militar dels dos països. D’altra banda, la segona escola defensa que el comportament humà sí que pot canviar. Les guerres no depenen del tarannà humà, sinó de factors econòmics, socials i polítics. La prova d’això la podem veure en els últims anys, ja que la Segona Guerra Mundial destaca com un fet important i en les darreres set dècades no hi ha hagut una guerra entre superpotències. A més, l’economia global també ha canviat, ara es basa en el coneixement i no en els béns materials. Per primer cop en la història, després de períodes on la guerra va ser la principal protagonista, aquesta s’ha convertit en un factor negatiu i evitable i les superpotències basen el seu poder en canvis interns i en aconseguir el benestar de la seva població. A més, el concepte de pau ha agafat sentit per si mateix, quan abans només significava “absència de guerra”. Aquest canvi social es reflecteix de manera molt clara en el pressupost que dediquen els governs als seus exèrcits, en contraposició al que gasten en educació o salut. Ho podríem resumir com el millor triomf polític i moral de la humanitat. És per tot això que Harari afirma que la situació d’Ucraïna ens hauria de preocupar a tots. Tornar als escenaris de fa dècades, suposaria fer passes enrere en tots els àmbits: social, polític, econòmic i moral.

David M. Herszenhorn In Ukraine, even peace accords can be a Russian weapon

Els acords de Minsk, negociats als 2014-15 per acabar amb la guerra entre Ucraïna i els separatistes prorussos, se situen al centre dels esforços diplomàtics per dissuadir Rússia d’un atac. El problema és que cada bàndol els interpreta de manera contradictòria: Rússia afirma que els acords garanteixen autonomia a Donetsk i Luhansk, amb poder de veto sobre la decisió d’incorporar-se a l’OTAN o a la UE. En canvi, des d’Ucraïna se sosté que els acords només garanteixen un cert grau d’autogovern, no el control sobre qüestions d’àmbit nacional. Putin ha demanat els estats occidentals que forcin Ucraïna a complir amb els acords, permetent la reforma constitucional, eleccions locals i amnistia. Les autoritats ucraïneses temen que aplicar els acords de Minsk com demana Putin deixi el país sota el seu control. També temen que el desplegament de tropes russes a la frontera serveixi per forçar Occident a acceptar uns acords que els ucraïnesos consideren imposats per Rússia amb amenaces de guerra a l’est. Un dels problemes afegits dels acords és que cap personatge d’alt rang els va signar, i alguns del que si ho van fer ja no ocupen els mateixos càrrecs, com per exemple els dirigents de les regions prorusses rebels.

Tom McTague Vladimir Putin Is a Product of Modernity

Malgrat la tendència actual a concebre allò que no s’ajusta a les nostres idees com un vestigi del passat, Tom McTague argumenta a The Atlantic que Vladimir Putin és un producte de la modernitat. Sembla raonable suposar que el segle XXI es caracteritzarà molt més per una lluita geopolítica darwiniana, que per una globalització harmònica basada en regles preestablertes. En aquest sentit, l’ordre mundial nord-americà es presenta com un model més arcaic que, per exemple, l’estat de vigilància xinès extremadament modern. Així mateix, pensem que Putin és anacrònic només perquè creiem que ens hem traslladat a una mena de món postnacional i racional que va més enllà de la política basada exclusivament en l’interès nacional. Tanmateix, les nacions i les seves idees segueixen important i Putin, com tothom, utilitza la història per als seus propis propòsits. En amenaçar Ucraïna i l’ordre de seguretat europeu, Putin evoca els esperits del passat al seu servei mentre sembla comprendre les lògiques del poder geopolític. I, de fet, no pot haver un conflicte més modern que aquesta batalla entre poder i imaginació. Putin, per tant, és un home contemporani que, en un context de declivi nord-americà, utilitza mètodes moderns per enterrar el vell món i no per recrear-lo.

Olivier Kempf ¿Existirá la OTAN en el 2030? La amenaza llega desde su interior

Olivier Kempf, general de brigada a la reserva que va servir a l’OTAN, reflexiona sobre el futur d’una Aliança que va reunir les dues ribes de l’Atlàntic en un context bipolar amb característiques estratègiques evidents. Actualment s’ha oblidat fins a quin punt l’Aliança va experimentar crisis, de vegades molt agudes, i al final les va superar. Aquesta memòria històrica podria portar l’observador a relativitzar la crisi actual de l’Aliança. Per contra, hauria de conduir a inquietar-ho, perquè la crisi actual és latent. En el passat, els problemes van donar lloc a nombrosos debats públics. Avui dia, aquests debats es realitzen en sordina i només interessen els especialistes. A moltes capitals, l’Aliança està descurada. Els dirigents polítics i militars assisteixen a les reunions per costum, però sense interès real. Molts tenen la seva atenció posada en altres regions: Washington mira el Pacífic, París al Mediterrani i l’Àfrica, Ankara al Caucas o Síria, mentre que Londres continua debatent-se amb les conseqüències del Brexit. Alguns dels nous membres persisteixen a considerar Rússia com una amenaça existencial, cosa que no molesta Moscou, que se sent afalagat de ser vista com en els vells temps de la Guerra Freda. Kempf considera que, bàsicament, l’Aliança és un sistema occidental creat al segle XX i que no sembla adequat per a les noves condicions estratègiques del segle XXI. No obstant això, apunta que cal que conservem aquesta herència pensant que alguna utilitat haurà de tenir. Ara bé, aquest interès relatiu concedit a l’Aliança accelera la seva obsolescència. Com que no es toca la seva estructira, es va degradant cada vegada més fins al punt de quedar completament obsoleta. La manca d’innovació en els cercles aliats, el conservadorisme latent que impera a les ments, la incapacitat de respondre a les nombroses qüestions estratègiques que enumera al llarg de l’article són altres riscos importants per a l’organització. L’Aliança continuarà existint el 2030, però probablement serà menys rellevant. Kempf recela que el proper Concepte Estratègic sigui més un remei de circumstància que el remei necessari per revitalitzar l’Aliança.

The Economist The African Union os less effective at 20 than it was at two

L’article destaca que els principals punts de l’agenda de la Unió Africana (UA) per a 2022 són la resolució de les guerres del continent, l’increment dels intercanvis comercials interns i també exteriors, i l’assumpció d’una sola veu africana en els afers globals. Així mateix, a diferència de la seva predecessora, la molt desacreditada Organització per a la Unitat Africana (OUA), que es va negar a interferir en els assumptes dels membres, la UA té el poder d’intervenir, sense l’aprovació prèvia del estats implicats, per aturar guerres i conflictes. En altres aspectes, però, la UA ha arribat a assemblar-se a la seva predecessora, ja que massa sovint les decisions que es prenen durant les cimeres després no s’apliquen de manera efectiva o només parcialment. D’altra banda, el Consell de pau i seguretat de la UA, un panel de 15 membres inspirat en el Consell de Seguretat de l’ONU, ha perdut part de la seva energia inicial. Finalment, el somni de la Comissió de la UA de convertir-se en un organisme amb un poder executiu similar al de la Comissió Europea també s’ha esvaït, ja que no disposa de poders significatius per fer complir els tractats o crear regulacions.

Le Monde L’organisation Etat islamique, une hydre encore menaçante

L’editorial del diari Le Monde adverteix que l’èxit de l’operació de les forces especials nord-americanes que va provocar fa poques setmanes la mort del líder de l’Estat Islàmic no ha d’amagar el fet que l’organització ha sabut transformar-se per lliurar avui una guerra de guerrilles descentralitzada en moltes regions del món i i guanyar nous territoris des d’Àsia fins a Àfrica. A l’Afganistan, on la seva filial, l’Estat Islàmic a Khorassan, encarna una línia radical contra el poder dels talibans. A l’Àfrica especialment, on els grups armats radicals es reuneixen sota la bandera negra, font de notorietat i reclutament. Durant el “mandat” d’Abou Ibrahim Al-Hachimi Al-Qourachi, hem vist com l’Estat Islàmic s’ha estès pertot el Sahel, en particular a Burkina Faso i Mali, però també a la República Democràtica del Congo i Moçambic. Allà on persisteixen els conflictes i on l’estat és absent o sinònim d’injustícia i violència, l’amenaça existeix. A la mateixa Europa, els terroristes actuen regularment sense que els calgui professar lleialtat a l’Estat Islàmic o als seus líders, atacant objectius mal protegits però simbòlics amb mitjans de vegades rudimentaris. No necessiten ser entrenats ni tan sols adoctrinats. Integren els modes d’actuació i els objectius de l’organització, sense ni tan sols haver-ne estat membres: provocar represàlies, fer esclatar la societat, impulsar la guerra civil, obligar els musulmans a escollir el seu bàndol.

Le Grand Continent Transition et transformation au Chili, une conversation avec la nouvelle ministre Maisa Rojas

Amb motiu de l’elecció del nou president xilè Gabriel Boric, la revista Le Gran Continent entrevista Maisa Rojas, futura ministra i autora de l’últim informe del Panel Intergovernamental sobre el Canvi Climàtic (IPCC) per parlar del seu paper com a cap d’un ministeri clau per impulsar el canvi cap a un govern verd. Rojas considera que l’important és pensar que som un sistema social i ecològic, i que les decisions s’han de prendre a nivell territorial. Dins d’aquest context considera que la confiança en les institucions juga un paper bàsic que cal tenir en compte, especialment en un context d’institucionalisme feble com el d’Amèrica Llatina. Es tracta, doncs, d’un repte al qual s’enfronten tots els estats: el de beneficiar-se d’un bon govern. Rojas assenyala que aquest és un indicador força important de diferència entre països del Sud i del Nord, on les institucions solen ser més fortes, més reconegudes i més fiables. Això s’aplica no només als problemes ambientals, sinó a tot tipus de problemes. L’altre element fa referència a la manera com es fa el seguiment de les polítiques dutes a terme. Es pot elaborar una llei, decretar una mesura. No obstant això, llavors s’ha de controlar i veure si el que es decreta realment passa. Tots aquests reptes són molt transversals, però també estan al centre de l’Acord de París, que té aquest marc de transparència millorat. Els països han d’informar, supervisar i verificar el progrés concret tant en la mitigació com en l’adaptació als efectes del canvi climàtic.

Catalunya, España, Europa

Joan Anton Resina L’aliat a la guerra que no tindrà lloc

En la seva anàlisi de les repercussions per a Catalunya de la crisi actual entre Rússia i Ucraïna, Resina destaca que si bé els Estats Units no són omnipotents, encara retenen un paper geopolític determinant. Prou per a ser un factor molt important en l’eventual arbitració del conflicte entre Catalunya i Espanya. Si ja és prou difícil que Catalunya desplegui prou voluntat no pas per a assolir sinó fins i tot per a voler la independència, això és simplement impossible sense el concurs dels països que decidiran la forma del mapa polític al final d’aquest segle. Aquests països no es persuadiran de la utilitat i fiabilitat d’un estat català a l’àmbit internacional per més que els catalans omplin el món d’ONG, s’ofereixin a rebre més refugiats que ningú, organitzin els Love Parades més agosarats del planeta i reparteixin premis Catalunya amb primmirada correcció política a persones ja consagrades. Resina alerta de que Catalunya s’encanta ella mateixa amb el forçat somriure de la impotència. Com un adolescent ple d’ideals, s’adhereix a tot de causes simbòliques per evitar de comprometre’s amb una decisió arriscada i irrecuperable. Però la vida imposa a cada pas la necessitat de decidir inexorablement i ho fa abans de dictaminar sobre la bondat o maldat de la decisió d’acord amb el resultat. La història és igualment imprevisible i sol burlar-se dels càlculs probabilistes. Puix que els catalans han estat perdedors històrics, assimilen espontàniament les formes i els valors de la derrota, que és una altra manera d’evitar el risc. Per això solen acabar derrotats abans de plantar cara i tot. Dues vegades que he parlat amb responsables polítics de l’independentisme, dels que han passat per la presó, els he demanat explícitament si ja havien consultat l’estratègia amb els representants dels Estats Units. Ambdues vegades vaig rebre’n resposta positiva sense obtenir-ne, però, cap detall. I ambdues vegades vaig advertir-los que era imperatiu oferir algun avantatge geopolític d’una hipotètica república catalana que no entrés ja en el tractat de cooperació signat pel govern espanyol. No sé si aital avantatge existeix o és possible de crear-lo, però calia aprofundir la disponibilitat catalana bastint un pont d’interessos transatlàntics que enfortís la posició americana a la Mediterrània i enviés un senyal inequívoc de compromís defensiu a la Unió Europea. Catalunya no hauria de repetir l’error del 1936 quan, deixant-se anar pel pendent anàrquic, convencé les “democràcies burgeses” que aquella república no valia la pena salvar-la i entre un aliat soviètic a l’entrada de la Mediterrània i una dictadura conservadora controlable, la segona opció era preferible. A més, Espanya ha jugat bé les seves cartes i avui és un aliat menys comprometedor que no ho fou en aquella època. Així doncs, qualsevol aparença de complicitat amb Rússia l’aprofitarà l’estat espanyol per a insistir en la tesi de Catalunya com a baula feble en l’estratègia russa d’afeblir la Unió Europea.

Ignacio Sánchez-Cuenca El menosprecio del pueblo

L’autor argumenta que un dels principals trets històrics de la política espanyola és la desconfiança de les elits envers el poble. Així, els períodes autoritaris es poden explicar per la voluntat de les elits d’impedir que el poble opini sobre els assumptes públics. Controlar les masses era el principal objectiu del sistema de la restauració borbònica. Amb la tornada de la democràcia el 1977 es va donar un gran salt endavant, però el front unit d’UCD, el PSOE i el PCE va atorgar més poder els partits polítics, en detriment de la ciutadania. Com a resultat, Sánchez-Cuenca afirma que vivim en una democràcia encotillada: la ciutadania vota i gaudeix de llibertats i drets, però té poc marge per la seva iniciativa política. L’establishment prefereix aquells polítics professionals que, des de la crisi del 2008, es deslliguin de la voluntat popular i adoptin mesures impopulars. Aquesta és també la tesi de Robert Fishman, qui sosté que la Transició promoguda des del propi Estat va acabar creant un sistema menys inclusiu del que podria haver estat. L’autor apunta que el confinament sever imposat el març de 2020 podria obeir aquesta lògica, basada en la desconfiança de les elits cap al poble. Un altre exemple és la recent polèmica causada per l’elecció de la cançó que anirà a Eurovisió, escollida per un sistema que menystenia el vot popular i se centrava en un comitè d’experts triat per l’establishment televisiu.

Anna Sauerbrey Europe Is on the Brink of War, and Germany Is Nowhere to Be Seen

Durant les darreres setmanes, i a diferència d’altres països occidentals, el govern alemany s’ha negat a lliurar armes a Ucraïna, al·legant el seu compromís de no vendre armament a zones en conflicte. En aquest article publicat a The New York Times, Anna Sauerbrey denuncia que el canceller Scholz hagi desaparegut de la primeta línia malgrat les crítiques rebudes des de l’estranger. El pacifisme i la història, profundament arrelats en el debat públic i en dos dels tres partits que governen actualment el país, poden ajudar a comprendre el posicionament d’Alemanya. D’una banda, molts membres del Partit Socialdemòcrata s’enorgulleixen de l’acostament a la URSS durant la Guerra Freda i defensen que Alemanya actuï com a amortidor entre els Estats Units i Rússia, tot i que aquest relat sovint revesteixi interessos econòmics clars. Per la seva banda, els Verds van néixer el 1980 dels moviments ecologistes i per la pau, i l’amenaça russa els ha atrapat en un moment de tensions internes. El govern de coalició pot haver decidit no arriscar la seva unitat per una qüestió de política exterior, però al cap i a la fi, la seva precaució s’ajusta a l’opinió nacional majoritària. Tot i que Alemanya és reticent a sortir de la seva zona de confort, Sauerbrey puntualitza que algunes coses comencen a canviar: alguns socialdemòcrates semblen disposats a renunciar a la relació especial amb Rússia i la ministra d’exteriors ecologista ha deixat clar que Alemanya està preparada per actuar.

Wolfgang Streeck L’Europe, cet empire dont l’Allemagne n’est pas sûre de vouloir

Al capdavant d’una coalició sense identitat política, el nou canceller alemany Olaf Scholz haurà de resoldre una sèrie de contradiccions que el seu predecessor havia eludit amb habilitat: les opinions divergents de París i Berlín sobre Europa i sobre la seguretat; la relació amb la Xina i Rússia, clients i proveïdors essencials però adversaris en valors. Dins d’aquest context, l’autor analitza els factors que dificulten un lideratge franco-alemany a Europa. Primer, vista des de Berlín, Europa està formada sobretot per un ampli mercat i una fàbrica de subcontractació al servei de les indústries exportadores alemanyes, amb l’Europa de l’Est com a reserva de mà d’obra a baix cost. Per tant, Alemanya busca principalment protegir i desenvolupar el mercat únic i la UEM. El segon factor que complica el projecte d’una Europa francoalemanya és el de la seguretat. En aquest assumpte, Alemanya s’arrenglera gairebé totalment als Estats Units, que té les seves pròpies opinions sobre l’arquitectura desitjable d’Europa. Recentment, però, la fiabilitat d’aquest dispositiu s’ha posat cada cop més en dubte, sense que la transferència de la seguretat nuclear alemanya a França aparegui a l’ordre del dia. Els intents de Donald Trump d’acostar-se a Rússia a l’inici del seu mandat, qüestionant els mèrits de l’OTAN trenta anys després de la caiguda de la Unió Soviètica, van sacsejar la classe política alemanya. I ara es produeix el canvi dut a terme pel nou president nord-americà, que, sota la pressió dels mitjans i dels “falcons” del seu partit, ha acabat tornant a Rússia al rang de gran enemic dels Estats Units, com en els temps de la Guerra Freda. El tercer element és la resposta de la Unió a la doble realitat de la decadència nord-americana i l’ascens xinès, és a dir, al final del “final de la història” i del nou ordre mundial proclamat per George Bush a principis de la dècada de 1990. Mentre els nord-americans es preparen per enfrontar-se a la Xina per preservar o recuperar la seva hegemonia global, Europa s’enfronta a una dura elecció si es llança a la batalla com a auxiliar regional dels Estats Units, o si hauria d’aprofitar l’ocasió per reforçar la seva independència d’ells, sigui el que això signifiqui, per defensar els seus propis interessos internacionals en els intersticis deixats vacants pels dos gegants.

Joschka Fischer Ukraine and the future of Europe

L’antic ministre alemany d’afers exteriors, Joschka Fisher afirma que tot i no sabem què passarà quan es completi el desplegament de tropes russes a la frontera ucraïnesa, sembla que els fets apunten a una possibilitat de guerra imminent. Fischer considera que això trencaria l’ordre a Europa i que aquesta es tornaria a dividir en dues esferes d’influència: la “Rússia europea” a l’est i la dominada per l’OTAN a l’oest. Apunta que al cor d’aquesta crisi se situa el canvi produït dins Rússia, que com a actor revisionista, no vol mantenir el seu propi estatus quo, sinó canviar-lo al seu favor. Si Europa se sotmetés a les pressions imperialistes, s’abandonaria tot el progrés i els valors construïts per la UE. Les demandes de Putin reflecteixen aquesta pulsió en tant que el que pretén el mandatari rus és que l’OTAN abandoni les pretensions d’expandir-se no només a Europa de l’est, sinó també a Escandinàvia. La necessitat de Putin de compensar la humiliació per la caiguda de l’URSS cristal·litza en la seva política de tornar a fer ressorgir l’Imperi Rus. Avui, la independència i l’autonomia d’Ucraïna és un fre al seu pla, però demà ho poden ser altres repúbliques exsoviètiques. Contra l’amenaça russa, la UE ha de convertir-se en un poder autònom per defensar els seus principis i sobreviure en un món dividit pels antagonismes de grans superpotències.

The Economist Jens Stoltenberg explains how to step back from the brink of European conflicte

L’actual secretari general de l’OTAN, Jens Stoltenberg, considera que si l’URSS s’hagués sortit amb la seva el 1949, Noruega no hagués format part de l’OTAN. Els polítics noruecs van decidir prendre la decisió que els competia com a representants d’un estat sobirà i independent, i van aconseguir els seus objectius amb el suport d’altres països europeus. Després de la Guerra Freda, els països d’Europa central i oriental van decidir lliurement apropar-se a Occident i passar a formar part de l’OTAN. Sota els principis del dret internacional, qualsevol estat sobirà té dret a escollir el seu propi camí. Ara Rússia exigeix que Ucraïna no entri a l’OTAN, i per primera vegada, la Xina dóna suport a les seves reivindicacions. Les pressions no afecten només Ucraïna, sinó que Putin pretén implicar també Finlàndia i Suècia. A més, Rússia vol que l’aliança retiri tropes de països que van incorporar-se a l’OTAN abans fins i tot de la caiguda de comunisme. Stoltenberg argumenta que no es pot tornar a l’època de les esferes d’influència, quan les superpotències imposaven la seva voluntat als estats petits. Cap país no hauria d’usar la força o l’amenaça de la mateixa per redibuixar fronteres al seu gust. Durant la Guerra Freda, la presència de Noruega a l’OTAN no va impedir poder comunicar-se amb Moscou, al contrari, li va donar una millor plataforma per fer-ho. Ara, es pot fer el mateix amb altres països. Malgrat les diferències amb Moscou, l’OTAN manté la voluntat d’entendre’s-hi, per buscar acords de cooperació que beneficiïn ambdues parts. L’objectiu d’aquest diàleg ha de ser reduir riscos i millorar la transparència dels exercicis militars. És un agenda que aposta clarament pel diàleg, respectant els drets de tothom.

Ido Vock & Nicu Calcea Will Ukraine be the source of Europe’s next migrant crisis?

Durant les darreres setmanes, alguns funcionaris europeus han mostrat la seva preocupació per una possible nova crisi de migrants en cas d’una guerra a gran escala a Ucraïna. En efecte, un moviment de població d’aquest tipus ja té precedents amb la invasió del 2014 de l’est d’Ucraïna per part de forces pro-russes. En cas de produir-se un atac rus a gran escala, molts desplaçats es dirigirien cap a l’oest d’Ucraïna, a zones amb menys probabilitats de ser envaïdes per Rússia. Altres marxarien d’Ucraïna i podrien intentar arribar a la UE. Que els refugiats es desplacin dins de les fronteres ucraïneses o que intentin entrar a la UE dependrà de diversos factors, com ara l’abast d’una invasió russa i la durada d’una hipotètica ocupació militar. Una ocupació prolongada, encara que la majoria dels analistes la consideren poc probable, significaria una fugida massiva. Des de fa anys, milions ucraïnesos ja han marxat cap a la UE, la majoria en països de l’est d’Europa, geogràficament i culturalment més propers. D’altra banda, les autoritats ucraïneses també està jugant un paper a l’hora d’encoratjar l’emigració, ja que els ciutadans ucraïnesos gaudeixen d’un règim sense visats per viatjar a l’espai Schengen. Si un nombre significatiu intentés dirigir-se cap a l’oest per fugir d’un avenç rus, molts utilitzarien aquest dret per entrar a la UE, la cosa representaria un repte humanitari i logístic important per als països fronterers.

Daniel Schwarzer For Europe, confronting China should begin at home

L’article repassa la relació entre Hongria i la Xina com a cas paradigmàtic d’un estat membre de la UE i l’OTAN, per recordar que, igual que passa amb Rússia, aconseguir una posició unificada de la UE sobre la Xina no és una tasca senzilla. En efecte, alguns governs no només perceben el president xinès Xi Jinping com una clau per a la prosperitat, sinó que també el veuen com un soci ideològic. En aquest sentit, l’autor considera que el fracàs de la UE per abordar el retrocés democràtic entre els seus propis membres durant l’última dècada fa que la tasca de la Xina sigui molt més fàcil. Un exemple d’això és Hongria, que s’ha convertit en la principal receptora d’inversions xineses a Europa central i orienta, amb Budapest com a centre logístic europeu de Huawei. L’any passat, quan el ministre de Defensa Nacional xinès va visitar Hongria, membre de l’OTAN, va parlar de la voluntat de la Xina d’impulsar les relacions militars a un nou nivell. Budapest també s’ha compromès a produir la vacuna Sinopharm de fabricació xinesa contra la COVID-19, tot i no haver rebut l’aprovació de l’Agència Europea del Medicament. Aquesta estreta xarxa d’interessos ja està donant dividends per a la Xina i ha obstaculitzat una política exterior coherent de la UE. Schwarzer afirma que cal buscar les arrels d’aquesta incoherència en el fet que la UE no va poder contenir amb força l’ascens de governs autoritaris il·liberals.

David Gauke Why Brexit is disappointing even its supporters

El 31 de gener va fer dos anys de la sortida del Regne Unit de la UE i el govern britànic va aprofitar per publicar un document amb el títol: “Els beneficis del Brexit”.No és sorprenent que els que es van mostrar escèptics davant de la sortida de la UE, no es mostrin molt sorpresos amb els resultats. Però més curiosa ha estat la resposta d’aquells que van votar “sí” a deixar la UE i acusen al govern de, després de dos anys, ser massa prudents i compromesos amb els interessos que van crear i acusen també els ministres de no saber acceptar responsabilitats. David Frost, exministre del Brexit, opina el mateix i defensa que la culpa no és de Johnson, sinó del context polític i pràctic. Tots els actes del Brexit, tenien com a base que sortir de la UE, seria el començament d’un Regne Unit nou i poderós i es va assegurar a la població britànica que respectarien les proteccions d’ocupació i medi ambient i que la UE no era més que un projecte socialdemòcrata sense futur. El camí del Brexit però, sempre va anar encapçalat per una visió més social i no tant econòmica, i per aquesta raó, ara és molt més difícil aplicar les polítiques econòmiques conservadores de lliure mercat. Els pro-Brexit a més, després d’analitzar les polítiques financeres, accepten que les regulacions de la UE no eren tan dolentes. El punt que queda molt clar després de dos anys de Brexit és que, després d’un gran discurs d’oportunitats de desregulació, lluitar pels objectius del país no es una tasca fàcil. El país continua pagant un preu molt alt per la llibertat regulatòria i els beneficis encara deceben els grans defensors del Brexit.

La Vanguardia Dodik da el primer paso en su plan para separar a los serbios de Bosnia

La Vanguardia para atenció a l’avenç del pla secessionista del nacionalisme serbobosnià, que pretén separar la República Srpska de la resta de Bòsnia i Hercegovina. El Parlament d’aquesta entitat autònoma de majoria sèrbia ha aprovat una llei anticonstitucional per crear un sistema de justícia propi, amb un òrgan de govern per nomenar jutges i fiscals. Milorad Dodik, líder ultranacionalista serbobosnià i alhora un dels tres presidents de Bòsnia i Hercegovina, ha anunciat que aquesta llei només entraria en vigor d’aquí a un any, tot i que el passat mes de desembre, el Parlament de la República Srpska va donar sis mesos al Govern de l’entitat per organitzar legalment la sortida de l’exèrcit, la justícia i el sistema fiscal estatal. L’oposició parlamentària serbobosniana, acusa Dodik de posar en perill la pau i d’impulsar el seu projecte separatista simplement per atraure vots de cara a les eleccions generals de l’octubre. Tanmateix, la celebració d’aquests comicis depèn d’una reforma electoral per a la qual els líders polítics bosnians no es posen d’acord. La comunitat internacional considera que els plans serbobosnis han elevat la tensió ètnica al país als seus nivells més alts des de la guerra que va enfrontar serbis, croats i musulmans entre el 1992 i el 1995. 

The Economist Bosnia is on the brink of falling apart again

The Economist analitza els esdeveniments més recents que amenacen la unitat de Bòsnia i Hercegovina. El país s’enfronta a la seva pitjor crisi des que els Acords de Dayton de 1995 van posar fi a la guerra amb la creació de dues entitats autònomes i un modest govern nacional. Ara, Milorad Dodik vol rescindir els poders atorgats per la Republika Srpska a l’estat bosnià. El pla secessionista va començar el passat juliol, després que l’Alt Representant que supervisa els acords de pau imposés una llei que il·legalitzava negar el genocidi de Srebrenica. Parel·lament, el principal partit croata de Bòsnia, amenaça amb impedir les eleccions generals d’aquest any. Durant anys s’ha oposat a que bosnians i croates triïn conjuntament dos dels tres representants de la presidència del país, ja que d’aquesta manera el representant croata, és elegit principalment amb vots bosnians. Les divisions ètniques fan de Bòsnia un país impossible de governar, i alguns ja tornen a parlar de guerra. Els diplomàtics miren ara Ucraïna, ja que si la guerra hi esclata, Dodik podria intensificar els seus plans separatistes amb la complicitat de Moscou. Des d’Occident, els Estats Units ja han imposat sancions al líder serbobosnià per “intent de desmantellar” Dayton i per corrupció, però la Unió Europea haurà d’enfrontar l’oposició d’Hongria si vol seguir el mateix camí. 

Achille Membe Un New Deal entre l’Europe et l’Afrique est-il possible?

Amb motiu de la cimera entre la Unió Africana i la Unió Europea dels dies 17 i 18 de febrer, Achille Mbembe proposa en un article publicat a Le Grand Continent allunyar-se d’una visió apolítica del desenvolupament en un moment on la majoria de les potències estan construint nous estratègies globals amb Àfrica i afirma que la democràcia es formula cada cop més en termes de la redistribució més justa possible dels mitjans d’existència, en la perspectiva de la sostenibilitat ecològica i social dels continent. Pel que fa a les relacions amb Europa, denuncia que ja sigui en relacions bilaterals o amb la Unió Europea, no existeix una cooperació sistèmica amb els governs africans en matèria de reformes polítiques destinades a garantir una governança inclusiva i democràtica. També considera que a més de ser una qüestió de valors, el suport a la democràcia respon als interessos polítics i de seguretat d’Europa a llarg termini. Conclou que en procedir com si els problemes del desenvolupament socioeconòmic vinguessin en última instància per una manca de capacitats financeres, tècniques i administratives i no fossin causats per estructures de poder i vulnerabilitat, s’ha privat Àfrica de tenir una mirada pròpiament geopolítica.

Iratxe García Pérez Time for a partnership on equal footing between Africa and the EU

Iratxe García Pérez, presidenta del grup Socialistes & Demòcrates al Parlament Europeu, subratlla a la revista Politico que la COVID ha suposat un deteriorament molt gran pel que fa a la situació econòmica de molts països i que els més afectats són els països africans. Així, mentre Europa torna progressivament a la normalitat, el continent africà segueix molt afectat per la desigualtat pel que fa a la vaccinació de la població. Per aquesta raó, la fabricació de vacunes a Àfrica i per a l’Àfrica és primordial per acabar amb la pandèmia, ja que sinó els països més vulnerables continuaran desprotegits i es fomentem que apareguin noves variants del virus. Això no obstant, també cal posar l’accent en altres temes de resolució urgent com l’afebliment de la democràcia (l’augment del nombre de cops d’estat n’és un exemple patent), el canvi climàtic o la fam.

Democracia, diversidad y cultura

Kristaps Andrejsons Russia and Ukraine Are Trapped in Medieval Myths

Des de Foreign PolicyKristaps Andrejsons argumenta que la crisi entre Rússia i Ucraïna també s’explica atenent les disputes sobre dels mites del passat. Putin i molts dels seus compatriotes creuen que russos, bielorussos i ucraïnesos són el mateix poble, en tant que són successors de la Rus de Kíev ortodoxa establerta el segle IX. Com a conseqüència de les invasions mongols, Polònia s’annexà gran part de l’oest de Ucraïna actual i Bielorússia va ser absorbida per Lituània. En aquest context, els líders del nou estat rus van declarar-se emperadors després de recuperar el territori perdut a l’oest, i així mateix, el procés centralitzador de l’Imperi va portar a prohibir els idiomes ucraïnès i bielorús. Si bé es cert que els primers idealistes de la Unió Soviètica van imaginar Ucraïna, Bielorússia i Rússia com nacions separades, però unides per un mateix ideal, l’estalinisme va oprimir sistemàticament la cultura ucraïnesa. Putin vol mantenir el mèrit soviètic i, alhora, presentar-se com un gran unificador de les terres russes i una figura semblant als antics tsars. En contra de la mitologia imperial russa, Ucraïna ha seguit el seu camí, reivindica la Rus de Kíev com el seu origen, i s’allunya de Moscou amb una església ortodoxa pròpia. Andrejsons conclou assenyalant la importància de construir un projecte completament nou sense mites nacionals que permeti resoldre aquests problemes històrics. 

Gonzalo Torné Contra las guerras culturales

La tesi principal que defensa Gonzalo Torné en aquest article és la capacitat crítica que pot arribar a tenir la lectura i com son capaços d’aprofitar-la els escriptors. Només cal analitzar diferents obres de grans autors per entendre-ho. Els escriptors son molt conscients en les seves obres de la funció critica i intel·lectual que poden tenir, tant és així, que molts han defensat premisses i temes polèmics quan en realitat opinaven el contrari, o així deixaven veure els seus fets. Els lectors en general podem caure en els tòpics que un escriptor conservador sempre defensarà unes posicions en concret, mentre que un escriptor més progressista, unes altres. Però és per això que és important analitzar el vocabulari que fan servir aquests escriptors i quines son les seves creences. Grans escriptors com Dickens que escrivien a favor del sufragi universal, després tenien posicions completament contràries i, fora de la ficció, defensaven l’esclavitud. I com aquest cas, molts altres. Aleshores, si analitzem aquest xoc cultural, entenem que els autors, en les seves obres, podien escriure i defensar un tema per així després ser capaços de rebatre’l, per demostrar que la lectura i l’escriptura tenen un gran poder sobre la població. I és així, la lectura, l’anàlisi dels contexts i les creences de la societat afecten els nostres prejudicis i les nostres opinions.

The Economist A new low for global democracy

L’article de The Economist adverteix que la democràcia ha continuat a afeblir-se durant l’any 2021 segons les dades publicades pel Democracy Index, una enquesta anual que valora l’estat de la democràcia a 167 països sobre la base de cinc variables: processos electorals i pluralisme polític, funcionament del govern, participació política, cultura política democràtica i llibertats civils. Segons l’estudi corresponent a l’any passat, més d’un terç de la població mundial viu sota un govern autoritari mentre que només el 6,4% gaudeix d’una democràcia plena. La puntuació global ha baixat de 5,37 per a l’any 2020 a un nou mínim de 5,28. L’única caiguda equivalent des del 2006 va ser el 2010 després de la crisi financera mundial. Per segon any consecutiu, la pandèmia ha estat la principal font de tensió per a la democràcia a tot el món: confinaments i restriccions a la mobilitat, suspensió d’algunes llibertats civils tant a les democràcies desenvolupades com als règims autoritaris, etc. D’altra banda, les divisions s’estan consolidant entre els que afavoreixen les polítiques de precaució com els confinaments i les vacunes i els que són hostils a la interferència de l’estat i qualsevol reducció de les llibertats personals. Els països nòrdics continuen dominant la part superior del rànquing i tres països asiàtics queden a les darreres posicions: per primera vegada Corea del Nord ha estat desallotjada de l’últim lloc pel cop d’estat a Myanmar i el retorn dels talibans a l’Afganistan. Però és a l’Amèrica Llatina on es registra el descens més pronunciat. La debilitat de la democràcia a la regió ha permès que els populistes il·liberals prosperessin i un calendari electoral atapeït no sempre ha fet avançar la causa de la democràcia. Amèrica del Nord no se’n surt gaire millor, tot i que malgrat els disturbis al Capitoli i els intents del president sortint Donald Trump de revocar els resultats de les eleccions, la presa de possessió de Joe Biden va transcórrer sense problemes. Finalment, l’informe identifica una sèrie d’amenaces per a la democràcia el 2022 i més enllà, i adverteix que el principal repte per al model occidental de democràcia durant els propers anys vindrà de la Xina.

Le Monde La démocratie au défi de la jeunesse

L’editorial del diari Le Monde  alerta de que de que la democràcia representativa interessa cada vegada menys els joves, que fins i tot sembla que li van donant l’esquena. Aquesta decepció no és nova. S’ha de vincular a la crisi de les organitzacions polítiques, a la decadència de les ideologies, a la dificultat dels governants per complir les seves promeses. Aquesta crisi de confiança alimenta l’abstenció en una categoria que ja vota poc. Pitjor encara, porta a desafecció respecte de la democràcia. A aquest dubte s’afegeix una mena de legitimació de la violència política: segons una enquesta publicada a principis de febrer per l’Institut Montaigne, gairebé un de cada dos joves considera comprensibles les agressions a càrrecs electes i un de cada cinc considera acceptable degradar un espai o un edifici públic. Aquesta crisi de la democràcia representativa és greu.

Yascha Mounk Open Everything

Tot i disposar de vacunes altament efectives contra la COVID, la vida als Estats Units segueix determinada per la precaució pandèmica. És per això que Yascha Mounk exigeix des de The Atlantic acabar amb les restriccions vigents i deixar d’allargar l’estatus quo més del que és justificable. Si bé és cert que les mesures més severes s’han aixecat, només el 18% dels nord-americans afirmen que les seves vides han tornat a la normalitat. Sacrificis com l’exigència de mascareta a l’escoles o mesures de desinfecció extrema suposen una gran càrrega psicològica i creen un profund sentiment de malestar social. Així mateix, moltes altres restriccions s’han tornat innecessàries perquè els hospitals ja no es troben en perill imminent de col·lapse. Tanmateix, la principal justificació que sosté aquestes mesures és que les persones no vacunades segueixen sent vulnerables. Mounk defensa que no hem d’aturar les nostres vides de forma indefinida només perquè altres han decidit arriscar la seva. Tot i que la propagació mundial del coronavirus continuarà provocant un patiment greu durant els propers anys, afirma que caldrà prioritzar la vida per sobre de la minimització de la mortalitat. De la mateixa manera que estem disposats a assumir riscos calculats en altres esferes de la vida, també hauríem d’estar disposats a tolerar algun risc pel que fa a les malalties infeccioses. 

Jacob Mchangama The War on Free Speech. Censorship’s Global Rise

L’autor assenyala que podem remuntar les arrels de la llibertat d’expressió fins l’any 431 aC. de la mà de Pèricles. Avui, els ciutadans de les democràcies el donen per suposat. Si avui visquessin pioners moderns com Spinoza o Olympe de Gouges, reconeixerien el s. XII com una edat d’or per la llibertat d’expressió. Tot i així, com apunta l’indicador V-Dem, la democràcia i la llibertat d’expressió estan en retrocés a països com la Índia, Polònia o Hongria. Les democràcies liberals també s’han vist sotmeses a aquesta espiral regressiva, i no són un contrapès coherent a les democràcies il·liberals. En contra d’abandonar aquest dret fonamental, cal enfortir les lleis i normes que el protegeixen. A Europa, el principal laboratori de la llibertat d’expressió, sembla que s’ha imposat la “democràcia militant”: denegar llibertats democràtiques a aquells que rebutgen la democràcia. Els EUA, tot i que el suport a la primera esmena continua sent elevat, quan la llibertat d’expressió es barreja amb qüestions identitàries, sovint aquest suport col·lapsa. Els atacs a la llibertat d’expressió solen venir de la dreta il·liberal, com l’expresident Trump, però a vegades també gaudeixen de suport bipartidista. Segurament el millor exemple de la regressió generalitzada és Internet: ha passat de ser un dels pilars de la llibertat total a veure com la llibertat hi retrocedia per onzè any consecutiu. També molts estats han utilitzat aquestes eines per reprimir i censurar. La tensió entre l’igualitarisme i l’elitisme s’ha accentuat amb els canvis tecnològics. La importància d’Internet està clara en el paper que han tingut en les protestes arreu del món. Les mentides i teories de la conspiració han dificultat la gestió de la pandèmia. Plataformes com Facebook o Twitter, creades com a defensores de la llibertat d’expressió, també han censurat continguts als darrers anys. En lloc d’intentar salvar les democràcies de la llibertat d’expressió, Mchangama considera que s’ha de redescobrir el seu enorme potencial. En comptes d’iniciar polítiques que limitin la llibertat, s’hauria d’expandir allà on s’està reduint. I no només a través d’accions governamentals, sinó també de mans de la societat civil i empreses tecnològiques.

Pawel Zerka Pourquoi il ne faut pas passer à côté du débat sur la liberté

Inspirats pel moviment de camioners a Ottawa, fa pocs dies les anomenades “caravanes de la llibertat” es dirigien cap a París amb la intenció de bloquejar la capital francesa per lluitar contra les restriccions sanitàries. Per tot Europa, aquests moviments s’han estès des de l’any passat. Segons Paweł Zerka, per desactivar l’argument de l’extrema dreta que només ella pot defensar la llibertat, caldrà ser capaços de demostrar que la seva definició de llibertat és fragmentària i oferir-ne una altra d’alternativa. Tanmateix, s’ha de fer d’una manera que no sigui estigmatitzant. Rifar els no vacunats com a teòrics de la conspiració ingenus o agents estrangers pot estar en part justificat, però suposa falsament que tots els altres no dubten del significat de la llibertat. També és massa a la defensiva, la qual cosa fa que el corrent principal sembli que no té bons arguments en aquest debat crucial. Si la creença en la prioritat de la llibertat individual preval en els cercles d’extrema dreta, el centre de l’espectre polític s’hauria de caracteritzar per una visió de la llibertat a través del prisma del conjunt de la societat. És legítim restringir la llibertat individual si serveix per “evitar danys als altres”, va escriure John Stuart Mill fa un segle i mig. El que sovint falta als debats polítics actuals és una reacció clara: protegir els altres membres de la societat també és una qüestió de llibertat. Quan no hi havia vacunació, ens havíem de quedar a casa per limitar la propagació del virus i evitar infectar els més vulnerables. Ara que tenim vacunes, les diferents obligacions i restriccions tenen com a objectiu sobretot evitar que els hospitals es sobrecarreguin innecessàriament per poder tractar pacients amb altres malalties. En altres paraules, acceptem determinades restriccions perquè tots puguem gaudir de la llibertat en la màxima mesura possible. Els governs no haurien de tenir por de debatre aquesta qüestió pel que fa a les proteccions necessàries per preservar la llibertat individual. La majoria silenciosa ara pot esperar que algú els aporti una perspectiva diferent i més responsable de la llibertat. En descuidar o ignorar aquesta demanda, el centre de l’espectre polític deixa aquest concepte complex a mercè dels llibertaris i els dóna l’oportunitat de guanyar la batalla crucial de les narratives.

Economía, bienestar e igualdad

Adam Tooze Why inflation and the cost-of-living crisis won’t take us back to the 1970s

Els preus estan augmentant moltíssim i el simple fet de portar una vida normal sense cap tipus de luxe ja resulta ser molt car. I, tant si els preus pugen o baixen, sempre n’hi ha alguns que surten guanyant i d’altres que surten perdent. Segons els economistes, no ens hem d’espantar pel canvi de preus dels productes, defensen que això és la “màgia” de l’economia i que ella mateixa, amb la llei de oferta-demanda, s’autoregularà. Però llavors, què està passant? Per què pugen tant els preus i conseqüentment el nerviosisme de la població? De fet, la gran majoria de conflictes dins la societat han estat per motius econòmics. Els índex de preus ens donen una indicació aproximada del poder adquisitiu dels diners i d’això en denominen la inflació. És a dir, no és un moviment de preus en relació als salaris de la població, sinó un moviment dels preus de tots els béns i serveis en relació als diners i el banc central d’un país és el responsable d’administrar l’oferta d’aquests diners. Si un país pateix una inflació molt ràpida, pots arribar a ser molt perjudicial per las seva economia. El banc central i el mercat de bons són molt sensibles a l’efecte de la inflació i recuperar la normalitat és una tasca difícil i delicada si tenim en compte que, per exemple a Estats Units, hi circulen més de 20 bilions de dòlars. Com era d’esperar, després de la crisi de la COVID, la inflació està augmentant molt. Però un gran interrogant, encara sense resposta, s’obre: els preus estan pujant únicament per la crisi de la COVID o per un escenari d’inflació general? Si la resposta correcta fos la segona opció, hauríem de començar a buscar raons, culpables i solucions. Un sistema de regulació dels preus seria una solució al problema. En realitat això ja existeix, però fer-lo més efectiu ajudaria o seria una pèrdua de diners? La gran preocupació dels governs és el preu de l’energia i de quina manera està augmentant a tot el món. A partir d’aquest punt, quan un bé comú com ara l’energia comença a pujar tant de preu, la jerarquia de classes i desigualtats tremola. Els més rics podran seguir gaudint de tenir calefacció, però els més pobres? Si analitzem les darreres dècades de la historia, un sistema econòmic molt desigual pot desencadenar rebel·lions socials. És molt probable que la inflació hagi estat provocada per la crisi de la COVID, però ens ha servit d’avis per un futur i per no retrocedir a escenaris econòmics com el de 1970. Sigui quin sigui el proper escenari per la humanitat (una altra pandèmia, una crisi climàtica…) només ens queda aprendre i mirar cap al futur.

The Economist Interest rates may have to rise sharply to fight inflation

A mesura que la inflació augmenta, hi ha una sensació creixent que la Reserva Federal no sap ben bé com combatre-la i sembla com si estigués a punt de fer un canvi brusc de rumb endurint la política monetària. Aquesta perspectiva ha afectat els mercats de valors i ha provocat que moltes empreses es preguntin si l’era dels tipus baixos podria haver acabat definitivament. A curt termini, la Reserva Federal ha de contenir-se però, a la llarga, l’envelliment de la població mundial mantindrà un límit als tipus d’interès, els augments dels quals són descoratjadors perquè gran part del món s’ha acostumat a una era de diners barats. En efecte, cap banc central del G7 ha fixat tipus d’interès per sobre del 2,5% en més d’una dècada. És per això que l’augment dels preus dels últims 18 mesos ha estat una sorpresa per a la Reserva Federal i altres bancs centrals. Als EUA, la inflació dels preus al consum ha arribat al 7% i és lluny de ser transitòria. Com a resultat, els bancs centrals s’estan movent. La Reserva Federal diu que té previst tornar els tipus d’interès al voltant del 2% el 2024, no gaire lluny de la majoria de les estimacions del seu nivell neutral, que en teoria no estimula l’economia ni la frena. Però a mesura que la Reserva Federal ha arrossegat els peus, ha augmentat el risc d’haver d’anar més enllà. Les expectatives d’inflació més altes fan que sigui més difícil contenir l’increment dels preus.

Piero Esposito et al. ‘They’re taking our jobs’—really?

Segons una edició especial de l’Eurobaròmetre del 2018, la majoria dels ciutadans de la Unió Europea tenen una percepció negativa de la immigració, i quatre de cada deu enquestats afirmen que els immigrants prenen feina als treballadors autòctons. En aquest article publicat a Social Europe, Piero Esposito, Stefan Collignon i Sergio Scicchitano desmenteixen que això sigui cert per mitjà d’un estudi que avalua els efectes de la immigració sobre l’atur, entre el 1997 i el 2016, als països de la UE-15. Pel que respecta als països perifèrics de la UE, la immigració hi ha reduït l’atur a llarg termini. Els treballadors migrats han complementat els autòctons i han mitigat l’envelliment de la població i els desajustos d’habilitats. Als països centrals, en general, no s’observa un impacte significatiu de la immigració sobre l’ocupació, tot i que podria haver reduït l’atur a França, Alemanya i el Regne Unit. Així mateix, val a dir que la immigració ha reduït notablement l’atur als països escandinaus i anglosaxons, mentre que l’impacte ha estat insignificant a països del sud d’Europa com Itàlia, Grècia i Portugal. Pel que fa als països continentals i Espanya, l’impacte és moderadament positiu. 

The Economist What would happen if financial markets crashed?

Des de les pàgines de The Economist s’alerta de determinats signes que provoquen un cert neguit a Wall Street, tot i que el mercat financer sigui molt diferent de com era abans de la crisi del 2008. El mes gener de 2022 ha sigut el pitjor des de 2009, caient un 5.3% després d’un any de pujades. Pot semblar que això sigui una correcció necessària per evitar els excessos especulatius, però el sistema financer encara han d’enfrontar molts riscos. El preu dels actius està tant alt com abans de les crisis de 1929 i 2001, i s’espera que la Reserva Federal pugi els tipus d’interès. Això podria provocar grans pèrdues, i caldria veure si els bancs centrals de les principals economies les podrien absorbir. La digitalització ha incorporat un gran grup de nous inversors i noves pràctiques que gràcies a les noves tecnologies permeten que els mercats estiguin constantment connectats. Molts d’aquests canvis han estat positius, però comporten dos grans perills. El primer, és que gran part de l’entramat està amagat en bancs i fons d’inversió a l’ombra. El segon és que tot i que el mercat està menys centralitzat, encara queden nodes que poden provocar gran volatilitat. El mercat està hiperactiu la major part del temps, i en ocasions de màxim estrès es poden produir moviments de pànic, com va passar amb el caos generat per l’afer GameStop.  

Léonce Ndikumana & James K. Boyce Capital flight—stopping the looting of Africa

Els autors denuncien a Social Europe que mentre els països del sud del continent africà han tornat a ser víctima d’un tancament de fronteres injust a finals de l’any 2021, els països rics continuen oposant-se a la demanda d’aixecar les patents de vacunes i tractaments per al virus. Aquest egoisme vacunal no només està passant factura als països pobres, sinó que també s’està tornant en contra dels països rics, sotmesos a les noves onades del virus. Afirmen que les repercussions d’aquesta actitud també es reflecteixen en els fluxos financers entre el nord i el sud globals. Sobre el paper, els països rics multipliquen l’ajuda al desenvolupament i les inversions directes a l’Àfrica. En realitat, fan els ulls grossos davant un sistema internacional que saqueja sistemàticament el continent en benefici d’una elit i de les grans empreses. Així, durant les últimes cinc dècades, l’Àfrica subsahariana ha perdut més de 2 bilions de dòlars degut a la fugida de capitals. Els fluxos de capital transfronterers no són impulsats per l’escassetat relativa a l’Àfrica, sinó pel secret relatiu que poden gaudir els creditors als paradisos fiscals estrangers. D’altra banda, les elits nacionals reben l’ajuda i el suport de bancs i empreses de consultoria estrangers per organitzar la fugida de capitals dels països africans. Finalment, els autors assenyalen que calen esforços regionals i globals coordinats per combatre la fuga de capitals, la corrupció i l’evasió fiscal de les empreses. Igual que amb la vacuna contra la COVID-19, aquest és un càlcul a molt curt termini. Només la solidaritat vacunal aturarà les variants que d’altra manera prolongaran aquesta pandèmia indefinidament. Només atacant realment l’espoli dels recursos del sud els països més pobres es podran desenvolupar i s’evitaran una explosió social i migracions forçades. 

Sostenibilidad y cambio climático

George Monbiot Carbon offsetting is not warding off environmental collapse – it’s accelerating it

George Monbiot denuncia des de The Guardian com les grans empreses estan duent a terme un clara estratègia de greenwashing apropiant-se dels boscos del planeta. Per evitar que l’escalfament global superi els 1,5 °C, no només cal descarbonitzar les nostres economies, també és necessari impulsar solucions basades en la natura que, mitjançant la restauració d’ecosistemes, possibilitin extraure part del diòxid de carboni present a l’atmosfera. Tanmateix, amb això no hi ha prou perquè les empreses més contaminants compensin les seves emissions de gasos d’efecte hivernacle. Les empreses petroleres continuen extraient recursos fòssils mentre afirmen haver assolit la neutralitat climàtica aportant diners per protegir boscos o plantar-ne de nous. En aquest sentit, Monbiot assenyala que aquest ús de les solucions basades en la natura està ajudant a accelerar el col·lapse ambiental, enlloc d’evitar-lo. Cal tenir en compte que no hi ha prou superfície a la Terra per absorbir les emissions generades per les empreses. Per això, la pressió de compra d’espais verds per part de les grans empreses està provocant que els preus del sòl augmentin i que la població local no pugui aplicar els seus propis projectes de reforestació.

Sarah Brown Europe’s utilities: net zero or not zero?

Sarah Brown considera que el sector energètic europeu haurà de procedir a ràpides reduccions en les emissions de gasos d’efecte hivernacle si vol assolir una economia neta d’emissions el 2050. Una ràpida expansió de les renovables és l’únic que garantirà abandonar el carbó el 2030 i aconseguir electricitat totalment neta el 2035. És una fita que s’hauria de prendre seriosament: la llei de Canvi Climàtic de 2021 vincula legalment les institucions europees i els seus membres d’acord amb els plans establerts. Si bé és excel·lent tenir objectius a llarg termini, també s’han de dur a terme accions immediates. El resultat és que fins i tot pel que fa al carbó, el pla més avançat, la UE encara es queda curt. Només el 43% dels projectes analitzats podrien deixar d’utilitzar completament el carbó l’any 2030. En el cas dels gasos fòssils, la crisi energètica que viu actualment  Europa, ha disminuït la utilitat d’aquesta font energètica com una energia de transició cap a un model verd. L’ús de les energies renovables es van accelerant, però no és suficient: l’any 2020 només representaven el 34% de la generació d’electricitat total.

Fiona Harvey Extreme weather has cost Europe about €500bn over 40 years

Els fenòmens meteorològics extrems han costat a Europa prop de mig bilió d’euros en les darreres quatre dècades; Alemanya, França i Itàlia han estat els països més afectats. Les dades publicades per l’Agencia Europea del Medi Ambient no demostren un augment de les pèrdues econòmiques degut a la crisi climàtica i estableix que les grans pèrdues de diners es resumeixen en fets molt concrets. Però sí que, a llarg termini, l’economia dels països europeus es veuria afectada pels fenòmens meteorològics. A més, en l’estudi que varen realitzar, van destacar la importància d’adaptar les infraestructures i preparar-nos per unes condicions de clima extrem. Defensen aquesta adaptació de les infraestructures, perquè per molt que s’intentin reduir el efectes del canvi climàtic, serà necessària una adaptació. Encara que Regne Unit ja no formi part de la UE i tampoc de l’AEMA, quan es va dur a terme l’estudi, sí que van tenir en compte les dades del país i va resultar ser el país més afectat. Els pitjors danys van ser els hidrològics, com inundacions. En resum, l’estudi que es va dur a terme va analitzar la majoria de països d’Europa i va establir quins serien els més afectats i quins tenien les pèrdues assegurades, que serien Dinamarca i Holanda.

Eva Saldaña & Fernando Ferrando El futuro solo es renovable

Els autors denuncien que la proposta de taxonomia de la UE  ha cedit als interessos de grans empreses i lobbies i ha considerat el gas fòssil i l’energia nuclear com a fonts d’energia verda. Tot i que aquesta proposta de la Comissió Europea és un error històric, encara queden quatre mesos al Parlament Europeu per rectificar aquesta decisió. L’objectiu ha de ser ajudar bancs i empreses a identificar les tecnologies respectuoses amb el medi ambient i els Acords de París, i en canvi aquesta decisió només facilita el greenwashing de tecnologies sense futur mentre llastra el desenvolupament de les energies renovables. Especialment amb l’energia nuclear, sembla que s’empara les inversions a llarg termini fetes en el sector, que d’altra manera serien difícilment viables. Tot això suposa un clar fre a la descarbonització de gas fòssil centrada en les emissions de gas d’efecte hivernacle. El gas és hereu d’un sistema energètic que ha de ser reformat amb urgència. Per exemple, a Espanya l’any 2021 es va consumir un 5% més de gasos fòssils. La reforma, a més, seria beneficiosa per baixar els preus de l’electricitat, ja que reduiria la dependència energètica exterior. El futur model ha de ser socialment inclusiu, i focalitzat en les renovables, l’eficiència i l’estalvi.

Paul Magnette Le croissant fossile

Paul Magnette analitza els orígens del concepte d’Antropocè i es pregunta qui és aquest anthropos que ha provocat l’escalfament global i quins humans estan més directament afectats per les seves conseqüències. Al seu entendre, l’Antropocè no té ni sociologia ni geografia, i amb prou feines els inicis d’una història. Cal, doncs, intentar delimitar-ne el bressol geogràfic i definir un “Creixent fòssil” del qual el nord d’Anglaterra constitueix un focus essencial, però que no s’hi limita. La veta de carbó anglesa s’estén cap a l’est fins a Silèsia, passant per Picardia i Nord-Pas-de-Calais, Valònia i el Ruhr, i fins i tot, cap a l’oest, més enllà de l’Atlàntic fins als Apalatxes. El desenvolupament de les regions del món que avui queden condemnades a la subsistència només és possible si les principals regions de l’Antropocè, a les quals han estat sotmesos des de fa temps, restringeixen el seu consum d’energies fòssils i posen fi a la destrucció de les reserves de carboni i la biodiversitat. Si vol esdevenir un concepte efectiu, orientador d’anàlisi i d’accions col·lectives, l’Antropocè ha d’anar a la recerca dels seus orígens. No per xovinisme ni per inventar tradicions, sinó per entendre la lògica que va fer que aquestes bioregions siguin com són, i per extreure lliçons útils per al nostre temps. Què passa amb els homes i els territoris que habiten quan cessa la mineria del carbó; com reclama la natura els seus drets; com reaccionen les societats, s’estan diluint els llaços cívics i es recomponen les solidaritats? Es poden renovar ciutats que s’han tornat inadequades al seu entorn i a la seva població? Què fer amb la pila d’infraestructures industrials que s’han tornat inútils; com reparar la natura danyada i prevenir els efectes del canvi climàtic? En definitiva, hi haurà futur quan acabi l’orgia de l’Antropocè? És responent a aquestes preguntes que els territoris del creixent fòssil poden donar sentit a la seva dolorosa transició, i oferir a aquells que encara viuen de l’explotació massiva dels combustibles fòssils una imatge del seu futur.

Jason Bordoff & Meghan L. O’Sullivan Green Upheaval. The New Geopolitics of Energy

Jason Bordoff i Meghan L. O’Sullivan analitzen la qüestió climàtica des del punt de vista de la geopolítica i apunten que els defensors de l’energia neta esperen que, a més de mitigar el canvi climàtic, la transició energètica ajudarà a fer que les tensions sobre els recursos energètics siguin cosa del passat. Això no obstant, si bé és cert que l’energia neta transformarà la geopolítica, consideren que el procés serà desordenat en el millor dels casos. I lluny de fomentar l’ajuda mútua i la cooperació, probablement produirà noves formes de competència i confrontació. L’energia neta representarà una nova font de poder amb la qual cosa comportarà nous riscos i incerteses. És necessari per tant animar els responsables polítics a mirar més enllà dels reptes del canvi climàtic en si mateix i a avaluar els riscos i perills derivats de la transició energètica. L’abandonament del petroli i del gas reconfigurarà el món de manera espectacular però els debats sobre el futur de l’energia neta sovint obvien aspectes importants com per exemple el temps que pot requerir aquesta transició. A més, per entendre la geopolítica d’un món que es va allunyant progressivament dels combustibles fòssils, és fonamental entendre com l’aparició de superpotències d’energia neta produiran canvis en les influències geopolítiques. A la llarga, la innovació i el capital barat determinaran qui guanyarà la revolució de l’energia neta. Els països amb aquests dos atributs assentaran la seva hegemonia sobre quatre pilars. En primer lloc, tindran el un poder per establir estàndards per a l’energia neta que serà més subtil que el poder geopolític derivat dels recursos petroliers. Segon, el control sobre la cadena de subministrament de minerals com el cobalt, el coure, el liti, el níquel i les terres rares, que són fonamentals per a diverses tecnologies d’energia neta, incloses les eòliques i els vehicles elèctrics. Tercer, la capacitat de fabricar components barats per a noves tecnologies. I finalment, un país podrà convertir-se en una superpotència d’energia neta mitjançant la producció i l’exportació de combustibles baixos en carboni.

Innovación, ciencia y tecnología

Politico Can Europe act in time to secure its strategic autonomy in health?

A la conferència celebrada recentment sobre “Una indústria més forta per a una Europa més autònoma”, el ministre francès d’Economia, Finances i Recuperació, Bruno Le Maire, va parlar d’una oportunitat per assolir l’autonomia estratègica d’Europa mitjançant la innovació, la investigació i la industrialització disruptives. La indústria farmacèutica europea basada en la investigació dóna feina a 830.000 persones i inverteix més de 36.000 milions d’euros en R+D. El sector té un paper clau per garantir la competitivitat d’Europa en un context de competència mundial ferotge. Una part important de la construcció de l’autonomia estratègica d’Europa és la seva capacitat per establir l’agenda per transformar la ciència en realitat per als pacients. La resposta per crear un major accés als medicaments vindrà, al seu torn, d’una responsabilitat i inversions compartides entre la indústria i les autoritats públiques dels països membres de la UE. Europa pretén liderar els sectors estratègics i la transició verda i digital. Per tenir èxit, és essencial un fort esforç per gestionar les cadenes de valor completes de les tecnologies clau, equilibrant les interdependències i les cadenes de subministrament sòlides. Europa ha de dotar-se d’una capacitat dedicada, una perspectiva a llarg termini i una governança per liderar i finançar a escala tecnologies d’avantguarda en sectors estratègics. Amb les recents crides d’una “DARPA (Agència de Projectes de Recerca Avançada de Defensa) europea”, sens dubte és el moment adequat per començar a treballar en aquesta direcció. Un altre factor clau per a la sobirania europea són les dades, que són fonamentals per a la cadena de valor farmacèutica. L’anàlisi de dades dels pacients i les tecnologies “òmiques” impulsaran un nou paradigma en el desenvolupament del tractament, que conduirà a teràpies personalitzades que milloraran l’atenció als pacients i afectaran significativament les taxes de supervivència. L’autonomia estratègica significa donar a la Unió Europea les eines per dominar les tecnologies i innovacions clau i establir les seves pròpies prioritats. Però no es pot aconseguir sense el nivell d’ambició política adequat, tal com ha establert la Presidència francesa del Consell de la UE, un grau de compartició de riscos i inversions, la voluntat d’agrupar recursos i una implementació conjunta entre les polítiques nacionals i europees. 

Pablo Elorduy A Zuckerberg se le atraganta el despegue de Meta

Mark Zuckerberg, cocreador de Facebook, ha decidit revolucionar el món de les comunicacions i canviar de Facebook a Meta. No obstant, no ha sortit com ell esperava ja que el jovent ja no sembla interessada en aquesta plataforma i veuen Meta com una xarxa massa antiga. El gran declivi d’usuaris que ha patit la plataforma ha afectat de manera negativa al multimilionari. Les accions en borsa han caigut un 26% i ha patit gran pèrdues de diners. I, a més, altres xarxes socials externes a Zuckerberg, com Tik Tok, s’estan fent més conegudes entre la població, un fet que empitjora la posició de Zuckerberg. Per aquestes raons, Mark ha amenaçat en treure Meta i Instagram de la UE. La polèmica ha estavellat quan la UE ha volgut posar límits en la transferència de dades dels usuaris de les xarxes, que molts asseguren que no són segures. Aquests límits que demana Europa suposarien una pèrdua de diners per Zuckerberg i, òbviament, ell es nega a acceptar-los. El principal problema llavors és la falta de privacitat dels usuaris de les xarxes i, com a conseqüència, moltes persones poden patir extorsió o assetjament, entre altres coses. Per no seguir perdent usuaris i diners, després que moltes persones expliquessin els casos de violència que havien patit per les xarxes, Zuckerberg defensa un nou sistema de seguretat que no deixarà que dos usuaris s’apropin. Però, en realitat, a més del que hem explicat abans, Zuckerberg ha estat present en l’augment de poder de l’extrema dreta, un fet que no juga al seu favor

The Economist In the global chips arm race, Europe makes its move

La UE va voler el 2013 arribar al 20% de la fabricació global de xips l’any 2020, i l’any passat la xifra romania estancada al 10%. Si s’analitzen els números, la nova llei de Xips podria solucionar el problema: es preveuen 43.000 milions d’euros d’inversió, números molt similars els esperats pels EUA. Però la realitat és més difícil, els costos són molt elevats per qualsevol xip, i la recerca i investigació de fins i tot les més grans empreses costen anys i grans sumes. La posició global de la UE és més forta i més feble del que els números poden indicar. Més forta perquè encara té una posició privilegiada en la investigació de semiconductors. Europa també produeix bona part de les màquines necessàries per a les fàbriques especialitzades. Les febleses són la falta de fàbriques innovadores i la manca d’empreses que sàpiguen fabricar els xips més petits. La nova llei europea permetrà atrapar les regions més avançades, com la Xina i Taiwan, però la major part de la inversió prevista provindrà dels estats membres i el sector privat, mentre que la contribució de la UE lligada amb fortes restriccions burocràtiques. Un major problema és que tot i la voluntat d’atraure grans fabricants de xips a Europa, els gegants nord-americans només contemplarien traslladar part de la producció si la UE es fa càrrec de bona part dels costos. Alguns problemes més sorgeixen, com que l’actual escassetat de xips es converteixi en excés, o que si la iniciativa europea fracassa, les empreses europees dependrien totalment dels proveïdors exteriors. En paraules del comissari europeu de política industrial, les fàbriques no només serviran per la demanda europea, sinó que també proveiran els mercats globals. Però podria ser millor que la UE recolzés el seu ecosistema de xips invertint en investigació bàsica.  

Bruno Canard et al. Les apprentis sorciers du génome

Bruno Canard alerta des de les pàgines de Le Monde Diplomatique dels perills que representaria una experimentació genòmica desregularitzada. En efecte, l’edició del genoma i les noves tècniques genètiques plantegen qüestions ètiques i de bioseguretat que requereixen més que mai un debat ciutadà i una regulació internacional. Per consegüent, tant la comunitat científica com la societat civil han de valorar tots els aspectes per tal de definir amb més rigor què ha de fer i què no ha de fer la ciència. La història recent ens mostra que l’autoregulació de la disciplina segueix sent molt insuficient. Diversos sectors d’investigació han eludit i fins i tot violat les moratòries anteriors. Les motivacions al·legades són conèixer millor els virus per tal d’anticipar o prevenir l’aparició de patògens humans. Però aquestes experiències formen part d’un context on cal publicar força per complir amb els criteris d’un sistema extremadament competitiu i per obtenir finançament. Poden sorgir, doncs, conflictes d’interessos importants i requerir un arbitratge imparcial. Els autors proposen la creació d’una conferència internacional inspirada en les recents conferències climàtiques, que inclouen científics, líders polítics i representants de la societat civil, la qual cosa podria permetre negociar l’establiment d’una normativa internacional adequada. El desenvolupament de les opcions científiques requereix un marc democràtic i l’accés dels ciutadans a la cultura científica. Només una ampliació de la participació en les deliberacions sobre qüestions d’ètica en ciència i tecnologia pot garantir que aquesta conferència condueixi a una regulació duradora i eficaç.

Ashleigh Furlong After coronavirus vaccine breakthrough, mRNA pioneers pivot to cancer

Després de l’èxit de la utilització de l’ARN missatger en les vacunes contra el coronavirus, Ashleigh Furlong ressenya a Politico que Moderna i BioNTech tornen al terreny del càncer amb l’objectiu de desenvolupar un vaccí que previngui la recaiguda dels pacients. En efecte, l’èxit de les vacunes contra la COVID ha comportat que governs i reguladors se sentin còmodes amb la tecnologia i que els inversors s’afanyin per donar suport al potencial de l’ARNm. La investigació actual, però, se centra més en el tractament del càncer que en la seva prevenció, ja que no es pot predir la mutació que desencararà una divisió cel·lular incontrolable. Els experts també adverteixen d’un excés d’optimisme respecte de l’aplicació de l’ARNm al càncer, ja que aquestes vacunes hauran de fer front a la complexitat de les immunoteràpies. En qualsevol cas, si els investigadors poden superar les dificultats i crear vacunes viables i efectives, caldrà garantir-hi un accés equitatiu. Els vaccins seran cars i s’haurà de demostrar que els sistemes de salut es troben millor equipats amb aquesta eina que no pas amb alternatives més barates.

Stephanie H. Murray The Next Century’s Big Demographic Mystery

La United Nations Procurement Division apunta a un planeta molt més concorregut, el qual molts temen que amenaci d’esgotar els recursos naturals i augmentar les emissions de carboni. Sembla que tots els científics tenen idees diferents sobre què fer a continuació. Hi ha un ampli consens sobre la fiabilitat de les previsions demogràfiques a curt termini, però, sembla que només a la segona meitat del segle sorgeixen opinions divergents. Una sèrie de suposicions subjacent a aquestes discrepàncies. Però els demògrafs sospiten que els canvis de població a l’Àfrica del segle XXI no s’assemblaran als d’edats anteriors als països en desenvolupament. En canvi, la ràpida expansió de l’accés de les dones a l’educació moderna i a la anticoncepció efectiva pot accelerar el descens de la fertilitat. Una altra font de controvèrsia és què passarà amb la fertilitat a països rics com els Estats Units, Finlàndia i el Japó, on les taxes de fecunditat ja estan per sota del nivell de substitució. El repte d’una taxa de fecunditat decreixent és l’envelliment de la població, que no és un fenomen fàcil de corregir. Els països han implementat tota mena de polítiques anomenades pronatalistes. Per aquest motiu, totes les grans previsions coincideixen en una cosa: el creixement massiu de la població que va començar durant l’era industrial continuarà, però s’acabarà d’aquí a un segle. El món inevitablement envellirà en el procés. El desacord clau és quan exactament arribarà al pic la població i quant caurà. Tanmateix, independentment del moment en què precisament la població de la Terra assoleixi i disminueixi, els problemes causats per l’envelliment i el canvi climàtic seran greus si no es tracten. Acceptar tant podria ser un actiu si dirigeix els responsables polítics cap al que realment poden controlar. 

John Gray The sinister return of eugenics

En el Primer Congrés Internacional de l’Eugenèsia on s’hi van reunir polítics i ministres importants, es va establir una opinió conjunta. Des dels més conservadors racistes fins els més liberals van acceptar que la política eugenèsica serviria per “millorar” els grups considerats de “baixa qualitat” dins la societat. Van arribar al punt de considerar l’esterilització de persones “mentalment defectuoses”, entre altres barbaritats. Després de tota una presentació de mesures que la política eugenèsica proposava i gran part de la població progressista hi estigués d’acord, molts pocs països catòlics la van aplicar. Pels intel·lectuals, l’eugenèsia era un camí cap el progrés i el benestar humà. Però, dècades més tard, el progrés i el benestar humà resideixen autonomia personal i igualtat social.  L’Holocaust i la mort de tantíssimes persones que per motius d’orientació sexual, entre altres, eren suposadament “indignes” per viure, van suposar un canvi a la història. Rutherford, a Control: The Dark History and Troubling Present of Eugenics (Weidenfeld & Nicolson, 2022), explica que els eugenèsics somiaven amb una il·lusió de control i un poder colonial europeu. Per alguns era un avançament en els gens de la població, mentre que per altres era horrorosa la idea de poder fer bebès de disseny. És aquesta, l’ambició més radical de l’eugenèsia, la més perillosa pel futur. En el llibre, també es mencionen qüestions ètiques i morals i de com aquestes podrien afectar a la societat. De com podria arribar a ser ètic, matar a nens discapacitats per un bé comú i que no hi hagués gent més “poderosa” que una altra. L’objecció ètica més important és, però, com s’accepta que una persona tingui l’autoritat de decidir si una altra pot viure o no. Cal mencionar també el transhumanisme, que defensa les accions voluntàries de les persones per arribar a ser millors, però al final arribem a la mateixa conclusió que amb l’eugenèsia. Encara que els avenços en ciència i genètica en un futur puguin ser capaços de dur a terme una “persona perfecte”, el resultat serà esgarrifós. Podríem dir que l’escenari de l’infern seria aquest: els rics molt intel·ligents, molt esvelts i amb una vida molt digna i els més pobres, moribunds i desagradables.

... Y también recomendamos

Yasmeen Serhan The Muslim World Isn’t Coming to Save the Uyghurs

Ellen Ioanes How to understand the recent coups in Africa

Olivier de France & John Helferich Les spectres de la défense européenne se raniment

Alessandro Somma Trent’anni di Maastricht: sarebbe ora di cambiare rotta (ma non si può)

Erica Chenoweth & Zoe Marks Revenge of the Patriarchs. Why Autocrats Fear Women

Jacob Mchangama The War on Free Speech. Censorship’s Global Rise

Valerio de Stefano et al. The Metaverse is a labour issue

Lívia Machado Costa ¿Capital chino para proteger la biodiversidad en América Latina?

The Economist Building a metaverse with Chinese characteristics

Kara Swisher The Pandemic Culls the Big Tech Herd

back to top