“Per a mi la poesia i el feminisme comparteixen quelcom profund. La poesia és un espai i un temps privilegiat de pensament (i de sentiment): el llenguatge es mira a si mateix amb deteniment, s’estranya de si, potser fins i tot es reconcilia amb si mateix. El llenguatge, quan és poètic, alenteix, i després amplia, la nostra percepció del món. La mirada feminista també s’atura, i gairebé que traspassa, en/als llenguatges que ens fan subjectes històrics, polítics; llenguatges que es descobreixen, també, com a ideologia. Igual que la poesia esdevé una hiperconsciència, en una sensibilitat “alerta”, oberta a qüestionar tot el que semblava inqüestionable. Aquests poemes de l’obra La edad de merecer (2015; el títol del llibre reprodueix i resignifica tragicòmicament la famosa dita sexista), a més, tenen com a temàtica aquest despertar de l’autoconsciència, la “caiguda del vel als ulls” sobre què significa ser dona, quins estereotips travessen i modulen la nostra personalitat, quins són els costos, quines són les ambivalències, els perills”.
DAÑO Nº 8
a los 8 años llegó el peligro
de poder reproducirme
empieza la cuenta atrás de los 400
óvulos símbolo
del tiempo
y la gomorresina
se filtraba
por la mínima boca del reloj de arena
la madre de mi madre enfática y dorada
me regaló un crucifijo el hijo de Dios
esbelto y entregado brotaba de la trenza
cuidado con los hombres a partir de
ahora dijo ella
cuidado con el amor a partir de
ahora dijo ella
ahora ya eres toda una mujer
y el endometrio
imitaba a un pez anciano en su
descamación
el espanto de poder portar un bebé plegado
en mi intestino
por haberme besado ya con 3 o 4
primates
comenzó a expandirse
como una epidemia imaginaria inauguré
la hipocondría emprendí
el mal hábito de escribir poemas a todos los muchachos
y muchachas
con estrías suaves
y ojos suaves
que me manoseaban el corazón en el recreo
qué significa exactamente útero y qué significa exactamente
formar una familia
enid blyton implantaba el canon del verano en mi tímpano
y yo quería ser como jorge o como jorgina
en los aplausos de mis manos caían gotas
de sangre de delfín
aunque yo me fingía plenamente indiferente ante tanta
lluvia
a los 8 años a los 150 centímetros de hueso
alegre y músculo alegre
llegó el peligro de poder reproducirme
y de poder multiplicarme
sin literatura
y un sol azul
manchaba de estrógenos y de progesterona
los geranios y un sol azul
manchaba de vello recién nacido
las tímidas
axilas
EL RECORRIDO / EROS-GRAFÍA
primero, raspé la atmósfera
con palos, domé
la carcajada
aspiración máxima cuando era un bebé
más tarde, la caída:
terror a las encuestas
heridas en los codos
atrofia en los músculos naranjas
los hombres incurables
tenían voz nasal
criticaban al amor
por antihigiénico
y cómico
cínicos grupales impecables sus gafas
lúpulo cardíaco sacarina en el vientre
y yo
mientras tanto
insípidos gorgojos
clavículas y migas en las picaduras
un afán victoriano de paredes opacas
“romanticismo desvalido” era un insulto violento
para los habitantes del rígido delta de mis brazos
y yo
mientras tanto
mesaba mis pelusas
besaba a todos con mímica acrofóbica
amé manos viscosas, enferma
de nieve
buscaba calorina perfectamente llena
buscaba rojos étimos de dolor-en-raíz
pero si me colmaban
si algún hombre incurable me colmaba
si algún hombre incurable por error me colmaba
huía a desovar
río arriba
sola
DAÑO Nº 18
Creer que estás embarazada
Querer sexo (querer que quieran sexo
contigo) pero pasar el viernes sola
Ponerte en el pellejo de la hermana de Celan
que nunca apareció
Ver llorar a un anciano
que ha visto un reportaje en la televisión pública
sobre el abandono de ancianos; su triste párpado
de repente
chasquea
Ir al ginecólogo y decir
creo que estoy embarazada
Desmayarte de nervios y dolor; el doctor te hipnotiza
con su insulto feroz: “no sé por qué, querida,
te duele tanto este dilatador: es
para vírgenes”
Decirle a tu madre
he ido al ginecólogo
porque creía que estaba embarazada
Ah, ¿ya mantenéis relaciones sexuales completas?
Y sin precauciones, estoy decepcionada
Ver que tu madre está decepcionada, tu
madre está
decepcionada
Ponerte en el pellejo de Celan
que jamás encontró a su hermana
imaginaria
Ponerte en el pellejo de Gisèle porque
Celan intentó estrangularla porque
jamás encontró a su hermana
imaginaria
Querer gustarle pero él te dice
si quieres vamos a mi cuarto o a tu cuarto
Lleváis apenas 10 minutos
con los besos no te fías
de él
Querer sexo pero no fiarse
Ah, ¿pero querías algo auténtico?
Y sin precauciones, estoy decepcionado
Me dijiste que tenías el corazón atado
al tobillo
Lo siento lo solté un momento me dormí
y se me escapó
Es un desobediente
Muy mal muy mal pídele perdón al chico
Perdón
chico
DEDOS DE PIANISTA + LA CARA QUE PUSO LUDWIG VAN BEETHOVEN CUANDO LE DIJE QUE QUERÍA ESCRIBIR UN POEMA CON MÁS O MENOS RIMA + POR QUÉ ABANDONÉ LA MÚSICA Y POR QUÉ MENCIONÉ AL MENOS UNA VEZ LA BRISA + SALUTACIÓN OPTIMISTA A LOS SUCESIVOS AMANTES Y AL TÚ LÍRICO QUE SIEMPRE ES PLURAL + SALUTACIÓN CORDIAL A AQUELLA PROFESORA DE SOLFEO (1998-2000)
allegro con brío, adagio molto (attacca), allegretto moderato
(A)
abandoné el piano
y la virginidad
por los mismos motivos filológicos
“fracasar más” “fracasar mejor” todo eso
no-exactamente-es-este-poema
lo contrahecho lo frustrado lo amotinado muy
natural
por eso,
tuve que abandonar mis estudios de piano
y mi virginidad
no-exactamente-el-mismo-día,
bajo esa misma
lluvia,
bajo ese mismo
lodo,
o bruma, o brisa, o lluvia
tan acústica tan
abrumadora muy
natural
por eso,
tuve que abandonar el piano y la virginidad
y la lluvia y la lluvia que cae
sobre la lluvia caída
no-exactamente-el-mismo-día
no-exactamente-ayer:
la palabra
fracasa más y mejor,
la palabra
palabra
fracasa más y mejor[1]1 — después del orgasmo pitan los oídos la cabeza cae hacia atrás golpe de gracia resulta tierno abofetear el pubis así se enfanga el grito el escándalo la música exacerba lo que ya estaba ahí el grito del amor se queda a medias como un estornudo pronunciado a medias el amor es un estornudo a medias interrumpido por otro estornudo cruje un acto reflejo escandalosamente poso el cráneo en tu dulcísimo cráneo un gramófono anterior a la sonata en do mayor acentúa y duplica los antojos también amplía el bienestar y existe y no se acaba este chirrido anímico la canción no añade color sólo subraya el prodigioso matiz de tus nudillos y no es la infancia sino el escrúpulo quien me espeta el insulto cuando tú te has ido no entiendes el alma de una fusa te arrinconan las corcheas cuando llego a casa leo en el pentagrama una nota de la profesora de solfeo (1998-2000) lees mal deja la música no te sale muy natural lees mal tiendes al poema
(B)
paralizada ante el vals y el cunnilingus,
y comprendiendo
que no bastaban que no bastan que no bastarían
que no bastarán jamás
ni mi canción ni mi cuerpo
para todo eso
(labuhardillaparíslacavidadpleuraldelasnoviasenlaluna
demieldeflor
enflorlanochedeparíslareverberación
delafaldadelamejilla
delacordilleralabildungsroman),
comencé a balbucir.
balbucí mucho, desde luego.
y luego,
comencé a escribir y escribí un poema muy
natural con más o menos rima y
con más o menos desesperación y
con más o menos amanecer semi-cliché y orquestas
semi-profesionales y
llovía mucho
es decir
abrumaba mucho y sé
que debería mencionar al menos una vez la brisa[2]2 — cuando crezco los sucesivos amantes señalan la longitud nigromántica de mi dedo corazón tienes dedos de pianista dice ella pero para pasar de curso tendrás que acariciar todos los huesos del maestro Ludwig van Beethoven dice ella tienes dedos de pianista pero tendrás que ser excelente tendrás que desmayarte con los ojos abiertos tendrás que dejar de traducir lluvias y brumas y lodos y brisas mediante aturdidísimos poemas sobre parís dice ella y yo lo intento furiosa y laboriosa pero fracaso y fracaso mejor y mucho mejor el vaivén del sacrificio segrega un rojo fresco muy conmovedor entonces soy un lugar reseco un compás reseco toco muy bien la für elise en un órgano eléctrico de 5 escalas allí me pierdo mis padres me lo compraron para que fuera feliz allí me encuentro conclusión años después llegas tú quemas todo y retiras el vinilo despegando la aguja del ejemplo conclusión yo prefiero el braille y la cereza años después llegas tú señalas con tu dedo corazón la longitud nigromántica de mi dedo corazón fosforito mis padres me compraron una libreta con arabescos y búhos para que fuera feliz para que buceara en el ardid de ciertos aturdidísimos poemas sobre ciertos amaneceres semi-cliché y sobre un tal Waldstein conclusión escribí un poema con más o menos rima y el perímetro del tocadiscos lindaba con mi cuerpo muy naturalmente que lindaba y linda con tu cuerpo muy naturalmente dices tienes dedos de pianista pero no toques nada no lo vayas a romper dices iremos a la playa a remover cascajos de fuego y releeremos la biblioteca de tu lactancia dices me gusta mucho tu ínclita zarza ubérrima dices las olas son cúpulas onomatopeyas del fin del mundo aunque te burles bondadosamente de todo aunque declames numerosas cantinelas extra−modernistas aunque tengas dedos de pianista yo te amo dices bésame en el corazón de esta mnemotécnica gruta bésame desde tu niñez y desde tu vejez y desde tu colección de lluvias y brumas y lodos y brisas dices bésame cállate ya por favor y no escribas esto no lo vayas a romper
(C)
es muy comprensible,
señores y señores de la Real Academia
de la Lengua, amigos
y enemigos de Ludwig van
Beethoven, a quien culpáis de
todo
porque no entendéis
nada, a quien culpáis de
todo, porque todo es
la nada
(culpar a Beethoven es
lo más fácil del
mundo:
el mundo y la nada y el sexo son
decepcionantes)
es muy comprensible, sin duda, vuestra queja:
abandoné el piano
y la virginidad
por los mismos motivos filológicos
llamémosle rebeldía llamémosle lucidez llamémosle
resignación:
ni mi canción sin palabras
ni mi cuerpo sin las palabras del otro
valían nada
valdrían nada valdrán nada nunca
me rendí comprendí todo
me rindo,
luego escribo[3]3 — muchos años después dices las briznas son cifras tus manos tararean cataratas vocalizan mimo erotismo xilófago tienes manos de pianista esto lo escribí pensando en ti pero ahora estoy pensando en otro esto también es música roer madera esto también es música huir de parís esto también vuelve al principio a la lesión de no ser música a la lesión de ser palabra me rindo luego escribo esto también es una caricia es una bofetada el mundo y la nada y el sexo no son decepcionantes saludo con optimismo al tú lírico que siempre es plural y cordialmente a aquella profesora de solfeo (1998-2000) deja la música no te sale muy natural lees mal lo siento por ti tiendes al poema
-
NOTES
1 —después del orgasmo pitan los oídos la cabeza cae hacia atrás golpe de gracia resulta tierno abofetear el pubis así se enfanga el grito el escándalo la música exacerba lo que ya estaba ahí el grito del amor se queda a medias como un estornudo pronunciado a medias el amor es un estornudo a medias interrumpido por otro estornudo cruje un acto reflejo escandalosamente poso el cráneo en tu dulcísimo cráneo un gramófono anterior a la sonata en do mayor acentúa y duplica los antojos también amplía el bienestar y existe y no se acaba este chirrido anímico la canción no añade color sólo subraya el prodigioso matiz de tus nudillos y no es la infancia sino el escrúpulo quien me espeta el insulto cuando tú te has ido no entiendes el alma de una fusa te arrinconan las corcheas cuando llego a casa leo en el pentagrama una nota de la profesora de solfeo (1998-2000) lees mal deja la música no te sale muy natural lees mal tiendes al poema
2 —cuando crezco los sucesivos amantes señalan la longitud nigromántica de mi dedo corazón tienes dedos de pianista dice ella pero para pasar de curso tendrás que acariciar todos los huesos del maestro Ludwig van Beethoven dice ella tienes dedos de pianista pero tendrás que ser excelente tendrás que desmayarte con los ojos abiertos tendrás que dejar de traducir lluvias y brumas y lodos y brisas mediante aturdidísimos poemas sobre parís dice ella y yo lo intento furiosa y laboriosa pero fracaso y fracaso mejor y mucho mejor el vaivén del sacrificio segrega un rojo fresco muy conmovedor entonces soy un lugar reseco un compás reseco toco muy bien la für elise en un órgano eléctrico de 5 escalas allí me pierdo mis padres me lo compraron para que fuera feliz allí me encuentro conclusión años después llegas tú quemas todo y retiras el vinilo despegando la aguja del ejemplo conclusión yo prefiero el braille y la cereza años después llegas tú señalas con tu dedo corazón la longitud nigromántica de mi dedo corazón fosforito mis padres me compraron una libreta con arabescos y búhos para que fuera feliz para que buceara en el ardid de ciertos aturdidísimos poemas sobre ciertos amaneceres semi-cliché y sobre un tal Waldstein conclusión escribí un poema con más o menos rima y el perímetro del tocadiscos lindaba con mi cuerpo muy naturalmente que lindaba y linda con tu cuerpo muy naturalmente dices tienes dedos de pianista pero no toques nada no lo vayas a romper dices iremos a la playa a remover cascajos de fuego y releeremos la biblioteca de tu lactancia dices me gusta mucho tu ínclita zarza ubérrima dices las olas son cúpulas onomatopeyas del fin del mundo aunque te burles bondadosamente de todo aunque declames numerosas cantinelas extra−modernistas aunque tengas dedos de pianista yo te amo dices bésame en el corazón de esta mnemotécnica gruta bésame desde tu niñez y desde tu vejez y desde tu colección de lluvias y brumas y lodos y brisas dices bésame cállate ya por favor y no escribas esto no lo vayas a romper
3 —muchos años después dices las briznas son cifras tus manos tararean cataratas vocalizan mimo erotismo xilófago tienes manos de pianista esto lo escribí pensando en ti pero ahora estoy pensando en otro esto también es música roer madera esto también es música huir de parís esto también vuelve al principio a la lesión de no ser música a la lesión de ser palabra me rindo luego escribo esto también es una caricia es una bofetada el mundo y la nada y el sexo no son decepcionantes saludo con optimismo al tú lírico que siempre es plural y cordialmente a aquella profesora de solfeo (1998-2000) deja la música no te sale muy natural lees mal lo siento por ti tiendes al poema

Berta García Faet
Berta García Faet és poeta i traductora. Va néixer a València l'any 1988 i és autora dels llibres Los salmos fosforitos (La Bella Varsovia, 2017), guardonat amb el Premi Nacional de Poesia Jove Miguel Hernández 2018, i La edad de merecer (La Bella Varsovia, 2015), traduït a l'anglès per Kelsi Vanada amb el títol de The Eligible Age (Song Bridge Press, 2018). També ha escrit quatre poemaris més, reunits a Corazón tradicionalista: Poesía 2008-2011 (La Bella Varsovia, 2017).